Apoyó a Daniel Scioli en su fallida candidatura presidencial. Ese mismo año, renovó por tercera vez su mandato como gobernador salteño. El batacazo del ballotage lo obligó a barajar de nuevo y, ya con Mauricio Macri en el poder, Juan Manuel Urtubey tendió puentes con el Gobierno y se convirtió en uno de los “federales preferidos” de Cambiemos. La complejidad del hombre que sueña con “la renovación peronista” y lidia con el fantasma de ser “más macrista que Macri”.
Urtubey recibió a Macri en Salta.
El norte como refugio
La inauguración del Museo Güemes, que tuvo lugar el miércoles por la tarde en la capital salteña, evidenció el complejo presente político de la administración macrista. Mientras que cientos de miles de personas acompañaban a los docentes en su movilización hacia Plaza de Mayo, el presidente encontró refugio protocolar en el Norte argentino. Urtubey lo recibió por quinta vez en quince meses. Desplegó un importante operativo de seguridad y le regaló una imagen alternativa para ilustrar las portadas de los principales diarios.
“¿No tiene miedo de quedar como más macrista que Macri?”. La pregunta no lo altera. Lógico: ya se la hicieron cientos de veces. Pero el comienzo del fin de la luna de miel del Gobierno puede complicar su confesa ambición electoral. Urtubey, lo dice, quiere desembarcar en dos años en Balcarce 50. “Soy argentino ante todo y eso me lo enseñó Perón”, esquivó, y recordó una de las máximas peronistas: “Para un argentino no hay nada mejor que otro argentino”.
El Presidente, junto a Juliana Awada. A su lado, Urtubey e Isabel Macedo.
“No tengo absolutamente ningún temor en poder plantearle a la sociedad que nosotros vamos a hacer las cosas mejor”, resiste de inmediato. “Me parece una apuesta demasiado mediocre apelar al fracaso del Gobierno para decir: 'Yo no voy a fracasar'. Es interesante plantear que se pueden generar consensos desde veredas diferentes. La Argentina no quiere más la lógica del pensamiento único. Se puede construir una democracia moderna y vibrante, pero fuera del dramatismo del River-Boca permanente. Cuando uno tiene temor de ayudar al que piensa distinto es porque enmascara inseguridad”, suma.
"Se puede construir una democracia moderna y vibrante, pero fuera del dramatismo del River-Boca permanente
Si bien reconoce que el vínculo con el presidente sigue siendo “muy bueno”, Urtubey es categórico a la hora de proyectar un futuro dentro de Cambiemos: “De ninguna manera podría hacerlo, veo la política de otra manera. Creo que no sería bueno, al contrario: convalidaría una vez más la lógica del pensamiento único. Soy peronista y creo en la renovación, pero tenemos que entendernos como una propuesta de futuro, no de reivindicación del pasado. Si no logramos eso, estamos en problemas”.
Urtubey, cercano a Macri pero crítico a la vez. "Se generaron expectativas irreales", dice.
Una de las principales fallas de Macri es, según Urtubey, la “lógica del milagro” como resolución de problemas estructurales. El fantasma del “segundo semestre” y el “boomerang” que hoy corre al Gobierno. “Se generaron expectativas irreales, se planteó el despegue como si fuera un milagro posible de conseguir en seis meses. La ansiedad de querer mostrar resultados a corto plazo termina siendo una mala jugada”.
Macri, el negocio de “Cristina candidata” y el PJ
“Esta polarización ayuda más al Gobierno que otra cosa, porque en alguna medida pone en blanco y negro una disputa. Hay que salir de los buenos y los malos. En ese escenario, si el peronismo se plantea solamente como la reivindicación de una gesta del pasado, estamos en problemas. El peronismo tiene que ser una expresión de futuro para que la gente nos apoye”.
Urtubey cree que una probable candidatura de Cristina favorecería a Macri.
“Si Cristina es candidata le va a hacer bien al Gobierno. Si yo pudiera elegir, siempre trataría de elegir al más débil en frente. Porque, ¿contra quién polarizás? Polarizás contra el candidato que ya no es competitivo. Sin dudas, Cristina candidata sería un gran negocio para el Gobierno, pero la gente no quiere volver atrás; por más bueno que haya sido el pasado, hay que ir para el futuro. El lucha y vuelve era con Perón, ya está”.
La polarización política y la falta de despegue del mercado
“La excesiva politización de las diferencias domésticas en la Argentina está haciendo más lento el proceso de llegada de inversores al país. Eso que es muy funcional en términos políticos de poner una contracara, en materia de atracción de inversiones te frena el camino porque la gente quiere otro clima. El clima se construye entre todos, no sólo en esos sectores”.
El Gobernador de Salta en la inauguración del Museo Güemes.
“Como peronista espero ganar, siempre. Desde el peronismo tenemos que dar señales claras. La Argentina va a empezar a crecer cuando las alternativas al Gobierno sean alternativas razonables, que entiendan una lógica republicana de calidad institucional. Ese es el verdadero 'break' que espera el país, no es cambiar un personalismo por otro. Hay que fortalecerse en institucionalidad. Una buena elección de nuestro sector con ese perfil marcaría una Argentina que va adelante, independientemente del año electoral. Eso va a traer inversiones”.
Massa, Randazzo y las internas bonaerenses
“Sergio (Massa) tomó la decisión hace un tiempo de construir un espacio alternativo al partido justicialista, no le voy a negar su peronismo. Cuando uno lo ve desde afuera naturalmente aparece como un candidato competitivo. Florencio (Randazzo) también, ya dentro de las filas del partido, me parece un dirigente súper valioso, pero desconozco si tiene la voluntad de presentarse, no lo ha dicho y tampoco ha querido tener visibilidad. Hace tiempo que no hablo con él”.
Urtubey se refirió al presente de los dos referentes peronistas.
“Veo un espacio de renovación política en el ámbito bonaerense enorme. Habrá que ver si eso se expresa electoralmente en esta elección o si no está tan maduro todavía. Hay una generación de legisladores provinciales y dirigentes muy, muy interesantes. Habrá que ver cuánta visibilidad le da el proceso electoral y a ver cuánta potencia tienen a futuro. Lo que el país necesita es que haya liderazgos en cada provincia y particularmente en Buenos Aires. Porque un problema bonaerense se instala como un problema de la Argentina. Es vital el fortalecimiento de los dirigentes bonaerenses”.
Scioli y el fin del kirchnerismo
“Lo acompañé a Daniel (Scioli) como candidato a presidente hace dos años y la gente nos dijo que no, ya está. Sinceramente creo que en términos de futuro apelar a la vuelta de alguien que ya fue ocho años presidente es muy fuerte, la misma gente está pidiendo ir para adelante. Siempre está la tentación de evaluar la elección bonaerense con la nacional, muchas veces no se da y en esta no se va a dar.”
Urtubey apoyó a Scioli durante la campaña de 2015.
“Si Cristina (gana las PASO bonaerenses) se instala el dónde quedará el peronismo de la provincia de Buenos Aires. Hay un proceso de renovación ya aparente en muchos lugares del país, en donde no hay mucho espacio para volver para atrás. Va a depender de lo que resuelva cada provincia: hay un dato que algunos no están evaluando, ya no hay más elecciones cerradas con manejo de aparatos políticos. Votan todos los ciudadanos de cualquier partido político. Se está dejando de lado que es que el que va a resolver hacia dónde vamos”.