Las medidas con tinte electoral que lanzó el presidente Mauricio Macri luego de su derrota en las PASO del 11 de agosto ya comenzaron a generar cruces entre la Casa Rosada y algunos gobernadores. La guerra se desató con dos grupos de medidas: la eliminación del IVA, los cambios en ganancias y monotributo por un lado y el congelamiento de las naftas.

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Reunidos en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), 19 gobernadores manifestaron su preocupación por el desfinanciamiento que podrían llegar a sufrir por la quita de entre $500 y $6.000 millones dependiendo de los presupuestos de cada una de las provincias. En la Casa Rosada, mientras tanto sostienen que esos cálculos no son tales.

“Con el impacto de la devaluación y la crisis generada, pretender que esto se resuelva con estas medidas es, de mínima, una ingenuidad”, manifestó el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey,  que explicó que, “si se solucionase el problema estructural de la economía argentina lo podríamos discutir. Pero no soluciona el problema y agrava la situación fiscal de las provincias en un escenario en donde, inevitablemente, quieren llevar el déficit fiscal a toda la Argentina”.

“Estamos en grave peligro de no poder afrontar nuestros gastos corrientes, el cumplimiento de las obligaciones salariales, la prestación de servicios esenciales y la preservación de la Paz Social en cada uno de los estados que representamos”, sostiene el documento que rubricaron los 19 mandatarios provinciales.

La comitiva oficial

“Vamos a escuchar y plantear nuestra posición”, manifestaron desde el ministerio de Interior, Obra Pública y Vivienda, a cargo de Rogelio Frigerio. Justamente el titular de la cartera envió al CFI a dos colaboradores, el secretario de Provincias y Municipio, Alejandro Caldarelli, y el subsecretario de Relaciones con las Provincias, Paulino Caballero.

Durante los primeros seis meses del año los fondos que recibieron los gobernadores por la coparticipación federal representó $760.353 millones, según un reciente informe del Instituto Argentino del Análisis Fiscal (IARAF). Esa cifra si se la compara con el primer semestre de 2018 da una caída interanual promedio del 7%.

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“No obstante la variación negativa mostrada en la primera mitad de este año 2019, también es cierto que en el primer semestre de 2019 todas las provincias recibieron, en moneda constante, una coparticipación más alta que la de todos los primeros semestres de los últimos años (excepto el de 2018)”, remarcan desde el Instituto.

En los cálculos del Gobierno las medidas de quita de IVA, los cambios en ganancias, y reducción del monotributo ninguna de las provincias tendrá una erogación superior a los $500 millones. Es que en el entorno de Macri se quejaban sobre el uso electoralista de la medida también por parte de los gobernadores ya que en términos reales los mandatarios provinciales reciben más fondos que en 2015.

Sin ir más lejos, un informe de la consultora Economía y Regiones sostuvo que el cálculo interanual entre junio 2018-junio 2019 da un aumento en términos nominales del 66,9% en promedio para cada una de las provincias, lo que significa una suba de casi 10 puntos por encima de la inflación.

En concreto las dos medidas tendrán un impacto $3.228 millones para las provincias y de $2.302 millones para el Gobierno nacional.En los números que los colaboradores de Frigerio les llevarán a los gobernadores se afirma que la merma en la recaudación será compensada por la suba del consumo que generarían la eliminación del IVA, la suba del mínimo no imponible de Ganancias y los cambios en el monotributo.  

A la par del encuentro, Macri mantenía una reunión con los mandatarios provinciales afines al oficialismo.

El problema del congelamiento de las naftas

El golpe que si sintieron cerca del Gobierno para con las provincias fue el congelamiento de los combustibles. Ayer por la tarde autoridades gubernamentales mantuvieron un encuentro con los gobernadores de las provincias petroleras y con varios de los referentes del sector. Allí tanto Frigerio, como el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, y el secretario de Energía, Gustavo Lopetegui, aceptaron que se manejó mal el anuncio del congelamiento.

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“Todos los sectores y los gobiernos provinciales y el nacional tenemos que hacer el esfuerzo por sostener los puestos de trabajo y llevar tranquilidad a las familias”, afirmó una de las fuentes que participó del encuentro.

La clave pasará, tanto para el Gobierno como para la oposición, para mantener la política energética con Vaca Muerta. “Está fue una medida de emergencia y transitoria para paliar los efectos de la devaluación de la semana pasada”, agregó la misma fuente. Un dato no menor es que algunos de los gobernadores plantean llevar esa decisión a la Corte Suprema.