27 Noviembre de 2018 08:31
Aunque Andy Kusnetzoff y su programa Perros de la Calle se llevaron el oro y fueron los grandes ganadores de la noche, Cacho Fontana y Pinky tuvieron un gran lugar protagónico anoche en la entrega de los Martín Fierro de radio.
Cacho y Pinky recibieron con emoción el homenaje.
Es que ambos, legendarias figuras del espectáculo argentino, recibieron una estatuilla especial en la ceremonia -celebrada en el Hotel Sheraton- como homenaje a su vasta trayectoria.
"Queremos aprovechar para dar las gracias al público. No sé cómo será el destino, no puedo imaginarlo, pero a lo mejor este sea la última posibilidad de estar frente a cámara", expresó con emoción Fontana. "Ustedes no saben lo difícil que es alejarse de este medio, que ha sido tan generoso con nosotros, que nos ha dado tanto".
"La radio y la TV fueron los únicos lugares donde jamás hemos tenido miedo", agregó Pinky quien se tomó un momento para agradecer al dueño del hogar para personas de la tercera edad en el que reside junto a Cacho.
"Estuvimos 30 años sin vernos. Un día me llama, yo llevaba mucho tiempo en cama, y dice que Salvador, un amigo suyo, me ofrecía recibirme en su residencia. Por eso este homenaje se lo dedico a él, si no fuera por él, yo no estaría acá para recibirlo", expresó con gratitud.
Reencuentro
Tiempo atrás y ante los rumores de que estaba en un asilo de ancianos, Pinky aclaró su situación en una entrevista con revista Gente de la que también participó Fontana.
Pinky y Cacho trabajaron juntos en varias ocasiones.
"Es un centro de rehabilitación que, cuando te toca a los 10 años, la gente cuenta: 'Está en un centro de rehabilitación'. Ahora, te toca a los 80, como a mí, y dicen: 'Está en un asilo'. ¡No es lo mismo!", aclaró.
"Es curioso que ahora que no estamos mal, pero nos faltan cinco para el peso, hayamos vuelto a reunirnos y a reírnos como toda la vida", terció Cacho con humor.
En ese sentido, Pinky explicó que tiene algunos trastornos de equilibrio y debilidad muscular. "¡Y yo tengo de todo!", agregó Fontana. "Mejor dicho, tenía. Estaba peor que ella cuando llegué: ya ni sé lo que no tenía".