No hay dudas: las redes sociales jugaron - y juegan - un rol central en las campañas electorales. Difusión, fotos y videos forman parte de las estrategias de cara a los comicios, en pleno Siglo XXI donde, sea o no año electoral, la campaña está a flor de piel.
Ahora, la campaña llegó a los servicios de mensajería instantánea, en particular a una de las aplicaciones que más crece en el último tiempo. Se trata de Telegram, la app que salió a jugar fuerte a la cancha y competirle en el terreno a Whatsapp, ya que permitía enviar mensajes cifrados y así violar la confidencialidad de los mensajes, a los que se les puede programar un tiempo de duración y luego, automáticamente, desaparecen.
Los stickers pueden hallarse en Telegram, en el sector de emoticones y stickers.
La app se había diferenciado de Whatsapp en un comienzo cuando, además de los clásicos “emojis”, aquellos emoticones con caritas y representaciones que podían ser simbólicas para expresar un estado anímico, incluyeron “stickers”: imágenes o dibujos de mayor tamaño, en su mayoría divertidos.
Los stickers de Mauricio Macri.
En tiempos donde el “consumo irónico” está al rojo vivo, y mientras se apura la campaña electoral de cara a las elecciones legislativas del año que viene, ahora Telegram comenzó a ofrecer la posibilidad de enviar stickers con las caras de algunos de los hombres y mujeres claves de la política argentina.
Un Juan Perón muy particular, una Cristina Kirchner muy llamativa. Los stickers K de Telegram.
Mauricio Macri y Cristina Kirchner se encuentran en el listado que fue hallado por los integrantes de la redacción de BigBang. Pero no sólo ellos. Al extenso listado se suman, entre otros, Juan Domingo Perón, Daniel Scioli, Néstor Kirchner y el “Ché” Guevara. Más allá de las imágenes, lo curioso es que también figuran, entre los stickers, algunos momentos clave de los últimos años, como aquel que recuerda el día en que Néstor Kirchner retiró los cuadros de los represores en la Ex ESMA.
Pensativo y acompañado. Daniel Scioli, presente entre los stickers de Telegram.
Creer o reventar. La campaña está instalada incluso hasta en los servicios de mensajería. Y también las chicanas. Porque no todos los stickers son elogiosos. A modo de burla, se puede enviar a los contactos a un “Scioli cansado”, o un “Macri fatigado”. También un sticker con la clásica figura del logo del diario Clarín, pero destruido, que se encuentra en la carpeta de stickers llamada “Pochoklera”.
Entre los stickers de Macri hay algunas fotos que no son precisamente las mejores.
Néstor, Cristina y Máximo Kirchner, presentes entre los stickers K de Telegram.
Para poder enviarlos es necesario que un contacto lo haya adjuntado en alguno de los mensajes. Una vez que eso ocurre, se puede seleccionar y agregar la carpeta de ese tipo de stickers.
Así, cuando un contacto cite durante un mensaje una frase de Perón, por ejemplo, la respuesta bien podría ser la figura del ex presidente durante uno de sus discursos.