14 Abril de 2025 07:50

El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, logró este domingo una contundente victoria en las elecciones de convencionales constituyentes, al imponerse con holgura en los 19 departamentos de la provincia y garantizarse, según sus propios cálculos, una mayoría propia para avanzar con la reforma constitucional que impulsa desde su llegada al poder. "Quiero agradecerle a Dios la fuerza que me da todos los días para llevar adelante los destinos de la provincia invencible de Santa Fe. Quiero agradecerle a cada santafesino que hoy le permitió al frente Unidos para cambiar Santa Fe que nos permitió ganar en los 19 departamentos provinciales", manifestó.
La jornada electoral marcó un fuerte respaldo a su gestión, pero también reveló una baja participación ciudadana y una fragmentación del voto opositor que dejó al oficialismo con un camino despejado hacia la modificación de la carta magna provincial. Pullaro, líder del frente Unidos para Cambiar Santa Fe, celebró la victoria en un encendido discurso donde agradeció el respaldo del electorado y delineó los principales objetivos de la reforma: el fin de la reelección indefinida, la eliminación de los fueros, la implementación de la ficha limpia y la consagración del equilibrio fiscal y la seguridad como principios constitucionales. "Estamos discutiendo el futuro. Vamos a garantizar una provincia sin corrupción, con instituciones sólidas y sin privilegios", aseguró desde el escenario, visiblemente emocionado.
Con el 72% de las mesas escrutadas, la lista oficialista obtenía el 36,69% de los votos, una ventaja de más de 20 puntos respecto al segundo lugar, ocupado por el frente Más para Santa Fe que lidera el rosarino Juan Monteverde (14,14%). En tercer lugar, y como sorpresa para algunos sectores, quedó la Libertad Avanza (LLA), representada por el diputado nacional Nicolás Mayoraz, que obtuvo el 13,57%. La mediática Amalia Granata, con su boleta Somos Vida y Libertad, alcanzaba el 12,80% y se ubicaba cuarta en la competencia por distrito único. El resultado de LLA no debería sorprender puertas adentro de la Casa Rosada a juzgar por el mensaje que el viernes último se le filtró al ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, respecto de que en la provincia de la bota "les iba a ir muy mal".
Aunque el desempeño de Pullaro fue indiscutido, el dato saliente de la jornada fue la baja participación electoral: apenas un 58% del padrón acudió a las urnas, muy lejos del millón de votos que en 2023 le dieron al gobernador el triunfo en la elección general. Desde el oficialismo relativizaron la cifra y señalaron que la concurrencia fue similar a la registrada en las PASO de hace dos años, aunque en la oposición no tardaron en señalar el descenso como un síntoma de desapego a la política institucional.
Más allá de las cifras, el escenario político santafesino mostró nuevas configuraciones. La candidatura de Monteverde logró consolidar al peronismo en el segundo lugar, en una interna donde desplazó a figuras tradicionales como Marcelo Lewandowski y Roberto Sukerman. A pesar de las resistencias dentro del PJ, el líder de Ciudad Futura capitalizó el respaldo de un sector importante del electorado urbano y ya se perfila como un potencial candidato para 2027.
En el caso de LLA, si bien quedó relegada al tercer puesto, su desempeño no pasó desapercibido. El resultado confirmó los pronósticos que el propio oficialismo nacional manejaba de manera reservada: una mala elección en la "provincia de la bota". La derrota fue interpretada como una muestra más de que la batalla cultural que promueven desde el gobierno de Javier Milei aún no encuentra eco suficiente en ciertos territorios clave.
Sin embargo, hubo un triunfo simbólico para el mileísmo en Rosario: Juan Pedro Aleart, periodista y víctima de un resonante caso judicial por abuso intrafamiliar, se impuso como concejal y convencional constituyente. Su victoria fue celebrada como un hito por parte de la dirigencia libertaria, que lo presentó como una figura disruptiva frente a la "casta política tradicional".
Por su parte, Granata aprovechó su buen resultado -pese a quedar fuera del podio- para lanzar duras críticas contra el gobernador. "Más de la mitad de la provincia votó en contra de Pullaro y su proyecto personalista de poder que nada tiene que ver con las necesidades más urgentes de la provincia: seguridad, salud y educación. Esta elección demuestra que el modelo de Pullaro no va a ningún lado. Perdió la mitad de los votos, más de 500 mil respecto a su última elección", afirmó la legisladora.
El triunfo de Pullaro también activó gestos en la oposición nacional. El ex presidente Mauricio Macri lo felicitó por videollamada, acompañado por Silvia Lospennato y Gisela Scaglia. "El PRO está en todo el país", celebró la diputada nacional, mientras Martín Lousteau, presidente de la UCR, se sumaba a los festejos. La foto de la noche evocó la vieja sintonía de Juntos por el Cambio y dejó entrever posibles alianzas de cara a 2027.
Con 33 convencionales asegurados, Pullaro avanza con paso firme hacia una reforma constitucional que no solo busca modernizar el sistema institucional santafesino, sino también abrirle la puerta a su propia reelección. Mientras el país se prepara para la apertura de los mercados sin cepo y un dólar flotante, Santa Fe parece haber definido su propio rumbo, apostando por una gobernabilidad con sello propio y sin derrotas en el mapa provincial.