Como el agua y el aceite, así fueron los cierres de campaña de Leandro Santoro en el Luna Park y de Javier Milei en el Movistar Arena. En el primero resaltó la mística peronista y en el segundo, el furor de lo recién conocido de los libertarios. Lo que tuvieron en común fue la convocatoria masiva, los cánticos, las chicanas y los palitos que se tiraron ambos candidatos. Otra similitud fue los encintados espaciales que le pusieron el color que le faltaba a la paleta de tintes que es la política argentina en el último año.
El agua: así fue el cierre de campaña de Leandro Santoro
Con un tono más indie y con un escenario redondo, Leandro Santoro cerró su campaña en el Luna Park que alberga más de 8.400 personas en total. Con colores vivos propios del estilo de diseño de su campaña, el escenario del candidato a Jefe de Gobierno de Unión por la Patria (UXP) se movía como pez en el agua entre todos los peronistas que lo rodeaban.
El “torito” que se usó para toda la campaña tuvo un rol protagónico cuatro días antes de las presidenciales: con la base de la canción de Wos “Arrancarmelo” y con un acompañante en guitarra se pudo escuchar al toro con voz parsimoniosa cantar una dulce melodía que pedía a gritos que voten a Santoro.
El centro del cierre de campaña estuvo atravesado por las palabras “ballotage”, “personas”, “derechos”, “la derecha”. Muy propio a su estilo, el candidato llamó a “construir una fuerza política que venga a suturar las heridas" de una "ciudad con muchos contrastes”. Y aclaró: “Esta noche no estamos cerrando una campaña, estamos iniciando un nuevo camino”.
Santoro tuvo una noche muy peronista, de hecho evocó a Eva Perón en su discurso en el que aprovechó para chicanear a la oposición: “Donde encuentran una necesidad, encuentran un negocio. Por eso es tan importante reafirmar que donde hay una necesidad, hay un derecho”. Amoroso, el candidato también expresó: “Tengo la Ciudad en la cabeza, pero también en el corazón”.
La frutilla política del postre fue la aparición de Sergio Massa, candidato presidencial de Unión por la Patria (UxP) que sumó más chicanas para el macrismo: “Tenemos la oportunidad histórica de que la Ciudad de Buenos Aires no se transforme en un bien de familia, que se traslada de pariente en pariente". “Tienen la oportunidad de decir que no les gusta votar al primo de Macri”, dijo y agregó: “Hay alternativas, están en el ballotage y pueden construir una propuesta superadora”.
Glorificado por los peronistas del Luna Park, Massa cerró con una invitación más que clara: “Estamos construyendo el famoso, lo damos vuelta, lo estamos dando vuelta. Mucha fuerza estos cuatro días, el domingo va a ser un gran día. Les pido que hagamos el último esfuerzo, mostremos que tenemos proyectos, que somos el futuro frente al odio y al amor, frente al pasado y el futuro”.
El aceite: el cierre de campaña de Javier Milei
15 mil personas llegaron al barrio de Villa Crespo, al estadio Movistar Arena, donde Javier Milei de La Libertad Avanza (LLA) llevó a cabo su cierre de campaña cargado de simbolismo libertario: la animación de un león prendido fuego que daba vueltas sobre su eje en una pantalla gigante fue la mayor insignia. 30 minutos duró la alocución de Milei que empezó parafraseando la canción “Panic Show” de La Renga: “Hola a todos, yo soy el león, corrió la casta sin entender, panic show a plena luz del día”, la gente enloquecida coreaba las líneas de su paladín libertario.
Tres personas no pararon de ser elogiadas en el discurso de Milei: su hermana Karina de quien destacó su participación activa para la construcción del partido, Ramiro Marra (candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires) y claro, a su nuevo amor Fátima Florez que respiraba hondo, se ponía nerviosa y gritaba enardecida “Te amo” a su novio libertario vestida con un vestido morado (el color que se le asignó a LLA).
Un Milei enajenado conectó con su público a los gritos: “Hoy estamos frente a la misma disyuntiva de otros momentos, podemos continuar con este camino, un camino que es seguro, seguro que nos hace pobres, o podemos volver a abrazar las ideas de la libertad, que son las que hicieron que Argentina sea una potencia mundial”. Además refirió: “Los invito a preguntarse qué país quieren para sus hijos. Si quieren el país de la pobreza, de la inseguridad, de la inflación, de la corrupción, de la decadencia que hemos vivido por décadas. O si quieren el país de la libertad, de la prosperidad que alguna vez supimos tener”.
Cientos de veces repitió la palabra “fiscalizar”, acción democrática a la que instó a sus seguidores: “Es cierto necesitamos fiscalizar, necesitamos redoblar los esfuerzos en la fiscalización y, si además mucha gente que no fue a votar, decide hacerlo es probable que podamos ganar en primera vuelta”. Y agregó: “Por eso, quiero decirles vayamos a las urnas, a votar, no se queden en su casa, lleven a sus hijos, lleven a sus padres, lleven a sus amigos, lleven la esperanza en el corazón porque Argentina tiene futuro, pero ese futuro existe solamente si es liberal. Viva la libertad carajo”
Dos canciones populares colmaron el Movistar Arena. “Se viene el estallido”, cantaban los libertarios que, coléricos también entonaron: “Primera vuelta, la pu** que lo parió”, haciendo referencia a que Milei ganara en primera vuelta.
Una chicana política que no quedó atrás fue dirigida al principal contrincante político de Milei, Leandro Santoro (candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires): “Ese personaje siniestro llamado Leandro Santoro, que se paseaba por los programas de televisión y en ese devenir pedía por la censura de los liberales, decía que éramos peligrosos, que nos tenían que correr de la televisión, que era una irresponsabilidad ponernos en el prime time”.
Explotados, los libertarios afinaron: “Hay que saltar, hay que saltar... el que no salta es radical”, la respuesta de Milei fue rápida y certera y hasta se comparó con el sector peronista: “En el fondo tienen espíritu populista. Cómo saben las canciones que me gustan, eh?”.
Tres fueron las declaraciones de Alberto Benegas Lynch que generaron polémica varias horas en redes sociales: llamó a “imitar a Roca” refiriéndose a las relaciones con la Iglesia católica y puntualizó que “Habría que suspender las relaciones diplomáticas con el Vaticano” en caso de que “prime el espíritu totalitario”. Además subió a Milei a una escala dionisia: “A veces tengo que pellizcarme para pensar y darme cuenta si en realidad no estaré soñando este segundo milagro argentino de Javier Milei debido a las propuestas en el terreno moral, en el terreno institucional, en lo ambiental, en las políticas fiscales, monetarias, laborales, de comercio exterior”.