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Política

Proscripción y críticas a Macri: 9 claves de la defensa de los hijos de CFK

Máximo y Florencia  Kirchner presentaron dos escritos ante el juez Federal Claudio Bonadio. Cómo es la estrategia de los dos acusados.

06 Marzo de 2017 09:49
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Mañana agitada en Comodoro Py. Florencia y Máximo Kirchner prestaron hoy declaración indagatoria ante el juez federal Claudio Bonadio. Su defensa, en el marco de la causa Los Sauces que los investiga por enriquecimiento ilícito, se sustentó en denunciar “persecución política”.

Florencia llegó temprano a Comodoro Py. Se limitó a presentar un escrito.

La defensa de Florencia

La primera en llegar fue la hija de Cristina Kirchner, acompañada por Oscar Parrilli. Estuvo menos de treinta minutos dentro del Palacio de Tribunales. Se limitó a ingresar al despacho de Bonadio en el cuarto piso y presentó un escrito. Las principales claves de su defensa, en manos del abogado familiar Carlos Beraldi:

"Está claro que no estamos ante un problema jurídico, sino ante un ejemplo liso y llano de persecución política y provocación por ser la hija de los ex presidentes Néstor Carlos Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner".

Reclamó que se levante el embargo sobre su sueldo de $50 mil pesos como empleada de Los Sauces.

 

Definió a la empresa inmobiliaria investigada como una “típica sociedad familiar, caracterizada por el vínculo de confianza de sus miembros”.

"Mi relación con Los Sauces se inicia como consecuencia del episodio más triste de mi vida", declaró, en alusión a la muerte de su padre, Néstor Kirchner.

Se abrazó con Hebe de Bonafini tras abandonar Tribunales.

"Los Sauces se constituyó en noviembre de 2006, cuando recién había alcanzado los 16 años de edad. En ningún momento de mi vida integré una asociación criminal ni tampoco participé de maniobras de lavado de activos de origen ilícito, ni en ningún otro delito".

El escrito que presentó Máximo

Máximo también presentó un escrito, en el que habló de "proscripción".

Media hora después de que su hermana se retirara del recinto, Máximo hizo su ingreso a Comodoro Py. Estuvo sólo quince minutos. También presentó un escrito. Los puntos sobresalientes de su defensa:

"Resulta evidente que están decididos a proscribir a la ex Presidenta de la Nación, tal como expresamente lo reconoció en múltiples reportajes la diputada Stolbizer, denunciante crónica de mi familia e ideóloga junto a Bonadio de esta causa".

 

"Sin embargo, el saqueo del Estado por parte de los conspicuos miembros de la Patria contratista, los escándalos del Correo Argentino, Avianca-MacAir, el escándalo Arribas, entre otros tantos, los miles de despidos, el recorte de las jubilaciones, todas las mentiras de campaña y la crisis social desatada por la aplicación de las mismas políticas neoliberales que llevaron al país a la ruina no pueden ser ocultadas a través de este ni cualquier otro expediente judicial".

"Debo dejar constancia de que este proceso supuestamente 'judicial' es la muestra más palmaria de la campaña de persecución y hostigamiento de la cual es víctima mi familia".

El hijo de CFK aseguró que se trata de una maniobra para respaldar la gestión de Macri.

"Acusan a la empresa de ser un enjambre societario. ¿Sabe VS para qué se hace un enjambre societario? Simple, para ocultar los verdaderos dueños y evadir impuestos fugando capitales de dinero de la corrupción, entramado revelado a nivel global con el escándalo de Panamá Papers".

Florencia también criticó a Macri.

La causa por la evalúan su procesamiento

Los hijos de la ex presidenta debieron declarar en el marco de la causa que los tiene imputados por los movimientos de Los Sauces S.A., su empresa inmobiliaria. El expediente se inició después de que Margarita Stolbizer presentara una denuncia, en principio por presunta falsificación de documentos.

La denuncia inicial fue presentada por Margarita Stolbizer.

El peritaje contable solicitado por el fiscal que interviene,

Carlos Rívolo, arrojó que

la firma de millonarias ganancias registradas tuvo sólo dos inquilinos: Lázaro

Báez

y Cristóbal López. El juez, que ahora deberá definir si procesa o no a los hermanos

Kirchner, investiga si se trató del pago de “retornos” a cambio de beneficios en la obra pública.