22 Febrero de 2017 13:24
Con la temperatura por las nubes, también se recalienta el mercado de las telecomunicaciones, un sector de mucha influencia y capacidad de lobby. Un segmento que promete las inversiones que ansía Mauricio Macri. Tan es así que el Presidente le dedicó a la industria el primer decreto del año, firmado digitalmente desde el sur del país cuando muchos encendían los fuegos artificiales y crepitaba el fuego para el asado de Año Nuevo.
El decreto 1340 estableció, básicamente, la posibilidad de que Clarín pueda entrar el negocio de telefonía de cuarta generación, 4G, y que las empresas de telecomunicaciones desembarquen en el mundo de la televisión.
Macri, hoy: condecorado y junto a Rajoy, en Madrid.
Poco más de un mes después de esa firma, el sector “telco” está al rojo vivo, como nunca. Clarín y Telefónica, los dos gigantes en disputa, siguen jurando que Macri los perjudica para beneficiar a su histórico rival. Todo a pocas horas de que el Presidente, de gira por España, se reuna con el presidente del Grupo Telefónica, José Álvarez Pallete. ¿Habrá caras largas y reclamos?
Como si esto fuera poco -y en lo que parece otra muestra del polémico timing del Gobierno para ciertas cuestiones sensibles-, ayer el Ente Nacional de Comunicaciones, ENACOM, emitió una reglamentación que autoriza formalmente a Clarín, por medio de su empresa Cablevisón y su marca Nextel, a dar 4G. Nada nuevo, pero ¿era necesario este supuesto guiño a Clarín justo en el momento en el que Macri le estrechaba la mano al rey Felipe VI? ¿Provocación? ¿Otro “error no forzado”?
“¿Guiño a nosotros? No estamos exultantes con este decreto, estamos a las puteadas: los siguen beneficiando”, refutan desde Cablevisión.
La resolución de ayer
Ayer, el Enacom dio a conocer la resolución 171 que autoriza a Nextel a dar 4G sobre frecuencias que estaban asignadas a datos. El punto no es menor: es lo que en el mercado se conoce como “refarming”, o reasignación. Y es lo que levantó el enojo de Telefónica: entre otras cosas, es por lo que los españoles están convencidos de que el Gobierno “juega” para Clarín.
Ahora, el tema controversial es si Clarín debe pagar o no por esa reasignación de espectro. Telefónica esgrime que tuvieron que invertir US$ 427 millones para tener frecuencias 4G (Personal, del Telecom, y Claro, del mexicano Carlos Slim, pagaron cifras similares).
Nextel, una empresa de Clarín desde diciembre de 2015.
Por ahora, desde Enacom aseguran que "no están cerradas las cuestiones económicas". ¿El Estado le cobrará a Clarín o esa reasignación será gratis, como aseguran algunos medios hoy?
“¿Guiño a nosotros? No estamos exultantes, estamos a las puteadas
“El decreto es un paso necesario. Básicamente, estableció condiciones para fomentar más competencia en el sector. Eso se traduce en tratar de eliminar o reducir restricciones que tienen las empresas para entrar a otros negocios. Cablevisión entrando a 4G con Nextel, por ejemplo. Pero hay que ver cómo se aplican estas nuevas medidas. Convergencia es la confluencia de dos industrias, la televisión y las telecomunicaciones, eso trae indefectiblemente el choque entre empresas e intereses”, asegura el analista Enrique Carrier.
Las razones de ambos
Clarín, insiste: “El Gobierno beneficia a Telefónica”. Telefónica, acusa: “Clarín se lleva todo, como siempre”. El “Games of Lobby” es feroz.
Desde España, confirman que el malestar existe y va "in crescendo". Afirman que les cambiaron las reglas del juego y que no existe la competencia necesaria para avanzar en el proceso de inversión. Saben que los dólares por venir son un tema sensible para Macri, y por eso amenazan con freezar el plan de inversión de US$ 2.264 millones que anunció para para el período 2016/2018. No sólo eso: amagan con ir a los tribunales del CIADI a denunciar discriminación y murmuran que en la Argentina de Macri, por ahora, de Cambiemos, nada. Conceptos que erizan los pelos de varios en el primer piso de la Rosada
Macri con ejecutivos de Telefónica.
Clarín dice que, lejos de perjudicarlo, el decreto de Macri beneficia, y mucho, a Telefónica, que podrá dar televisión a partir de 2018, algo que tenían prohibido por el pliego de privatización de 1990. “Además, también que se le permitió vender Telefe, ya que la ley de medios kirchnerista prohibía las transferencias de licencias”, dicen.
"La convergencia trae indefectiblemente el choque entre empresas e intereses
Clarín cree que va a terminar pagando más que nadie. Por el espectro que compraron, y que ahora el Gobierno reasignó para telefonía móvil, pagaron unos US$ 150 millones, y prometen invertir en antenas y equipos otros US$ 500 millones.
“Calculamos más de US$ 820 millones en total, con Nextel que tiene el 1% del mercado, mientras las móviles pagaron unos US$ 500 millones, con un 33% de share cada una. Además, nos hacen devolver el espectro para dárselos a las telefónicas. Pagan menos y usarán la mitad de nuestra frecuencia; y van a poder cuádruple play en 2018, varios meses antes que nosotros”, aseguran desde Cablevisión, y recuerdan que el kirchnerismo los borró de la licitación de 4G de 2014.
Telecom podría fusionarse con Cablevisión... si el gobierno lo autoriza.
¿Y Telecom, el otro grande local? No comments, por el momento. Fintech, el fondo de inversión del magnate mexicano David Martínez, fue autorizado por el macrismo, en 2015 y a pocos días de asumir, a quedarse con la mayoría accionaria de la empresa. Martínez, además, es socio de Clarín en Cablevisión (a partir de este año la empresa de cable quedará escindida definitivamente del grupo de medios y será una compañía independiente). El mercado especula en una pronta fusión entre Cablevisión y Telecom. ¿Cuánto? Nadie se anima a poner una fecha. En principio, los equipos gerenciales ya están alineados, pero el nuevo gigante no podrá ver la luz sin la firma de Macri.
Mientras tanto, el presidente tiene otras preocupaciones. El invierno español lo encuentra en el centro de las quejas de dos peso pesado. Tendrá que verse con el presidente de Telefónica, este viernes. La reunión será cordial y protocolar, pero quizás algún reclamo sea puesto sobre la mesa. ¿Mariano Rajoy, presidente español, se animará a ir más lejos y ser más vehemente sobre el tema cuando charle mañana, a solas, con su par argentino? De este lado del océano y a pesar de la resolución de ayer, Clarín también está a las “puteadas”.
Como los días de esta semana infernal de febrero, el clima en el mercado de las telecomunicaciones está denso y al rojo vivo.
