¿Quién nos protege de la violencia machista? La nueva agenda frente a la eliminación del Ministerio

Con la degradación del ministerio a Subsecretaría de protección contra la Violencia de Género se rebajan también las políticas públicas y el acceso a herramientas contra la violencia machista. Este panorama no deja de ser desolador: con la pérdida de recursos económicos y de formación se incrementará la pobreza estructural de mujeres y personas del colectivo LGBT.

Este contexto, lleva a toda persona feminista a tejer -como tantas otras veces- redes de contención y de lucha para sobrellevar el avance del ala ultraderechista que Javier Milei y su séquito político implantan con el DNU reformista que tiene como primera finalidad achicar el Estado para luego ir por los derechos conquistados. 

Raquel Vivianco, fundadora de "Ahora Que Sí Nos Ven", el observatorio que trabaja poniendo en cifras los femicidios mes a mes en Argentina, fue también trabajadora del estado en el área del ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad (MMGYD). 

Desde su punto de vista, "seguramente volvamos a encontrarnos frente a un escenario de feminización de la pobreza como el que vivimos durante la crisis del 2001" y, paralelamente agrega que seguramente: "También volvamos a construir respuestas solidarias y colectivas impulsadas principalmente por mujeres ante la ausencia del Estado.

¿Por qué surgió la necesidad de la creación del Observatorio? ¿Cómo empezó y cómo está ahora?

-El Observatorio se creó luego de la masiva movilización del 3 de junio del 2015 conocida como "Ni Una Menos", por ese entonces no había datos oficiales sobre femicidios, travesticidios ni transfemicidios en nuestro país, sólo contábamos con datos producidos por una ONG (cuya presidenta luego fue convocada a presidir el Consejo Nacional de las Mujeres durante la gestión de Mauricio Macri). 

El hartazgo frente al hecho de que la violencia machista se cobrara la vida una mujer por día y la necesidad de denunciarlo públicamente para que algo cambie nos motivó a crear el Observatorio. Por ese entonces éramos un grupo de compañeras que empezamos a pensar estrategias de intervención en la agenda pública, mediática y de gobierno a partir del relevamiento de datos publicados en distintos medios de comunicación gráficos y digitales de todo el país, a través de los cuales hacer visible y denunciar el flagelo de los asesinatos motivados por el género, y exigir políticas públicas para su prevención, sanción, erradicación y reparación. 

En estos años el Observatorio ha tenido gran reconocimiento y visibilidad constituyéndose en una fuente de información legitimada para muchos medios, a la vez que ha ampliado la selección de indicadores relevados y complejizado el análisis para que podamos hacerlo de manera situada, intentando comprender los contextos en los que suceden los femicidios, travesticidios y transfemiscios. 

El equipo se fue renovando con el transcurrir de los años y actualmente se nutre de la participación de compañeras muy valiosas, formadas en distintas disciplinas y recorridos, muchas de las cuales viven en otras provincias del país y se sumaron durante la pandemia de manera virtual, todas hacen un enorme trabajo comprometido y militante. 

Frente a la adversidad del avance de la ultraderecha, ¿cuáles pensás que son los principales frentes de lucha?

-Desde los feminismos populares tenemos en claro que es tiempo de reagruparnos para resistir, aliarnos con otrxs y pensar colectivamente estrategias para frenar el avance de la derecha en el avasallamiento de nuestras conquistas y derechos. Tanto el DNU como la mal llamada "Ley Ómnibus" atentan contra los derechos del conjunto de la población llevándonos inexorablemente a un contexto de crisis extrema, desocupación creciente, aumento de la pobreza y precarización de la vida. 

En ese marco las mujeres, identidades feminizadas, las personas LGBTIQ+ y las infancias seremos quienes sufriremos el impacto diferenciado de las medidas económicas anunciadas por el nuevo presidente sobre nuestras vidas, ya que se acrecentarán las brechas de género y como es sabido la pobreza tiene cara de mujer. 

Los recortes en áreas sensibles del Estado destinadas a proteger nuestros derechos: a vivir una vida libre de violencias, a la salud, a la educación, al trabajo, entre otros; y las derogaciones de leyes centrales para nuestra supervivencia (ley de alquileres, leyes laborales, leyes de control de producción, venta y precios de los alimentos, etc.), nos arrojan a una situación de extrema fragilidad porque somos las mujeres quienes asumimos principalmente las tareas de cuidado y sostenimiento de la vida dentro y fuera de nuestros hogares. 

Somos conscientes de que no hay otro camino que tejer redes y ocupar las calles, como hemos hecho durante todos estos años"

Somos conscientes de que no hay otro camino que tejer redes y ocupar las calles, como hemos hecho durante todos estos años, somos hijas y nietas de los pañuelos blancos y madres de los pañuelos verdes. Somos quienes parimos una nueva ola feminista que recorrió el mundo bajo el grito de Ni Una Menos y quienes gestamos una inmensa Marea Verde que logró la legalización del aborto. 

¿Cuál pensás que será el rol de la justicia en este contexto?

Desde los feminismos venimos exigiendo una Reforma Judicial Feminista que de cuenta y esté a la altura de los avances legislativos en materia de DDHH de mujeres y LGBTIQ+ y deje de revictimizar a quienes reclaman protección y reparación ante situaciones de violencia por motivos de género, venimos exigiendo que apliquen la Ley Micaela, de formación obligatoria para todos los agentes del sistema de administración de justicia, dado que es el poder más atrasado en la materia y que mayores resistencias pone al momento de incorporar la mirada de género e interseccional en todo su accionar. 

Espero que en este contexto al menos respete y haga respetar la Constitución Nacional frente al intento de Reforma Constitucional de Facto que quiere llevar adelante Milei. 

¿Cuál es el rol que ocupaba el ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad en la prevención de la violencia machista?

-El ex Ministerio de las Mujeres Género y Diversidad, degradado recientemente a Subsecretaría de protección contra la Violencia de Género por la gestión Milei, fue una conquista de los feminismos. Si bien la institucionalización de las políticas públicas de protección de los derechos de las mujeres data del año 1992, cuando se creó el Consejo Nacional de la Mujer, nunca alcanzaron mayor jerarquía que la obtenida durante la gestión de Alberto Fernández. Por primera vez tuvimos en el Gabinete Nacional una Ministra representando nuestros intereses e impulsando políticas transversales, algo inédito en la historia de nuestro país. 

Seguramente las políticas impulsadas desde el MMGYD fueron insuficientes... porque como sabemos, la solución de fondo a las desigualdades estructurales de género y a la erradicación de las violencias machistas requiere de una profunda transformación sociocultural, que como sociedad aún estamos muy lejos de alcanzar; más si tomamos en consideración que el nuevo presidente electo ganó con un discurso negacionista de las brechas de género.

Por ello es tan importante que el Estado nacional y los Estados provinciales jerarquicen las áreas de géneros e intervengan llevando adelante distintas políticas e iniciativas tendientes a modificar patrones socioculturales, que permanecen arraigados en las creencias y vivencias de una parte importante de nuestra sociedad perpetuando las desigualdades estructurales que generan la violencia machista. 

El rol de estas áreas es implementar las leyes y compromisos internacionales adquiridos en materia de DDHH para garantizar a las mujeres y diversidades su derecho a vivir una vida libre de violencias, impulsando políticas transversales de prevención y erradicación de las violencias motivadas por el género, y llevando adelante políticas diferenciadas para promover la plena autonomía económica de mujeres y LGBTIQ+ (trabajo registrado, acceso a vivienda y a créditos, políticas de cuidados, etc.) 

Desde el MMGYD se llevó adelante (entre otras políticas) la implementación del Plan Nacional de Acción contra las Violencias por Motivos de Género, de acuerdo a lo establecido en la ley 26.485, desde donde se impulsaron Programas y acciones orientadas a la prevención, sanción, erradicación de las violencias y reparación a víctimas y familiares de víctimas de la violencia motivada por el género, a saber: 

• Programa Acompañar, Atención de la Línea 144; 
• Programa Acercar Derechos (PAD); 
• Políticas de reparación comunitaria con el Proyecto "Territorios y Memoria"; 
• Red de Asistencia Integral de las Violencias por Motivos de Género; 
• Programa para el Apoyo Urgente y la Asistencia Integral Inmediata ante Casos de Violencias extremas por motivos de género (PAU); 
• Cuerpo de Abogadas y Abogados para Víctimas de Violencia de Género; 
• Reparación económica para niñas, niños y/o adolescentes en el marco de la Ley N° 27.452 (RENNyA); 
• Campaña Nacional de Prevención "Argentina contra las Violencias de Género";
•  Masculinidades sin violencias, entre otras. 

Para ver el informe completo del a gestión del MMGYD, haga click aquí  

¿Cómo impactará en la vida de las mujeres/diversidades la ausencia del Ministerio?

-Es de esperar que el achicamiento de las políticas públicas destinadas a garantizar los derechos de las mujeres y LGBTIQ+ impacte de manera diferenciada en nuestra vida. A la ausencia del Ministerio se le suman los recortes en áreas claves del Estado (salud, educación, empleo) y reformas propuestas que si son aprobadas en el Congreso tendrán graves consecuencias para el conjunto de la sociedad y particularmente para quienes nos encargamos del sostenimiento de la vida de las personas con dependencia (niñxs, adultos mayores, etc.).

Es de esperar un recrudecimiento de la violencia machista avalado por el discurso de odio que promueven quienes se impusieron en las últimas elecciones, según los datos del Registro Nacional de Femicidios elaborado por el Observatorio "Ahora Que Sí Nos Ven" durante el 2023 hubo 308 femicidios en la Argentina (1 cada 28 horas.); y una mayor precarización de nuestras condiciones de vida que estarán afectadas producto de la terrible crisis económica a la que nos está arrojando el gobierno de (Javier) Milei.

Seguramente volvamos a encontrarnos frente a un escenario de feminización de la pobreza como el que vivimos durante la crisis del 2001 y también volvamos a construir respuestas solidarias y colectivas impulsadas principalmente por mujeres ante la ausencia del Estado.

Seguramente volvamos a encontrarnos frente a un escenario de feminización de la pobreza como el que vivimos durante la crisis del 2001 y también volvamos a construir respuestas solidarias y colectivas impulsadas principalmente por mujeres ante la ausencia del Estado. 

Reporte de femicidios durante 2023

BigBang accedió a los números de femicidios durante el año 2023 gracias a la labor del Observatorio "Ahora que sí nos Ven" que conducen Analía Morra y Laura Oszust. Las cifras, son impactantes.En Argentina hay:

• En 2023 hubo 308 mujeres muertas por violencia machista. Es decir, 1 femicidio cada 28 horas en 2023. Solo en diciembre hubo 1 femicidio cada 24 horas;
• Hubo además 6 Transfemicidios/travesticidios;
• Se contabilizaron 351 intentos de femicidio y 52 intentos de femicidios vinculados en 2023; 
• En el 46,4% de los casos, el femicidio ocurrió en la vivienda de la víctima;
• El 28,6% de los casos, el arma homicida fue un arma de fuego 

• Llama la atención que en 45 casos de 308 femicidios, el femicida además se suicidó; solo 5 femicidas pidieron ayuda; 
• 62 de las 308 víctimas pidieron ayuda en la Justicia y 37 de esas 308, tenían al menos una medida judicial;
• 13 femicidios fueron perpetrados en manos de hombres pertenecientes a las fuerzas de seguridad (9 policías, 2 policías retirados, 1 militar, 1 gendarme);
• De mayor a menor, las provincias que más femicidios tuvieron fueron: Neuquén, Chaco, La Rioja, Santa Fe, Corrientes, Santiago del Estero, Tucumán, San Luis y Misiones.