29 Diciembre de 2022 17:13
Escape a la victoria fue una de las películas más recordadas de la historia, y no por la trama o por las grandes actuaciones, sino por sus actores. Se estrenó en 1981 y conllevó un presupuesto de 10 millones de dólares. ¿El por qué de su recuerdo? Uno de sus protagonistas fue el astro del fútbol brasilero, O Rei Pelé, quien falleció esta tarde tras estar un mes internado.
Este film (basado en una historia real) cuenta con varios jugadores de futbol además del ex Santos, como Osvaldo Ardiles y Booby Moore quienes fueron más que compañeros de trabajo y se convirtieron en amigos junto a los dos otros protagonistas Sylvester Stallone y Michael Caine. La película está ambientada en Francia durante la Segunda Guerra Mundial, unos años antes de la caída del nazismo, cuando se disputa un partido de futbol entre un equipo de soldados nazis y un equipo de prisioneros de guerra. El premio: la libertad.
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La idea del partido era jugar por la libertad de los grupos. Inspirada en la historia ocurrida el 9 de agosto de 1943, por parte de en ese entonces la Unión Soviética, actualmente Ucrania, en la cual un grupo de miembros del Dynamo de Kiev se vieron obligados a comenzar a realizar tareas en una panadería, y crearon un equipo de deporte que disputó algunos partidos contra los grupos que estaban apoyados por el gobierno, que en realidad estaban controlado por los alemanes.El denominado FC Start jugó siete partidos contra equipos de otras guarniciones y les ganó todos. Si bien uno solo fue por un gol de diferencia, el resto fueron goleadas y gracias al último partido, esta historia se hizo mundialmente conocida. Se jugó con público en el estadio del Zenit en contra un equipo de la fuerzas aérea, y con un arbitraje similar al del partido de Argentina-Paises Bajos 2022, ya que no cobraba las faltas en contra. Antes de salir a jugar las autoridades le advirtieron a los jugadores de posibles represalias si ganaban. Se impusieron por 5 a 3 y fue bautizado como "el partido de la muerte".
Una semana después se jugó la revancha, la cual ganaron 8 a 0. Pero los nazis no solo eran asesinos y violadores de todos los derechos humanos, si no también malos perdedores. Días más tardes de dicha revancha, los ganadores fueron víctimas de torturas sumamente violentas, que dejaron a más de la mitad del equipo agonizando o muertos.
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A diferencia de las historias convencionales, esta película tiene una rareza interesante y creativa, que es la vuelta de tuerca que le dieron a la trama. En un momento, los jugadores se plantean la posibilidad de escaparse durante un partido y en conjunto de sus compañeros del equipo logran tomar decisiones sumamente irreversibles que de todas formas les iban a cambiar la vida para siempre.
Que en ese entonces se haya llevado a cabo esta producción y se haya pensado la idea de contar esta historia por el fútbol, tiene que ver mas que nada con la influencia que tenía Pelé en ese entonces. Era considerado el mejor del mundo. Su figura representaba lo que Diego Maradona en Argentina e incluso ambos supieron limar sus asperezas deportivas y personales. La película no fue merecedora de grandes premios y verlo a Stallone interpretar a un arquero es sumamente insólito. Pero, por otra parte, el resto de los jugadores pudieron demostrar su grandes destrezas en el fútbol. Y ahora se transformó en un homenaje eterno para O Rei.
