por Gonzalo Prado
01 Febrero de 2021 14:30
La disputa por la coparticipación entre la Nación y la Ciudad luego de la rebaja, en dos ocasiones, que sufrió esta última en 2020 sumó un nuevo capítulo cuando el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, rechazó formalmente la convocatoria que había realizado el ministro de Economía, Martín Guzmán, para ponerse de acuerdo en cuanto al monto que tendría que girar el Tesoro para el mantenimiento de la Policía de la Ciudad.
Cabe recordar que mediante un decreto, el 735/2020 del 9 de septiembre el presidente Alberto Fernández redujo en 1,18 puntos potenciales la coparticipación que recibía la Ciudad -a partir de una decisión que tomó Mauricio Macri durante su presidencia- para transferirle ese dinero a la provincia de Buenos Aires, con el objetivo de enfrentar el aumento a la Policía bonaerense.
Ante ese escenario, la Ciudad había ido por primera vez a la Corte Suprema y había presentado también una cautelar para frenar la medida en el fuero Contencioso Administrativo Federal. A los pocos meses, a través de un proyecto de ley, se empezó a debatir la posibilidad de bajar hasta 1,4% la coparticipación que recibe la Ciudad y que las transferencias para la Policía de la Ciudad sean determinadas año a año en la discusión presupuestaria.
Según el conteo que realizaron quienes analizaron los números que perderá el distrito, el monto que fijó la nueva ley de $24.500 millones a cuenta para el financiamiento de la seguridad interior no es suficiente. "La suma que se dispone transferir el gobierno nacional como pago a cuenta para financiar la seguridad sólo cubriría el 27,9% de la partida total en el Presupuesto y apenas el 40% del gasto en personal que está proyectado", explican en la Ciudad.
El gobierno porteño sostuvo que "la magnitud del despojo" es tal que desde que se produjo la primera reducción como consecuencia del decreto de septiembre de Fernández, la Ciudad dejó de percibir en concepto de coparticipación hasta el 10 de diciembre $11.010.634.519. El cálculo de Larreta es que el año que viene, si la Corte Suprema no revierte la situación, ingresarán a las arcas porteñas $65.083.500.000 menos.
En ese escenario fue que Guzmán convocó mediante una carta dirigida al alcalde porteño a las autoridades para empezar a negociar cómo sería ese giro de fondos y si había que contemplar alguna partida extra.
“No vamos a convalidar la convocatoria porque sería darle entidad política a algo que nosotros consideramos inconstitucional”, fue la respuesta desde el entorno de Larreta a la consulta de BigBang.
Con la reanudación de la feria judicial, el jefe de Gobierno espera que la Corte empiece a tratar los planteos en cuestión debido a que todas las normativas ahora ya tienen vigencia debido a que fueron publicadas en el Boletín Oficial.
Antes de eso, según explicaron fuentes judiciales, el expediente empezó a circular por las diferentes vocalías pero no hubo intenciones de los ministros de la Corte de tratarlo aún. Con la jurisprudencia de fallar siempre en pos de la autonomía de las provincias en la Ciudad esperan un fallo favorable.
Rotondas, canillas y hasta carteles: las inauguraciones más descaradas de los funcionarios
Mientras tanto desde Nación, conocedores de la doctrina del máximo tribunal del país, buscan mantener siempre canales de diálogos abiertos. “La Corte sólo falla cuando se terminan los canales de diálogos entre la Nación y las provincias. Si siguen abiertos o una parte manifiesta la intención de buscar el acuerdo, se dilata el fallo”, replican en Nación.
