Luego de que trascendiera que en la casa de Sara Garfunkel -madre del fiscal Alberto Nisman- fue hallada un arma calibre 22, similar a la que Diego Lagomarsino le entregó al fiscal de la Unidad AMIA, el Gobierno coincidió con el diagnóstico Sandra Arroyo Salgado, quien ayer consideró que ese dato modifica todo el escenario. Y Aníbal Fernández no sólo coincidió, sino que además puso en la mira a la mama de la víctima.
Sara Garfunkel, madre de Nisman, entrando a declarar
"Si yo fuera fiscal, ya habría ordenado detener la madre y hubiera allanado esto hace 80 días, para ver qué sucedió", disparó el jefe de Gabinete. "¿Qué hace la pistola en manos de la madre? ¿Qué sabe? ¿Cuántas horas estuvo en el departamento?”, dijo el jefe de gabinete.
¿Había una carta suicida del fiscal? La presencia de esta arma cambia el eje, debe ser la primera vez que coincido con Arroyo Salgado", apuntó Aníbal F.
Por otro lado, cuestionó al fiscal Germán Moldes - quien impulsó la denuncia de Nisman por encubrimiento - por llevar adelante una "actividad parcial y decididamente en contra del Gobierno", al pretender que la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por presunto encubrimiento de la causa AMIA recayera en su colega Ricardo Wechsler.
"Es poco serio, Moldes quería un 'forum shopping' y dice que el fiscal (Javier) De Luca es de Justicia Legítima. Entonces, él pertenece a Justicia 'ilegítima'", dijo el funcionario al referirse al fiscal que finalmente deberá definir si avanza o no la investigación que hizo Nisman.