A dos semanas de la presentación oficial de las listas de candidatos de cara a las legislativas, hoy el enigma que se vive en el PJ sumó un nuevo capítulo. El ex ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, reunió a su tropa en un hotel céntrico para ratificar su candidatura, tal como anticipó días atrás BigBang.
En medio del silencio resuena una insistencia: quienes respaldan la candidatura de Randazzo aseguran que no se bajará y reclaman que Cristina Kirchner le conceda la interna en el interior del justicialismo. Hoy, sin embargo, el objetivo fue otro, más privado que público. El randazzismo dio a conocer el nombre y los colores de la plataforma con la que pretende competir en una interna del PJ bonaerense.
Randazzo, esta mañana, en el hotel NH City, rodeado de dirigentes que respaldan su candidatura.
El espacio con el que Randazzo apunta a presentarse a las legislativas se llamará “Cumplir”. La idea guarda ciertas similitudes con la estrategia preelectoral que utilizó en 2015, cuando aspiraba a la presidencia.
Del encuentro participaba un grupo de intendentes, gremialistas, diputados y senadores que respalda la candidatura de Randazzo. Hasta el momento, la estrategia del ex ministro de Cristina fue el silencio. De hecho, ese es uno de los principales cuestionamientos que hacen en la vereda del cristinismo: “Pasó más de 500 días sin hablar, no sabemos lo que piensa”, se quejó ante BigBang un intendente cercano a la ex presidenta, días atrás.
El foco del encuentro a puertas cerradas de esta mañana era delinear detalles de cara a las PASO. Sin embargo, en el randazzismo saben que el objetivo del sector más cercano a la ex presidenta era negar una posible interna del PJ, mediante una rebuscada estrategia que incluye el cambio de nombre del frente que integrará el justicialismo - dejaría de llamarse Frente para la Victoria para ser Frente Ciudadano para la Victoria - y de ese modo no permitirían el ingreso del ex ministro con una lista alternativa a la de Cristina.
En el entorno de Randazzo coinciden en que la campaña del silencio es una estrategia que por ahora trajo más beneficios que críticas. Los dirigentes que respaldan su candidatura creen que, por el momento, no es necesario iniciar un raid de campaña que pudiera desgastarlo, sobre todo atentos a que el resto de los rivales aún no delinearon qué harán. Esa misma estrategia es aplicada por el propio oficialismo, que aún no confirmó quiénes serán los candidatos en tierras bonaerenses.
En el sector más cercano a la ex presidenta cuestionaron el silencio del ex ministro.
Creen que hasta el momento el camino del silencio no fue equivocado, porque sin realizar actos públicos ni entrevistas televisivas lograron que se hable de su potencial candidatura a senador. Según La Nación, otro grupo de dirigentes randazzistas cree que ya no es posible sostener una campaña a escondidas.
Esta mañana, el senador Juan Manuel Abal Medina sintetizó que el randazzismo es parte de “cualquier frente que integre el PJ”, y se mostró crítico ante una eventual maniobra para dejarlos fuera de una interna: “A la ley (que establece las PASO) la redactamos para que no se pueda evitar que participe algún sector”.