Tras las nuevas restricciones de circulación que dictó el Gobierno Nacional ante la segunda ola de coronavirus, algunos famosos argentinos se pusieron de muy mal humor. Otros se adaptaron. Pero Yanina Latorre parece haber armado su propias leyes.
Hoy, en LAM, la panelista comentó que les impuso restricciones a sus hijos Lola y Dieguito por la suba de contagios de covid-19. Para ellos tomó una medida fundamental. Pero sonó muy raro porque lo hizo público horas después de la conferencia del presidente Alberto Fernández.
En una charla con Ernestina Pais, que se mostró indignada ante las nuevas medidas ya que ella es dueña de un restaurant en Palermo; la esposa de Diego Latorre aseguró: "No tolero no ver más a mis amigos". Y completó: "Hay muchas formas de comunicarse. Como madre de un adolescente además es difícil”.
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En ese momento, Pais le respondió: “Con cuidados nos podemos ver igual". Rápida de reflejos, Latorre la interrumpió: "Pero los chicos no tienen cuidado, Ernes”, en referencia a los comportamientos que han tenido sus dos hijos a lo largo de la pandemia de COVID-19. De hecho, su marido y su hija Lola dieron positivo.
Y continuó, sobre las decisiones que tomó en su casa: “Yo directamente a mis hijos después de las diez y media de la noche no los dejo salir de mi casa. Hice régimen talibán". Y agregó, sobre su decisión, que ya recibió quejas por parte de sus dos hijos: “Lo lamento en el alma, dense la cabeza contra la pared... Vean”.
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¿Qué decisiones tomará a partir de ahora? Con las nuevas medidas, la restricción de circulación comenzará a las 20 horas. Por ahora, la panelista no contó si acatarán o no el decreto presidencial. Seguramente lo haga y recibas más quejas de parte de sus hijos.Aunque no es la primera vez que Lola rompe la ley. En noviembre, tras ir a una fiesta clandestina, la hija de Yanina y Latorre fue imputada, tras haber sido aprehendida en un encuentro junto a 139 personas, en un campo de Mercedes, provincia de Buenos Aires.
"Los policías ingresaron en una quinta ubicada en calle 667 y 638, a la 1.30 am del sábado: en el lugar se encontraban entre 400 y 500 personas, que habían pagado su entrada para participar de un encuentro ilegal en el que se vendían bebidas", explicaron fuentes policiales, en aquel momento.
Y completaron: "Con la llegada de los agentes del CPR, muchos de los asistentes (la mayoría jóvenes) huyeron a pie hacia la Ruta 41. Pero otros permanecieron en el lugar, fueron identificados por los agentes y notificados del inicio de la causa. Luego la Justicia ordenó su liberación".