Argentina festejaba el día del trabajador en 2002. La madrugada de ese 1° de mayo fue trágica para la familia Perrone: un auto embistió a Kevin de 14 años, que quedó tirado en la calle producto del impacto; al volante estaba Eduardo Sukiassian de 20 años en ese momento, que no solo no paró sino que escapó de la escena del crimen.
Sukiassian no iba solo en el auto, con él estaban Guillermo Von Gerstenberg y Pablo Bereskyj que tampoco evitaron la fuga del conductor que manejaba sobre la Avenida Libertador. El trágico accidente ocurrió a 20 metros de la quinta presidencial de Olivos.
Kevin quedó con un cuadro de salud reservado, hasta que una semana después, el 8 de mayo de 2002, falleció. El asesino pasó apenas 74 días en el penal de Ituzaingó, luego ocho meses en prisión domiciliaria (del 28 de mayo del 2007 al 30 de noviembre) y como su sentencia no quedó firme, la Justicia decidió darle la libertad condicional. Al día de hoy Sukiassian sigue libre y, sobre todo, conduciendo.
Queda en este mundo el recuerdo de Kevin, la profunda sensación de injusticia y la memoria para la lucha colectiva. Esa lucha que lleva todos los días Viviam Perrone, madre de Kevin que pudo sobrellevar el dolor y convertirlo tarea de servicio para quienes vivieron situaciones similares (ahora también se dedica a la presidencia de la Asociación Internacional de Victimas de Tránsito ).
Es así que el 10 de diciembre de 2004 nació la Asociación Civil Madres del Dolor, que se puso al hombro la tarea de "promover y consolidar la prestación de Justicia, brindar servicios de asistencia y constituir un foro de defensa de los derechos y la seguridad ciudadana".
Para comunicarse con la Asociación Madres del Dolor: acercarse a la sede sita en en Fray Justo Sarmiento 320, Florida, Buenos Aires; a los teléfonos: (011)-3968-4082/ 3535-7569; o por mail a [email protected]
Viviam es una de las madres fundadoras que promueve el acompañamiento desde la asociación en la que se puede consultar gratuitamente a abogados en caso de haber pasado por una situación de pérdida por incumplimientos de la Ley Vial. BigBang habló con ella a 21 años de la pérdida de Kevin, que marcó a fuego su historia de vida.
Falta muy poco para que se defina la historia política del país y la gestión que asuma deberá hacer frente a las problemáticas que implican las tragedias viales, la voluntad política en este caso, será fundamental para que se hagan efectivas las condenas de la recientemente aprobada ley de Alcohol Cero al volante.
¿Qué te pareció la implementación de la ley de Alcohol Cero al volante promulgada en abril de este año? ¿Pensás que puede ser el puntapié inicial para una nueva etapa de seguridad vial en Argentina?
- Es una Ley que desde la Asociación de Víctimas de tránsito y desde Madres del Dolor estoy impulsando desde hace muchos años, el tema es que en la Argentina la Ley Vial es muy complicada. Entonces, por ejemplo, ahora tenemos la ley de alcohol cero en la provincia de Buenos Aires pero no la tenemos en Ciudad de Buenos Aires y tenemos en las rutas provinciales, pero no la tenemos en muchos municipios.
Entonces es muy confuso y creo que la Ley de Alcohol Cero es importantísima, que tendría que estar en todo el país. Tendría que aplicarse en todos los municipios, en todas las provincias, en todas las rutas y que también por otro lado debería haber controles. Hoy en día no hay controles en los municipios, no hay controles porque así como me dijo un intendente es piantavotos.
De cara a las elecciones, al ballotage ¿qué esperanzas tenés de que se implementen nuevas y mejores medidas para la seguridad vial?
- Nosotras antes de las elecciones, les pedí a los tres candidatos principales a Javier Milei, a Sergio Massa y Patricia Bullrich reunirse con familiares de víctimas viales, para que ellos comprendan la importancia que tiene la inseguridad vial en la Argentina.
Para que ellos consideren, miren a las estadísticas y que vean que las muertes viales siguen siendo la primera causa de muerte entre los jóvenes que van desde los 14 a los 27 años de edad: mi hijo, cuando lo mataron, tenía 14 años, tenía todo una vida por delante y así de un momento al otro te arrancan la vida.
Cuando pedimos tener estas reuniones, la única que respondió fue Patricia Bullrich y tuvimos una reunión; del lado de Sergio Massa, sí respondieron pero nunca pudieron con su agenda tener esta reunión con nosotros y del lado del señor Javier Milei, soy amiga de Carolina Píparo y a través de ella pedí esta reunión, pero nunca lo logré.
Con respecto al futuro, los familiares de víctimas viales tenemos mucho miedo porque sabemos que, si gana el señor Javier Milei que votó en contra de la Ley de Alcohol Cero, él no está a favor de muchas de las leyes viales basándose en la libertad. Yo le dije en una reunión que tuvimos, es que creo que todos estamos a favor de la libertad para los seres humanos... pero al vivir en una sociedad esa libertad tiene que darse en un marco de límites.
Por algo existe el semáforo: no es que hay un semáforo y basándonos en la libertad cada uno hace lo que quiere... cuando está rojo, tenemos que detenernos y cuando está en verde, podemos continuar. Es tan simple como eso.
Lo mismo con respecto a la Ley de Alcohol Cero: no es una ley seca, tenés ganas de tomar vino de tomarte una cerveza, tenés la libertad de poder hacerlo sin perjudicar a otra persona, entonces para eso no tenés que conducir después de haber ingerido alcohol.
Con respecto al señor Sergio Massa, está funcionando muy bien el Ministerio de Transporte de la provincia de Buenos Aires con el ministro (Rodolfo) D'Onofrio; está funcionando muy bien la Agencia Nacional de Seguridad Vial... está funcionando muy mal el Ministerio de Justicia, está funcionando muy mal el Congreso de la Nación, tenemos varios proyectos presentados nunca nos dijeron 'Este proyecto no sirve o este proyecto lo vamos a modificar', nada porque ni siquiera leen, no los tratan.
El mensaje que nos están dando es que no les interesa la vida, esperemos que gane quien gane, realmente considere y tenga en cuenta que podemos seguir perdiendo tantas vidas jóvenes.
Entonces hay que hacer campañas, hay que insistir en educación vial en las escuelas, hay que insistir en mejorar las rutas y las calles, hay que insistir en los controles y hay que insistir en que, una vez que matan a una persona infringiendo la Ley Vial o produciendo lesiones graves, hay que insistir en prisión efectiva para quienes decidieron pisar el acelerador, no respetar un semáforo, usar un celular o ingerir alcohol antes de conducir.
A 21 años de aquella fecha: ¿qué significa el 1° de mayo de 2002 para vos?
- A 21 años de la muerte de mi hijo sigo sintiendo la misma tristeza que sentí en ese entonces, con la única diferencia que hoy puedo manejar mis lágrimas y puedo guiar esa tristeza, puedo guiar ese dolor, puedo guiarlo y dejar que aflore en mi soledad y que se convierta en una sonrisa cuando esté con mis otros hijos o cuando estoy trabajando o cuando estoy haciendo algo para la Asociación Madre del Dolor...
Pero la muerte de mi hijo la tengo a flor de piel y por eso mismo es que hace 21 años que no paro que no tengo vacaciones, que no tengo sábado domingo, llame cuando me llame un familiar de víctima, estoy me pida lo que me pida. Hago todo lo posible para responder dentro de mis posibilidades. No soy funcionaria, no soy política, pero dentro de lo que yo puedo trato de responder.
La muerte de un plumazo, de un instante para el otro, de un ser humano que tenía tantas ganas de vivir... es como que te arrancaron parte de tu corazón.
Para madres que viven o vivieron la misma situación que vos, ¿qué consejo o recomendación podrías dejar para aplacar el dolor y juntar fuerzas para encontrar Justicia?
- No hay un solo consejo. Siempre digo que todo lo que significa vida, vale. Siempre digo que el dolor mata... mi marido después de la pérdida de Kevin me decía que no iba a soportar ver al asesino de nuestro hijo y así fue: teniendo 50 años murió de un infarto una semana antes del juicio y quedó mi hija de 8 años sin un hermano y sin un padre, mi hijo de 16 sin un hermano y sin un padre, yo sin un hijo y sin un marido con todo lo que eso significa.
Primero y principal emocionalmente, segundo psicológicamente y después también económicamente: de golpe tuve que, con todo el dolor que tenía encima, mantener una casa con mis hijos que necesitaban psicólogos, con problemas en la escuela.
Entonces yo siempre digo que Eduardo Sukiassian mató a dos personas y por matar a dos personas solamente cumplió con dos meses de prisión. A los demás lo que les diría es que no se queden en el dolor, que se levanten, que hagan algo con ese dolor.
Hay madres que ponen comedores, hay otras que se dedican algún trabajo, algún estudio, el consejo es que no se queden en el papel de víctimas y que no se queden en el dolor que se levanten y que la mejor manera de homenajear a esa persona que perdió su vida es haciendo algo por los demás.