No habrá un bono salarial de fin de año para los empleados públicos, los jubilados y pensionados, y los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH), según lo confirmó esta mañana el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, al ser consultado por periodistas en la Casa Rosada.
De todos modos, el funcionario aclaró que el Gobierno otorgará a fin de año un bono a los trabajadores de la economía social, aunque todavía no se especificó cuál será el monto.
El funcionario dialogó con la prensa después de la reunión de Gabinete nacional en la Casa Rosada y dijo que esta vez el ingreso extra no comprenderá a estatales ni a jubilados, como tampoco a beneficiarios de la AUH, porque fueron alcanzados por aumentos que ya incluyeron en su cálculo el índice inflacionario actualizado, según señaló el funcionario.
“No estaba planteado, porque hemos firmado (con los estatales) una paritaria en la que se reconoce la inflación”, dijo hoy Triaca al ser consultado por la prensa.
En cuanto a las pensiones, jubilaciones y AUH, recibieron el último aumento en septiembre, que fue del 13,32%. El incremento en ese caso se define dos veces al año, según lo estipulado en la Ley de Movilidad Jubilatoria (N° 26.417), que se aplica automáticamente dos veces al año desde 2009.
El bono para los trabajadores de la economía social sería un pago por única vez por unos $ 2.200, que beneficiará a cerca de 400 mil trabajadores de la denominada "economía popular", que forman parte de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC).
Ese bono representaría para el Estado una erogación de $ 900 millones, que ya están contemplados en el Presupuesto del Ministerio de Desarrollo Social.
Triaca confirmó que este año no hay bono.
El año pasado, para descomprimir la presión social, el Poder Ejecutivo había accedido a otorgar un bono a jubilados y beneficiarios de la AUH -alrededor de 7 millones de personas- cuyo desembolso representó más de $ 5 mil millones.
También, los empleados estatales percibieron un plus de entre 2 mil y 3.500 pesos, que benefició a unos 130 mil agentes de la administración central.
“No es una discusión que corresponde para este año; el año pasado era una discusión distinta donde no utilizábamos un mecanismo de negociación paritaria en la que se planteaba la cláusula gatillo", amplió el titular de la cartera laboral.
"Este año, como planteamos la cláusula gatillo, tenemos la certeza de que se va a adecuar a la inflación la retribución correspondiente”, siguió.
La clásula gatillo que firmaron buena parte de los gremios, incluidos los estatales, establece que si la inflación supera el 20 por ciento se corrigen los incrementos salariales hasta cubrir el alza de precios.
Consultado sobre si esa decisión podía generar conflicto, respondió: “No creemos que haya un marco para eso, porque mientras hay diálogo hay avances; a partir del diálogo las cosas se solucionan".
"Hay un cambio de clima que me parece que está bien claro; la gente cree que hay mecanismos de diálogo que resuelven los problemas y hay un Gobierno que escucha y que reconoce y que también les pide a todos que hagamos un esfuerzo conjunto”, concluyó.