10 Abril de 2018 15:04
En su primera declaración como imputado protegido, Alejandro Vandenbroele disparó contra el ex vicepresidente Amado Boudou, su socio José María Núñez Carmona, el ex titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, el ex gobernador bonaerense Daniel Scioli y el banquero Jorge Brito.
En el inicio de la audiencia, la defensa de Vandenbroele pidió y logró que Boudou y Núñez Carmona siguieran sus dichos desde una sala en el sexto piso de los tribunales federales de Retiro, para evitar que su cliente se sintiese intimidado.
Durante su exposición dejó en evidencia el negocio del cobro de una comisión de más de $ 7 millones, por el asesoramiento de su consultora The Old Fund a la provincia de Formosa, donde lo convocaron para darle estructura a un contrato "simulado" para la reestructuración de la deuda pública de esa provincia, con Gildo Insfrán como gobernador y Boudou como ministro de Economía de la Nación.
La compra de Ciccone Calcográfica dejó un tendal de ex funcionarios involucrados.
"Fue un contrato simulado para cobrar una comisión", sostuvo y detalló que del cobro una parte fue para Núñez Carmona, que actuaba en nombre de Boudou, la otra para funcionarios formoseños y él cobró US$ 200.000 en el 2010. "Sobre una necesidad política se montó un negocio", afirmó.
Además, involucró al entonces presidente del Banco Macro, Jorge Brito, en la venta de Ciccone Calcográfica, dado que el banquero facilitó la operación que definió como "un negocio terrible económico entre los Brito y Boudou y Nuñez Carmona".
Boudou y Nuñez Carmona, intimos.
También, dijo que las gestiones incluyeron una intervención de la Secretaría de Comercio, a cargo entonces de Guillermo Moreno para lograr desalojar la planta de Ciccone que alquilaba la empresa Boldt.
Además refirió que Núñez Carmona le dijo que "el dueño de Ciccone iba a ser Jorge Brito" pero no podía aparecer en la sociedad para no generar reclamos por parte de acreedores de la imprenta, ante un grupo económico fuerte.
También dijo "que tenían pensado hacer negocios con los Brito dentro y fuera de Ciccone" y que Raúl Moneta también participó con falsos préstamos a la sociedad para adquirir la empresa que "eran una pantalla" porque, en realidad, "todo era de Brito", dijo. "Las decisiones más importantes las iban tomando entre Boudou y Jorge Brito", agregó.
Brito quedó involucrado como "financista" de la compra de Ciccone.
Para confirmar esta operatoria aportó correos electrónicos, contratos y otra documentación que, en parte, lo relacionaba con ejecutivos del Banco Macro y con Núñez Carmona.
Sobre Scioli, contó que habló con él para obtener financiamiento del Banco Provincia para Ciccone. "Quedate tranquilo Alejandro que lo tuyo va a salir", le dijo Scioli.
Según dichos de Núñez Carmona, el acusado dijo saber que "Ricardo Echegaray tenía instrucciones desde las más altas esferas del gobierno nacional" para favorecer el levantamiento de la quiebra de la ex Ciccone Calcográfica.
Echegaray habría favorecido el levantamiento de la quiebra de la imprenta.
Sobre Boudou, admitió que vivió gratis en su departamento de Puerto Madero por ofrecimiento de Nuñez Carmona, que pagaba las expensas pero no el alquiler y que le pidió a un amigo que vivía en España la firma de un falso contrato de renta.
Vandenbroele fue ratificando y ampliando lo que había dicho ante el fiscal federal Jorge Di Lello cuando ingresó al sistema de imputado protegido. Durante horas enumeró las distintas operaciones que hizo desde que comenzó a trabajar con Núñez Carmona.
