por Agustin Gulman
16 Noviembre de 2018 11:22Axel Ezequiel Abraham Salomon y su hermano Kevin Gamal Abraham Salomon fueron detenidos el martes por la tarde en la vivienda de sus padres, acusados de tener vínculos con presuntos terroristas de Hezbollah. El abogado niega la relación con el grupo extremista, dice que “están destrozados” y apunta al gobierno. Detalles de una causa que estuvo en manos de la Justicia casi un año.
El caso comenzó en enero, cuando la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) recibió un mail anónimo, donde una persona aseguraba que en el gimnasio un hombre mostró un video en el que manipulaba una ametralladora AK 47 y que “viaja muy seguido al Líbano y tiene vínculos con Hezbollah”.
De inmediato la DAIA presentó la denuncia, que pasó de la Justicia porteña a la Federal, hasta que después de varias idas y vueltas quedó en manos del juez Sebastián Ramos, ante quien los acusados ya prestaron declaración indagatoria. Ramos tiene diez días para definir la situación procesal, y según confirmaron fuentes judiciales a BigBang, la causa no es por terrorismo, sino por "tenencia ilegal de armas de fuego".
Las detenciones fueron en la vivienda familiar, en Floresta.
Recién este martes por la tarde se llevó a cabo un allanamiento en la vivienda de los padres de Kevin y Axel Abraham Salomon, en la calle Chivilcoy al 400, en Floresta, a 20 metros de una comisaría de la Policía de la Ciudad. El caso salió a la luz ayer por la tarde, un día después de que estallara una bomba casera en el cementerio de Recoleta y que arrojaran otra que no llegó a explotar en la vivienda del juez Claudio Bonadio.
El abogado de los hermanos señalados como terroristas, Ismael Jalil, señaló a BigBang que la imputación no es por terrorismo, sino por la tenencia de armas de fuego que encontraron en la vivienda. Esta mañana el padre de los jóvenes relató que se trata de viejas armas que pertenecían a su abuelo, fallecido hace una década. Jalil detalló que el hombre era miembro del Club de Caza San Huberto, de Ramos Mejía, y que cuentan con los permisos y habilitaciones.
La imputación es por la tenencia ilegal de armas de fuego y municiones, tal como lo prevén los incisos 2 y 3 del artículo 189 del Código Penal. “Lo de Hezbollah es una opereta que el gobierno aprovecha, no es una cuestión técnica, sino política, en el contexto de hipótesis de conflicto que maneja el gobierno por el G-20”, agregó el abogado.
Las armas halladas en la vivienda. Según el abogado, eran armas de caza del abuelo.
En la causa sí constan una serie de viajes que hicieron los hermanos a Líbano. El menor estuvo en cuatro ocasiones en los últimos diez años, ya que tienen familiares. Trabaja en el Instituto Cultural Argentino Norteamericano, otorgando visas para acceder a los Estados Unidos. El mayor, en cambio, tiene un comercio de productos de limpieza junto a su padre y según Jalil no vive más con sus padres: “Le imputan la tenencia de armas en un hogar donde no vive. Lo demostró con facturas de las expensas, un servicio y el documento”.
Los jóvenes continúan detenidos en la Alcaidía de los tribunales federales de Comodoro Py, luego haber pasado la primera noche en la Unidad de Investigación Antiterrorista de la Policía Federal, en Cavia al 3300.
La causa es investigada por tenencia de armas de fuego, no por terrorismo.
“Hay una demonización de las etnias”
El presidente de la Confederación de Entidades Argentino-Árabe, Adalberto Assef, señaló a BigBang que la comunidad islámica atraviesa una compleja situación y que temen “una persecución a la comunidad musulmana” a partir de la detención de los dos hermanos en Floresta. “Hay una incertidumbre y un dolor enorme en la comunidad”, destacó.
“Portaban una cultura, un origen, todo menos armas para la guerra”, remarcó Jalil, quien indicó que “hay una demonización de las etnias tal como ocurrió con los migrantes”.