El arzobispo de Buenos Aires, el cardenal Mario Poli, aprovechó la misa por la 43a peregrinación hacia la Basílica de Nuestra Señora de Luján para hacer un llamado de “unión a la patria”, a sólo tres semanas de las elecciones legislativas. El religioso pidió, además, “renunciar a todo gesto de violencia, discriminación e intolerancia”.
El arzobispo de Buenos Aires llamó a la "paz" de los argentinos.
“No hay división en la peregrinación, es la unidad que queremos para nuestra patria. Si hay paz, todo se puede construir. ¡Qué necesidad tenemos los argentinos de paz”, exclamó, al tiempo que se dirigió a la Virgen: “Especialmente, Madre, vos que llevás la bandera argentina, necesitamos paz en nuestra patria. Danos un corazón pacífico y el coraje de vivir en paz”.
Decenas de miles peregrinaron desde el sábado hacia la Basílica de Luján.
Las malas condiciones climáticas obligaron al religioso a presidir la misa dentro de la basílica y no en la Plaza Belgrano, como estaba previsto. Por ese motivo, se sacaron los bancos para dar lugar a los miles de peregrinos que desde ayer recorrieron 60 kilómetros. Salieron el sábado al mediodía del santuario San Cayetano en Liniers.
El cardenal aseguró que el Papa podría viajar al país "en el corto paso".
“La paz comienza en nuestro corazón”, cerró el religioso, quien, pese a la negativa del Vaticano de cara a un viaje para el año que viene, insistió en los últimos días que el Papa Francisco podría visitar el país en el corto paso: “Ha elegido periferias y está a la vista dónde se ha metido: en África, en Turquía, donde los católicos son la minoría absoluta. Él piensa ir a China, a Rusia, y va a los lugares también donde él y la Secretaría de Estado juzgan que tiene que ir. Creo que estamos próximos a esta visita, y esta tensión me parece que va a terminar bien, eso pienso”.