La tristeza y dolor de haber perdido a un ser querido se apoderaron de Andy Kusnetzoff este viernes cuando volvió a su programa de radio tras la muerte de su padre, el sexólogo Juan Carlos Kusnetzoff. El conductor de Perros de la Calle se quebró por completo durante diferentes momentos de una charla en la que hubo emoción, aprendizaje y hasta espacio para un relato entre lágrimas del Rey León.
"Tengo muy en claro que la vida tiene ciclos y que está bien, que yo estoy grande, que él estaba más grande, que estaba al día y lo disfruté. Después, es como decís vos, es la tristeza de decir: 'Ah, ¿no lo veo más?'", soltó el periodista frente a su compañero, el psicólogo Gabriel Rolón. Estas fueron las primeras palabras que pudo sacar sobre el tema sin llorar, tras unos 20 minutos donde la congoja se apoderaba de él de forma intermitente.
"Quería acá tenerte porque es difícil. El primer día es difícil", fue lo primero que llegó a decir el conductor. "Es muy difícil porque es un día extraño. Pensá que nunca jamás en la vida desde que naciste, habías pasado un día sin tu papá", le explicó el psicoanalista, en una invitación abierta a la reflexión. "¿Eso es para que no llore?", preguntó de manera irónica Kusnetzoff, segundos antes de reconocer que el humor siempre me sacó de estos lugares.
"No, no. Te estoy diciendo por qué es tan difícil. Nunca habías hecho radio sin que él estuviera. Es especialmente complejo por todos lados. Pero aquí estás y es lo bueno", definió el especialista en salud mental. La presencia de Rolón fue una necesidad para que el diálogo tuviera la contención necesaria para lograr abordar temas bien profundos, aún con los ejemplos más curiosos.
Con pausas por la tristeza que lo asolaba, Andy leyó una captura de El Rey León que le mostró su psicóloga: "'Mirá las estrellas, los grandes reyes del pasado nos observan, así que cuando te sientas solo recuerda que esos reyes siempre estarán ahí para guiarte, y yo también. Recuerda siempre quién eres'. Y eso le pasa a Simba que se mira a sí mismo en el agua y ve a Mufasa, su padre".
"La verdad que está muy lejos de ser un dibujito animado, es muy profundo", afirmó después. "Cada uno tiene a la persona que no está, dentro suyo de otra manera. Y eso es muy poderoso también. Pero es verdad eso. No es que es un aliciente. Yo creo profundamente en eso", agregó Andy. "Este amor tremendo que vos sentís por él que se distribuía, ahora va todo adentro. Está dentro de vos. Todo ese amor que se lo dabas a él, ahora se lo das a la imagen de él", le explicó Rolón.
La emoción invadió al conductor al principio del diálogo, cuando quiso agradecer "todas las muestras de cariño, que fueron increíbles". "Me superaron un poco y me puso contento", llegó a expresar antes de quebrarse. "Me preparé un montón", reveló mientras negaba con la cabeza. "No hay manera de prepararse, Andy, para estas cosas. Así que como salga, mi hijo", le advirtió el psicólogo.
"Estaba harto de ver amigos que perdieron padres, que siempre me miraban mal como diciendo 'vos no entendés'. Me cansé de eso. Siempre me miraban con desprecio. Bueno, después sigo agradeciendo. Como te dije en el ascensor, hay una parte donde, por todo lo que sentí a través de los oyentes, por los comentarios que leí, sentí que todos perdían a alguien que estuvo desde el primer día en este programa. Sentí que tenía que decir algo, que no podía arrancar como si nada, ¿viste? Pero es difícil", lamentó Kusnetzoff. "El oyente que quería el viernes bien arriba, por ahí podemos más tarde. La última hora levantamos", bromeó.
"Por un lado decís: 'estoy tranquilo', porque era una persona grande, lo viví un montón de tiempo. Hace 25 años tuvo un ACV, estuvo en coma, y tardó mucho en recuperarse. Casi se muere, parecía que se iba a morir y vivió 25 años más espectacular. Todo eso es una tranquilidad", destacó Andy.
"Hay mucha gente que pierde a los padres muy chico. Yo sé que eso es otro tipo de duelo que no es comparable. Pero en un punto hay una tranquilidad de decir: 'si llegaste hasta acá, firmo'. Pero después hay una parte que decís: 'ah, ¿pero no lo veo más?'. Es raro eso. Nunca en mi vida estuve sin saber que no está, no importa si no lo ves todos los días", comparó después.
"Todos seremos algún día un cuento que alguien va a contar. Y que lo importante era dejar las mejores letras posibles para que los que queden cuenten un cuento lindo de quién fuimos. Hoy empezás a contar el cuento de tu viejo, para León, para Elena, que tendrán que construir también al abuelo Juan Carlos. Vas a permitirles a ellos tener un linaje, una emoción que los una, que los comprometa con una manera de vivir", aportó Rolón a un receptivo Andy.
La última charla de Andy y su padre
En otro momento Andy recordó una de las últimas charlas que tuvo con su padre. "En el hospital le digo: 'ponete bien, papá. Que tenés que volver a la radio'. Y esa semana, antes de irme yo, que estaba internado, me dijo: 'ah, ¿sí? Creí que ya no me querían'. 'No, pa. Vos vas a decidir cuándo no venís más. Mientras yo esté y vos quieras ir, vas a ir'. Y esa era mi relación. Yo lo iba a poner acá aunque sea a venir a comer", confesó.
"Quiero decirle gracias a mi papá", intentó decir con muchas pausas Andy, para cerrar el especial y tras agradecerle a su equipo y sus familiares. "Me gustó ser tu hijo. Me gustó compartirlo con los oyentes, muchos decían que era como un padre radial, porque era el mío pero también era de todos", remarcó, para luego terminar con la frase con la que su padre terminaba sus columnas: "Felices orgasmos para todos y todas". El tango "La Pavadita" interpretado por la orquesta de Alfredo De Angeli, favorito de Juan Carlos, se encargó de cerrar el emotivo momento. "El tango te espera", había sido una de las frases que le dejó antes de partir.