Bridgerton salió a la luz por primera vez un 25 de diciembre de 2020 en la plataforma Netflix. Desde ese momento, fue un éxito arrollador y con una mirada provocativa de la alta sociedad londinense logró obtener fans en todo el mundo. La ficción, producida por Shonda Rimes -creadora de la multipremiada Grey's Anatomy- y basada en la saga de Julia Quinn, regresó ahora con su segunda temporada, en donde la trama tiene como principal protagonista a Anthony Bridgerton (interpretado por Jonathan Bailey).
A diferencia de la primera temporada, en donde el tenor de la serie era "hot" pero más romántico, ahora las escenas ardientes están a la orden del día y el protagonista reveló alguno de los trucos caseros con los que se llevan adelante las escenas de sexo.
"Si hay dos personas haciendo una escena de sexo, la regla es que deben tener tres barreras que los separen. Hay ciertos actos en los que una pelota de netball (del tamaño de una de handball) medio inflada puede permitir el movimiento, sin tener que conectarse físicamente", reconoció Bailey en diálogo con la BBC.
El actor reconoció además que cuando recibe un guión con la letra "B" en su portada ya sabe que tendrá escenas de alto voltaje, una práctica utilizada por los productores para que los actores se puedan preparar y estén más cómodos a la hora de la grabación. "Es bastante tonto realmente y tenemos algunos momentos graciosos, pero (la pelota) lo hace menos incómodo".
Además, el galán inglés reconoció que se pacta de antemano qué partes del cuerpo se podrán mostrar o ser tocadas durante las escenas de sexo. "Hay una mirada femenina y se establece un consentimiento para saber qué parte de piel vamos a mostrar en cada escena, dónde nos van a tocar y cómo", destacó, al tiempo que aseguró que hay un equipo de productores que se asegura de acompañar al elenco antes de las escenas para que "nadie entre temblando o preocupándose por cómo irá".
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Asimismo, Bailey aseveró que "las escenas de sexo son en un baile coreografiado”, y que siempre se busca la comodidad de las mujeres, como su coprotagonista, Simone Ashley. "La idea es que las mujeres se sintieran cuidadas y seguras. Sobretodo a las que recién arriban el set de grabación. Las escenas son menos expuestas para los hombres”.
Por otro lado, Ashley, quien interpreta a Kate Sharma, detalló a E! News cómo fue la experiencia de trabajar con Bailey dentro y fuera de la pantalla. “Confié en Johnny muy rápido y me sentí muy cómoda siendo vulnerable en mi personaje con él”. Y agregó: “Tenemos muchas cosas no dichas entre nosotros, donde nos entendíamos como actores y con lo que queríamos crear entre estos dos personajes. Estamos tan entusiasmados de hacer que esto sea lo más mágico y maravilloso posible”.