Calu Rivero fue la primera actriz que se animó a denunciar públicamente a Juan Darthés por acoso sexual. Más tarde, llegaron las acusaciones de las actrices Ana Coacci, quien fue sobreseída a principios de año en la causa que le había iniciado el actor por "calumnias e injurias", y Natalia Juncos. El ex Patito Feo se fue de la Argentina y está viviendo en Brasil, su tierra natal, tras la denuncia por violación que realizó Thelma Fardin en Nicaragua.
En 2012, Rivero -que ahora se hace llamar Dignity- había trabajado con Darthés en la ficción Dulce amor, la cual era un éxito en la pantalla chica. En aquel momento, generó sorpresa su renuncia a la telenovela producida por Quique Estevanez, pero cuatro años más tarde, la actriz reveló que abandonó la ficción en su mejor momento porque era acosada por su compañero de elenco, que en 2018 también le inició acciones legales por daños y perjuicios.
Fue en diciembre de 2018 que Fardin hizo una conferencia de prensa acompañada del colectivo de Actrices Argentinas para denunciar públicamente que Darthés -ya lo había acusado con anterioridad en la Justicia de Nicaragua- la había violado en 2009, cuando ambos estaban realizando una gira como parte del elenco de la ficción Patito Feo por el país de centroamérica. En noviembre de 2019, Interpol ordenó la captura internacional contra el actor.
En medio de este contexto, Calu decidió darle un nuevo giro a su lucha judicial con Darthés: cambió de abogado y modificó su estrategia judicial. “Voy a luchar para instalar la perspectiva de género en sede civil. Quiero ver cambios en la Justicia. Voy a luchar para instalar la perspectiva de género", le afirmó a su entorno y aseguró que ya no tomará decisiones "desde el miedo", sino "desde el amor", lo que la llevó a intentar cambiar la historia en materia de daños.
Representada por la Red de Contención, recurrió a la abogada Raquel Hermida Leyenda, quien actuará conjuntamente con la civilista Marcela Arvia, con el objetivo de enfrentar al actor en la justicia. "Un abusador no tiene derecho a daños y perjuicios", señaló la letrada, la cual está tras los pasos de modificar que la causa que lleva desde 2018 el Juzgado Civil N° 39 no sea por "daños" y que incorpore la perspectiva de género.
Cabe resaltar que la causa judicial por calumnias e injurias contra Anita Coacci, que le inició Juan Darthés, después de que ella lo denunciara mediáticamente por abuso sexual, llegó a su fin en mayo de este año. Después de tres años de lucha, la Justicia le terminó dando la derecha a la actriz -que estuvo representada también por Hermida Leyenda- al concluir que el actor mostró “falta de interés” durante todo el proceso judicial.
De hecho, nunca se presentó a las audiencias y, claro está, tampoco lo hizo en el juicio. La abogada le había explicado a este sitio que en los juicios por injurias “es necesaria la presencia del querellante (en este caso Darthés). Además, no hace falta estar inactivo 60 días, lo importante es que lo que digas modifique y represente el interés real del querellante. En este caso, Darthés dijo que quería continuar con la causa, pero no lo demostró", resaltó.
Según Hermida Leyenda, el actor "jamás se presentó" ante la justicia después de haberle iniciado a Coacci una causa por "calumnias e injurias". "La justicia entendió que Darthés nunca padeció injurias al no presentarse nunca y no manifestar ninguna voluntad de hacerlo. A nosotros, como abogados, nos cambiaron las reglas de juego o la historia, porque ahora en esta clase de juicios la representación por apoderado no tiene validez", destacó.
Cabe remarcar que el ex Simona no participó de ninguna de las audiencias judiciales entre las partes dado que -se justificó- estaba viviendo en Brasil desde que Thelma Fardin lo denunció por "violación". En ambas oportunidades, el actor había acusado enfermedad a través de su abogado, Fernando Burlando, quien sostuvo que Darthés sufría de ataques de pánico como consecuencia del estrés que padecía.
El año pasado, Calu había hecho una reflexión sobre lo que sintió al enterarse de la emisión de la alerta roja contra el actor en su cuenta de Instagram. “En el canal de YouTube de @stylelikeu subieron la entrevista que hice hace 1 an?o atra?s. Recie?n llegada de un viaje por Grecia e Israel. Un viaje que hice en soledad y silencio. 7 di?as de silencio y ayuno, co?mo parte de un workshop con @abramovicinstitute”, había escrito en la red social.
En dicha entrevista, la actriz habló de su paso por la novela Dulce amor y de las situaciones incómodas que le tocó vivir con Darthés, aunque no lo nombró. “Estaba haciendo un programa de televisión donde mi papel era muy estereotipado. Una joven a la que no le importaba nada, las mujeres eran un objeto y algo sexy. La mayoría de los valores que tenía mi personaje me lo dieron mis representantes y no me gustó nada”, contó Dignity.
En ese momento ella tenía 24 años y se trataba de su primer gran proyecto: “Era la actriz principal de un gran éxito. Todos vieron esta telenovela, me sentía muy feliz. Era mi sueño pero a la vez tuve una experiencia muy mala con el otro actor principal. Este tipo estaba abusando de su poder, estaba modificando las escenas para tocarme y besarme más, de una manera horrible. Me sorprendió porque la cámara estaba grabando y todos estaban ahí, y nadie hizo nada”.
En un momento, para Rivero, todo “comenzó a ser una mierda”, fue entonces cuando intentó hablar con él: “Lo hice a través de las redes porque no tenía su teléfono y nunca quiso hablar de otra manera que actuando. Recuerdo haberle mandado un mensaje en Twitter diciendo 'esto es todo, no puedo, necesito que cambies y entiendas' y me dijo 'ok, podemos hablar con el productor para cambiar la historia, quizás podemos sacarte del programa'”.
Cabe destacar que en 2019, Fernando Burlado -abogado del actor durante aquella etapa- opinó respecto al juicio por daños y perjuicios que el actor le inició a Rivero bajo el patrocinio de Ana Rosenfeld y consideró que fue "la peor decisión de su vida"."Yo no le hubiese hecho juicio a Calu Rivero como se lo hizo Juan, me parece la peor decisión de su vida. Tenía todo el derecho de iniciarle juicio, pero eligió muy mal el modo y el lugar. No era para iniciarle juicio", había dicho.