El reempadronamiento de los trabajadores exceptuados del aislamiento obligatorio y las restricciones al uso del transporte público, que podría incluir el cierre de estaciones de trenes, se proyectan como los ejes de las medidas que se adoptarán en la próxima etapa de la cuarentena y que anunciará hoy el presidente Alberto Fernández.
Estas medidas fueron analizadas durante la semana en distintas reuniones realizadas para coordinar el manejo de la crisis sanitaria, en las que hubo coincidiencias entre los gobiernos porteño y bonaerense.
Una de ellas fue la del miércoles, en Olivos, entre el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta y el gobernador bonaerense Axel Kicillof, con la participación del presidente Alberto Fernández, y la otra ayer, del jefe de Gabinete Santiago Cafiero con el ministro de Transporte, Mario Meoni y funcionarios de Nación, Ciudad y Provincia.
Los gobiernos coincidieron en la necesidad de mantener el aislamiento en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), donde el control del uso del transporte público es considerado como una medida fundamental para evitar una escalada en la propagación del virus.
Incluso el ministro Meoni ratificó en declaraciones radiales y televisivas que los trabajadores exceptuados del aislamiento social obligatorio deberán volver a tramitar el permiso para circular, con la intención de llevar el movimiento de gente a lo estrictamente necesario.
"Va a ser necesario el reempadronamiento de los trabajadores exceptuados y que la gente solo salga cuando es necesario", remarcó el funcionario y advirtió que "hay personas que no cumplen con la responsabilidad de quedarse en cuarentena".
"Estamos trabajando para unificar criterios y tener una habilitación única. Hoy existen controles y todas las personas muestran certificados, pero las fuerzas de seguridad no tienen posibilidad de determinar si esos certificados tienen validez o no", dijo.
Agregó en este sentido que "un nuevo certificado podrá establecer un mejor sistema de control y un seguimiento más cercano de cómo es la circulación de las personas en el transporte".
Actualmente, hay ocho millones de permisos para circular en el país y la mitad de ellos corresponden al AMBA, precisó el ministro, que dejó claro que todos los que actualmente cuentan con el permiso por ser trabajadores esenciales o empleados de comercios de cercanía, serán nuevamente habilitados.
Anticipó que en el nuevo certificado se va a poder "registrar un número de SUBE, con la que van a poder viajar automáticamente", aunque aclaró que "aquel que por un caso de fuerza mayor deba viajar en el transporte público, lo va a poder hacer también".
"Muchos de los permisos fueron obtenidos por razones de fuerza mayor, como por ejemplo en el caso de padres separados que tienen hijos, que ahora van a tener una validez de 24 o 48 horas", anunció, al tiempo que reiteró que "todos van a tener que volver a empadronarse".
El jefe de Estado, como siempre en la previa a los anuncios de una nueva fase del aislamiento, estaba esta tarde hoy reunido con expertos epidemiólogicos del Comité, el ministro de Salud, Ginés González García, y otros funcionarios de gobierno, en la residencia de Olivos.
En la reunión del Jefe de Gabinete con ministros nacionales, bonaerenses y porteños, el principal punto de acuerdo fue la necesidad de reforzar los operativos de control, tanto físicos como tecnológicos, para el transporte público y privado, con especial rigurosidad en la circulación interjurisdiccional, según se informó oficialmente desde el Gobierno.
Allí se acordó la posibilidad de restringir el uso del transporte público interjurisdiccional, tal como lo anunció hoy Meoni, y se trabajó en la coordinación de los equipos que llevan adelante los operativos del programa "Detectar" en los barrios vulnerables de la ciudad y provincia de Buenos Aires, que realizan el patrullaje de sintomáticos que deben recibir el protocolo correspondiente.
"En el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA) tenemos cinco millones de permisos y tenemos que separar lo esencial de lo no esencial. Es una nueva etapa para ponerle tecnología", señaló hoy en declaraciones a los medios el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli.
En tanto, Alejo Supply, subsecretario de Transporte bonaerense, consideró que el cumplimiento de la cuarentena "es una cuestión de vida o muerte" y recalcó que "hace 15 días era la mitad de la gente circulando, hoy son ocho millones y medio y en ascenso. Queremos que esa cantidad baje".
"Por suerte la gente ha elegido el auto sobre el transporte público, pero seguimos teniendo gente circulando y cada vez más contagios. Queremos que los únicos que viajen de capital a provincia sean los trabajadores esenciales. Siempre el uso del auto va a ser mejor que el transporte público en este contexto", añadió.
"La idea es fortalecer controles en los accesos a la Capital Federal y en 37 puntos de la Provincia donde la gente asciende al transporte público", al tiempo que adelantó que se "está analizando la posibilidad de cerrar algunas estaciones de tren cuando un distrito tiene más de una estación" para disminuir el uso de ese servicio.