Foto, abrazo y beso con un radical. Resentimiento al candidato kirchnerista. Y crítica indirecta a la presidenta. El todavía ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, comenzó así su “operativo” despedida. Y, por eso, más relajado, disparó hoy para todos lados: “Cristina (Kirchner) ha decidido que el candidato sea (Daniel) Scioli. Los resultados están a la vista”.
“La presidenta ha decidido que el candidato sea Scioli. Los resultados están a la vista, responsabilizó Florencio Randazzo.
“Yo dije el 13 de noviembre de 2013 que quería ser precandidato a presidente”, recordó hoy el ministro en declaraciones a MDZ Radio.
7 de octubre: el ministro recibió en su Chivilcoy al candidato 15 días antes de las elecciones.
“Cuando me ofrecieron ser candidato a gobernador de Buenos Aires, repetí lo que dije antes”, insistió. Y concluyó: “Le deseo todo lo mejor al que gane (el 22 de noviembre)”.
A 20 días del ballottage, Randazzo se sacó una foto con el radical opositor Ernesto Sanz.
Como si fuera poco, a sólo 20 días para el ballottage, Florencio Randazzo se mostró junto al radical Ernesto Sanz, posible ministro de Justicia en caso de que Mauricio Macri se imponga a Daniel Scioli en el ballottage. La foto tuvo lugar en una bodega mendocina.
Toda la familia Randazzo ha criticado a Daniel Scioli: al propio Florencio se sumó, como publicó BigBang ayer, su sobrino Bruno.
“El sobrino de Randazzo destrozó a Scioli: 'Es impresentable'”
Y tres meses atrás, su propia madre Gladys Campagnon le había expresado a Aníbal Fernández que a su hijo le habían “cortado las piernas” al rechazar su precandidatura presidencial.
Otros tiempos: cuando el ministro del Interior y Transporte soñaba ser el candidato de CFK.
Finalmente, según pudo saber BigBang, Florencio Randazzo comenzó a “despedirse” de los empleados del ministerio. Por caso, el jueves pasó a saludar a los trabajadores de la fábrica de DNI: “Cuiden las conquistas”.
El ministro está decidido: el 10 de diciembre regresará a su casa para ser un militante más. Hoy comenzó con todo su propio “operativo” despedida.