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"¡Que no nos roben ningún voto!": cómo funciona el centro de cómputos paralelo del Frente de Todos

El Frente de Todos preparó para estas elecciones un centro de cómputos paralelo donde llevarán a cabo la carga de datos con imágenes enviadas por fiscales de todo el país. 

por Agusti­n Gulman

27 Octubre de 2019 21:14
CFK
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Sin los datos oficiales y con una clara imagen de desazón en el búnker de Juntos por el Cambio en Costa Salguero, el presidente Mauricio Macri había dado la cara aquel 11 de agosto y reconoció la derrota en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Lo hizo sin saber la abultada diferencia: Frente de Todos obtuvo 47% y Juntos por el Cambio 31,79 por ciento. Durante su breve descargo no dudó en mandar a todos los argentinos a “dormir”.

En aquella oportunidad, la empresa encargada del escrutinio provisorio, Smarmatic, demoró la entrega de los resultados, provocando la lógica molestia de la oposición. Temiendo que pudiera llegar a existir otra vez algún tipo de irregularidad en estas elecciones generales con el recuento de los votos, el Frente de Todos armó una app a la que bautizó como “muévete”.

La aplicación, que fue descargada por todos los fiscales partidarios de cada mesa en el país, se encarga de recopilar directamente los datos de las mesas una vez finalizada la elección y terminado el recuento de votos.

Una vez que terminaron de contar los votos en cada mesa, los fiscales le sacan una foto al telegrama, al acta o ambas, y la cargan en la app. Estas imágenes se trasmiten a través de la aplicación y llegan a un centro de cómputos, que según le adelantaron a BigBang, se encuentra ubicado a diez cuadras del búnquer del Frente de Todos, en Chacarita.

En este centro de cómputo, hay alrededor de 500 personas haciendo una bajada de todos los datos recopilados para que el usuario pueda ver los resultados “reales” de estas elecciones generales a través de la aplicación. La idea -adelantaron- es tener los datos más precisos.

Este sistema durante las PASO funciono bien y tuvo un margen de error de solo el 0,3 por ciento. Esta aplicación comenzó a ser elaborada por gente experta en redes sociales y campañas virtuales después de 2017, cuando Cristina Fernández de Kirchner tuvo que esperar al escrutinio definitivo para conocer su victoria sobre Esteban Bullrich.

En aquella oportunidad, la noche fue larga y la espera pareció eterna. Pasadas las 3.40 de la madrugada, la ex presidenta fue la última precandidata en hablar después de que se conocieran los resultados provisorios de las PASO. La ex mandataria dijo que Unidad Ciudadana ganó en la provincia de Buenos Aires y había calificado de "bochorno" el recuento.

Después de esa experiencia comenzaron a trabajar en este sistema con el objetivo de tener datos precisos, previendo de que pudiera haber algún tipo de irregularidad.

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