Fue un momento de calentura. Una cosa que le puede pasar a cualquiera. Un desliz. El empresario Lázaro Báez se desdijo ante el juez federal Sergio Torres. En declaraciones a la prensa, Báez había señalado que él podía explicar su enriquecimiento y Ricardo Echegaray (ex titular de la AFIP, Ricardo Echegaray y actual presidente de la Auditoría General de la Nación), no. Convocado por el juez Torres para que explique las razones de sus dichos, Báez dijo que había sido eso. Una cosa de nada. Una bronquita. Se le saltó la térmica y dijo algo que no pensaba. Todos hemos calificado de "corrupto" a alguien alguna vez. ¿O no?
Lázaro Báez acusó a Echegaray de corrupto en un momento de nervios. ¡A veces pasa!
El enojo de Lázaro tiene, al fin y al cabo, sus razones. Echegaray había asegurado en TN que el empresario santacruceño "va a terminar preso", lo que efectivamente sucedió. Por ahora, Echegaray no se desdijo respecto de Báez. Habrá que ver qué ocurre si lo convocan a Comodoro Py para declarar al respecto.