Son los titulares de dos de los distritos más importantes del país, además de ser los dirigentes con más poder dentro de la coalición de Gobierno.
Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal, jefe de gobierno y gobernador de la ciudad y la provincia de Buenos Aires, respaldaron la postulación de Graciela Ocaña para dirigir la Defensoría del Pueblo de la Nación, acéfala desde 2009, tras la renuncia de Eduardo Mondino.
La legisladora porteña por Confianza Pública se reunió con el jefe de gobierno porteño y la gobernadora bonaerense y luego publicaron una foto del encuentro. "Graciela Ocaña es una valiosa dirigente y será una gran Defensora del Pueblo. Con Vidal le expresamos nuestro apoyo", dijo Rodríguez Larreta en su cuenta de Twitter.
El Frente para la Victoria (FPV) propuso como candidato al ex diputado Humberto Roggero y el Frente Amplio Progresista (FAP), al ex diputado Héctor Polino.
El nombramiento requiere del respaldo de dos tercios de las dos cámaras, mayoría que hoy no reúne ninguna fuerza política por lo que necesariamente se tendrá que llegar a un acuerdo para poder designar al nuevo funcionario. La comisión bicameral para debatir este tema está citada para el 29 de noviembre.
La designación del defensor del Pueblo fue reclamado al Congreso por la Corte Suprema de Justicia en dos oportunidades, al considerar que es la figura que puede encabezar reclamos colectivos, como los que hubo en su momento, por ejemplo, por los aumentos de tarifas.