19 Octubre de 2015 17:45
La separación de su mujer y su nueva relación lo habían alejado de sus hijas. Sin embargo, de a poco Andrés Nara va retomando el vínculo que siempre había mantenido tanto con Wanda como con Zaira.
Una imagen del pasado. De a poco, Nara va recomponiendo la relación con sus hijas.
De hecho, fue la menor de sus hijas la que lo llamó personalmente para contarle que iba a ser abuelo nuevamente. “Me lo contó ella, hace 25 días. Ni bien se hizo el estudio en la clínica y se lo confirmaron me llamó”, dijo, para luego referirse a cómo tomó la noticia.
La nueva relación de su padre produjo el distanciamiento con las chicas.
“La verdad es que estoy feliz, voy a ser abuelo por quinta vez. No lo esperaba, pero me llena de alegría por Zaira. ¡Ya son cinco! Es un presupuesto para Navidad, creo que estamos en condiciones de ir poniendo nuestra propia escuela”, expresó exultante.
Después de mucho tiempo juntos, Andrés se separó de Nora, madre de Wanda y Zaira.
Consultado sobre si iba a viajar a Milán para conocer a Francesca, fruto del amor entre Wanda y Mauro Icardi, Nara dijo que “todavía no hablamos de eso”, aunque dejó entrever que muy posiblemente las Fiestas de Fin de Año los reencuentren.
Andrés Nara sueña con reencontrarse con Wanda y conocer a Francesca.
“Supongo que la conoceré si vienen para fin de año a pasar las Fiestas, como suelen hacer. Van a ser especiales este año: tendremos dos incorporaciones más a la familia”, contó ilusionado.
Zaira espera un hijo de Jakob Von Plessen, su pareja. Ella llamó a su padre para contarle.
“Tampoco lo conozco al novio de Zaira, pero igual ya hablamos y la idea es organizar una cena familiar para que nos podamos conocer todos”, agregó con respecto a Jakob Von Plessen, con quien la conductora de “Tu mejor domingo” tendrá a su primogénito.
“Por suerte estoy en diálogo tanto con ella como con Wanda, nos reconciliamos. No puedo decir que tenemos la misma relación que antes, pero vamos encaminando el tema. Estamos abriendo el diálogo y ellas me cuentan de sus cosas, de los chicos. Me siento mejor”, concluyó sobre su relación con las chicas.
Wanda y Mauro llegarían a fin de año para pasar las Fiestas.
Una herida que estaba abierta y que de a poco, gracias a los nietos y al amor que se tienen, más allá de las diferencias, comienza a cicatrizar.