17 Noviembre de 2016 11:28
Luego de más de 300 días presa, el presente de Milagro Sala parecería vislumbrar una luz al final del túnel: el Gobierno encabezado por Mauricio Macri invitará a una misión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA y al Grupo de Trabajo de la ONU con el objetivo de que evalúen la situación judicial y procesal de la líder de la Tupac Amarú.
Milagro Sala tuvo un trato muy cercano con CFK
Durante los últimos días, Macri y su gente enfrentaron varios embistes internacionales por organismos de derechos humanos que reclaman la liberación o rápido enjuiciamiento de la dirigente social, que formó parte del círculo de confianza de Cristina Fernández de Kirchner.
Según informó La Nación, la invitación formal a la CIDH y al Grupo de Trabajo de la ONU se definió ayer tras una reunión que hubo entre funcionarios de la Cancillería, la Secretaría de Derechos Humanos, la Jefatura de Gabinete y el gobernador de Jujuy Gerardo Morales.
Macri, acorralado por los organismos de DDHH de todo el mundo
El objetivo de la invitación es que las misiones de la OEA y la ONU puedan reunirse tanto con Milagro Sala como con el gobernador Morales y los funcionarios judiciales que llevan adelante la causa por malversación de fondos en la Tupac Amaru.
Amnistía también pide por Milagro Sala
La última presión que tuvo Macri con el caso Milagro Sala provino de Amnistía Internacional: la ONG le entregó una carta al primer ministro canadiense Justín Trudeau, que se reunirá hoy con el mandatario argentino, pidiendo por la liberación inmediata de la líder de la Tupac.
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Este reclamo se le suma al que hizo hace un mes ONU mediante un informe realizado por el Grupo de Trabajo de Naciones Unidas, donde se evaluó que la detención de Sala “es arbitraria” y recomendó su liberación inmediata.
El fiscal de Estado de Jujuy, Mariano Miranda, sostiene que Sala no está presa por protestar sino por corrupción.
Cuando esta cuestión se hizo pública, el Gobierno minimizó el pedido al considerar que el informe no es vinculante. Sin embargo, un sector ligado a la Cancillería cree que se debe cumplir con el mandato de ese organismo y liberar a la dirigente, marcando una grieta interna en el macrismo, que en su gran mayoría apoya a Morales, el principal interesado que Sala esté presa.
Los organismos de derechos humanos reclamas por las irregularidades en los motivos por la detención de la líder de la Tupac: fue arrestada en enero por el cargo de sedición por liderar una manifestación y luego fue exculpada, pero siguió presa porque cuando debía ser liberada fue acusada de malversación de fondos.