La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, analizó el primer año de gestión, valoró el respaldo del presidente Mauricio Macri y justificó su ausencia en las localidades de la Provincia que se vieron afectadas por las fuertes inundaciones días atrás. “Siempre que pasa algo que afecta a los vecinos me preocupo. Necesitábamos mis hijos y yo esos seis días de descanso”, aseguró.
En la primera entrevista que ofrece desde que regresó de las vacaciones en Playa del Carmen, Vidal se mostró conforme con el trabajo realizado en tierras bonaerenses durante el 2016. En diálogo con Clarín señaló que “fue uno de los años más intensos” de su vida, tanto en términos políticos como personales, tras la separación del padre de sus hijos, el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro.
Tras regresar de las vacaciones, Vidal se reunió con el presidente Mauricio Macri.
“Siempre que algo pasa algo que afecta a los vecinos me preocupa. El Gobierno de la Provincia estuvo en el lugar, trabajando como tenía que hacerlo. Con un equipo y respuesta en la emergencia que no hubo en muchos años”, aseguró Vidal.
Así, buscó responder a las críticas que recibió días atrás cuando varias localidades bonaerenses se encontraban inundadas y ella permanecía de vacaciones en México.
Según la gobernadora, aún “es muy temprano para preguntarle a la gente a quién va a votar” en las elecciones legislativas de este año. Para Vidal, hay “preocupaciones más urgentes” y “todavía no hay candidatos definidos”.
Según la gobernadora, aún es pronto para definir a los candidatos de Cambiemos.
“Sí está claro que la decisión es seguir con el cambio o volver al pasado”, disparó, al ser consultada por un sondeo que ubica una posible fórmula de Jorge Macri junto a Elisa Carrió en tercer lugar detrás de Massa-Stolbizer y Scioli-Cristina. “Lilita es una dirigente valiosa que puede ayudar desde muchos lugares, debatiremos qué es lo mejor en Cambiemos más adelante”, aseguró la mandataria.
Vidal indicó que el Gobierno nacional logró “dejar atrás la tensión, la agresión y la confrontación como método de la política”. Sin embargo, reconoció que aún “falta para que haya menos pobreza y desigualdad”. “Los cambios profundos llevan tiempo, la gente sigue sosteniendo la esperanza, confío en que este va a ser un año mejor”, analizó.
Vidal dijo que un logro del Gobierno fue dejar atrás la "tensión, agresión y confrontación".
TERAPIA, YOGA, SUEÑO Y CORAZÓN VACANTE
La gobernadora reconoció dormir poco. Si bien no se explayó en la cantidad de horas que descansa, sí relató que su cabeza está ocupada y preocupada por los diversos problemas que afectan a la Provincia. “Soy de la teoría de que el día que no me importe, que no me afecte, ese día tengo un problema”.
Además, relató que desde hace trece años que hace terapia una vez por semana. “Me ayuda mucho en este trabajo, le pongo mucho el cuerpo, y eso requiere que descargues, que pidas ayuda también para poder seguir haciendo bien otras cosas. También empecé yoga con mi hija y mi fe es un sostén”.
La gobernadora contó que desde hace trece años hace terapia. El año pasado empezó yoga.
Sin dudas que el divorcio de su esposo fue uno de los temas que más dio que hablar puertas adentro de Cambiemos durante 2016. Ahora, Vidal asegura que se encuentra sola. “Puse mucha energía a la Provincia y a mis hijos. Me ha costado encontrar tiempos para mí. Probablemente sea un desafío para 2017, no sé si es el mejor año para planteármelo”, comentó.
Sin embargo, la gobernadora fue clara en términos del corazón: “El amor no es algo que uno sale a buscar, es algo que aparece cuando uno está listo para eso. No sabría si contestarte que estoy lista. Llegará cuando tenga que ser”.