16 Octubre de 2015 09:28
Sorprendieron. Dieron un batacazo personal. Si alguien hubiese tenido que apostar, pocos hubiesen creído que fuera posible. Sin embargo, pasó: son jóvenes, sexies pero, si se observa su pasado, no todo era color de rosa. Se trata de un grupo de famosas que supieron reconstruir su imagen y cambiaron: se volcaron de lleno al gym, también a los cirujanos plásticos, y la vida sana.
BigBang te cuenta quiénes son las famosas que pasaron de ser “sabrosas” a sensuales bellezas con cuerpos esculpidos.
Alessandra Rampolla
Cansada del sobrepeso y para evitar futuros problemas de salud, la sexóloga televisiva se sometió en agosto de 2008 a una cirugía de bypass gástrico con dos médicos colombianos expertos en obesidad. Un cambio radical en su vida.
La vieja Alessandra, cuando visitaba a Susana y se cubría el cuerpo.
"Cuando decidí operarme lo hice por cuestiones de salud. Claro que me motivaba verme mejor, pero no era mi prioridad. Sabía que mi salud comenzaba a verse afectada por el sobrepeso”, reconoció en su momento.
El increíble cambio sorprendió a todos. Y es que, en cuestión de meses, Rampolla logró bajar 38 kilos y lució orgullosa su nueva silueta.
Tal fue el cambio que, tres años después de su operación, la puertorriqueña anunció su divorcio de John Hernández. “En determinado momento, la vida nos llevó por caminos diferentes”, justificó ella. El cambio interno se sumó al externo.
Pero su nueva figura le dio más confianza y, pronto, la sexóloga encontró nuevo novio: Bobby Conelly Nadal, un ingeniero en sonido 12 años menor.
“Tengo ganas de ser mamá. En mi relación anterior no me sentía a gusto buscando un embarazo con el sobrepeso que tenia. Por eso busqué de qué manera manejarlo. Mi deseo de ser mamá siempre estuvo”, reconoció.
Daisy May Queen
La conductora radial experimentó un marcado y brusco descenso de peso al sacarse de encima los 32 kilitos de más que le molestaban con el nutricionista de las famosas, Máximo Ravenna.
“Me siento tan bien, estoy muy contenta. Ahora puedo comprarme ropa de todas las marcas y decidir yo si quiero o no un pantalón”, destacó emocionada. Aunque tiempo después sufrió el “efecto rebote”.
Desnuda: la nueva Daisy se mostró tal cual es, tras bajar 32 kilos de peso.
El cambio llegó después de su divorcio en 2005. “Siempre defendí a las gorditas. Tuve una vida sexual, sentimental y profesional plena. Siempre me quise como era, pero ahora me cambió la visión de todo. Me puedo ver el ombligo y antes no”, reconoció entre risas.
Con pollera, Daisy en el campo, donde crecen las flores. Ella ahora se siente una más.
Aunque en su nueva etapa espiritual la conductora abrazó el celibato, el primer período de su soltería lo vivió con todo.
“Me encanta que me digan que estoy bárbara. Noto que me tratan distinto, me pasa con gente que trabaja conmigo desde hace diez años. ¡Hasta me hablan de otra manera! Los hombres son de babosos”, advirtió.
Hacia el mar: liberada, Daisy disfruta del aire libre. Se la ve feliz.
3. Agustina Cherri
Aunque nunca tuvo un sobrepeso marcado, la transformación de la actriz sorprendió a muchos. Es que la ex mujer de Gastón Pauls reapareció en 2011 con una nueva silueta: mucho más tonificada y estilizada. ¿Cómo lo logró? Cambió por completo su alimentación.
La belleza natural de Agustina. Una morocha que supo transformar su cuerpo.
“Cuando quedé embarazada con Gastón decidimos qué tipo de alimentación y medicina queríamos para darles a nuestros hijos. Estudié cocina macrobiótica y vegetariana, para saber cómo reemplazar el calcio, el fósforo y el hierro, que es todo lo que el niño necesita en los primeros años de vida”, destacó a la revista Luz.
“
Que esté tan flaca es un poco de todo: el trajín, grabar doce horas por día (en ese momento participaba de la tira
Mis amigos de siempre
), llevar a los chicos al colegio, a patín, a natación. Y le di la teta a Nilo hasta el año y cuatro meses. Estoy un poco cansada, pero sé que va a ser hasta que me acomode al ritmo. Hice esto toda mi vida, pero se ve que me había olvidado”, explicó.
Sentirse feliz! buenas noches ??
La mamá de Muna y Milo no sólo implementó el nuevo menú en la dieta de sus hijos, sino que también lo aplicó en su propia rutina. Y así, la voluptuosa adolescente que mostraba sus curvas latinas en Verano del 98 pasó a pesar sólo 43 kilos. Casi otra persona.
¿Qué es lo que come ahora? “Muchas legumbres, granos, semillas. Mis hijos desayunan leche con almendras. Hay ciertos productos que ya no existen: gaseosas, dulces y lácteos”, detalló.
Los cambios llegaron de la mano de su separación de Pauls. Pero, pocos meses después del anuncio oficial, la actriz blanqueó su relación con el músico Pepo Vera. “Es muy protector y seguro de sí mismo. Me encanta que sea músico y que no venga del palo de la actuación. Vamos bien, de a poco, disfrutando de este lindo momento”, destacó.
4. Gianinna Maradona
La hija de Diego Maradona creció delante de las cámaras y lució más de una figura. Por momentos rellenita, por otros más delgada, la morocha supo desarrollar una figura trabajada a fuerza de yoga, meditación, entrenamiento y buena alimentación.
Giannina, junto a su madre y su hermana. Esfuerzo y comida sana para la joven.
Fanática de las “Kangoo Jumping”, unas botas similares a los rollers pero que permiten saltar y tonificar las piernas, la hija del “Diez” aprovecha los caminos del barrio privado de Tigre en el que vive para mejorar su cuerpo.
Voy a vivir literalmente colgada... Gracias @emontefalcone Love YOU! pic.twitter.com/CVZNnGGcSn
- Gianinna Maradona (@gianmaradona)
Faltamos a la mañana y aprovechamos a compartir este momento juntos... Gracias @emontefalcone ???? -namaste- ?? pic.twitter.com/umQ6ou6Xo6
- Gianinna Maradona (@gianmaradona)
Además, la ex del Kun Agüero practica todos los días yoga y cambió su dieta por una más saludable. Su hijo, Benjamín Agüero, la acompaña en todas y cada una de sus actividades.
Hoy entrenamos con el mas potro del mundo!!!! @Tatimalha ?????? pic.twitter.com/olMNlaLLre
- Gianinna Maradona (@gianmaradona)
Arrancar el día power con kangoo y continuar con YOGA es la que va... Namaste ?? pic.twitter.com/2vgMlikcoA
- Gianinna Maradona (@gianmaradona)
Miro la vida en color y tu en blanco y negro... pic.twitter.com/AVlEWvDMWj
- Gianinna Maradona (@gianmaradona)
Ups... Me descubrieron! ?? Estoy de 9 meses... pic.twitter.com/2ruEmmrWQA
- Gianinna Maradona (@gianmaradona)
5. Jimena Barón
Era una actriz del under y creció en la TV: se la vio como una niña inocente y en roles dramáticos. No parecía que el crecimiento, con los años, y el gym, la iban a ayudar tanto: hoy Jimena Barón, producto del baile y los aparatos, moldeó su cuerpo como pocas.
“Con todo el tema del Bailando aprendí a no ser pudorosa con mi cuerpo. Ahora me gritan cosas con nombre y apellido hasta los recolectores de basura
La niña Jimena. Pocos aventuraban que luego sería una bomba hot.
A pesar de ser madre, la morocha posee un cuerpo escultural y la muestra cada vez que puede. “Siempre fui segura de mí misma, sólo que ahora lo muestro en la tele. Con todo el tema del Bailando aprendí a no ser pudorosa con mi cuerpo. Ahora me gritan cosas con nombre y apellido hasta los recolectores de basura, que antes ni me reconocían”, contó.
Un batacazo si se toma en cuenta su pasado de adolescente, antes de sucumbir ante los beneficios de los electrodos. “¡Tengo que cuidarme mucho! Porque hay cosas que nadie las dice, pero cuando entré al Bailando me enteré: ¡todas se hacen de todo! Tratamientos estéticos, electrodos, dieta... Está perfecto, porque se trabaja con el cuerpo. Yo también lo hago”, apuntó Barón.
La Jimena adolescente. Lejos de los electrodos y el gym con aparatos. Había viajado a Oceanía.
“Eso fue cuando volví de Nueva Zelanda, donde estaba heavy, porque allá no me conocía nadie y me la pasé comiendo. Trabajaba de camarera en un hotel cinco estrellas, nevaba y la comida era riquísima. ¡Volví obesa! Desde hace un año me puse las pilas y mis curvas cambiaron radicalmente”, reconoció.
La actriz comparte a diario sus recetas en las redes sociales y, desde hace cuatro años, se convirtió en una fanática de la vida sana. “Siempre hice muchas locuras con las dietas. Una semana hacía la de la clara de huevo, fui dos años vegetariana y uno no comí harinas. Pero me di cuenta de que el balance está en comer sano, entrenar, electrodos, un “permitido” por semana y listo”.
El regreso televisivo de la morocha llegó este año cuando, tras su separación de Daniel Osvaldo, se incorporó a la tira Esperanza mía con un personaje muy sugerente. “Cuando hacía papeles cuidaditos, me encaraban más. Ahora veo el miedo en los hombres. Podré gustarles más, pero se acercan menos Desde que me animé a destaparme, los hombres me encaran menos. No sé, genero una especie de miedo”, se quejó.
Silvina Luna
Fue modelo, pero cuando entró en 2001 a la casa de Gran Hermano no se cuidó: ingirió alimentos demás y prácticamente no realizó actividad física durante el reality.
La Silvina post reality. “La harina me mató”, dijo sobre sus hábitos alimenticios en GH.
“Engordé diez kilos adentro de la casa. La harina me mató. El verano antes de entrar pesaba 48 kilos. Los pantalones ya no me entran, me quedan todos ajustados. Me pongo loca porque es incómodo”, reconocía tras su salida del reality.
“No soy una obsesiva con mi cuerpo: no hago dietas y tampoco me mato en el gimnasio, porque me aburre.
Pero el tiempo pasó y, pronto, la infartante rosarina recuperó su silueta y se hizo de un cómodo lugar en los medios. El debut llegó en La peluquería de Don Mateo, en donde interpretaba a una sensual pero inocente joven.
“Tuve la experiencia de haber subido de peso, algo que a cualquier mujer le puede pasar, y no lo viví como algo traumático. Pero no soy una obsesiva con mi cuerpo: no hago dietas y tampoco me mato en el gimnasio, porque me aburre. Prefiero tomar clases de baile y comer sano”, dijo Silvina.
La belleza de Luna, poca dieta y buena genética para la modelo que estuvo en GH.
“El invierno es un problema: hay muchos chocolates dando vueltas. Además, así como hay hombres que mueren por las más flacas, otros prefieren a las pulposas
Luna hoy goza de uno de los cuerpos más envidiables del mercado. A pesar de sus inconvenientes de salud, producto de una operación fallida en sus glúteos, su belleza sigue siendo despampanante.
7. Florencia Peña
Supo ser la “Pechocha” a sus tiernos 15 años cuando protagonizó “Son de Diez”, la mítica tira de Canal 13. Si bien ya era una bella morocha, pocos apostaban a que, con los años, mantuviera una figura esbelta.
El primer gran cambio llegó después de que la actriz decidiera someterse a una reducción mamaria. “Me saqué dos pesos de encima. Jamás hubiera sido una actriz con esas tetas, además me pesaban mucho y me traían problemas de columna”, justificó.
Esculpida. La belleza corporal de Florencia, la actriz que fue una bomba hot desde chica.
“Soy de buen comer, pero tengo un buen organismo. Odio hacer gimnasia, me aburre. Me cuido, voy a la dermatóloga y me pongo electrodos, de esos que sentís que estás por explotar”, aclaró.
La aparición de sus videos íntimos no hizo más que enaltecer su imagen de mujer sensual. “Llego a los 40 con un cuerpo bello pero imperfecto, las mujeres nos ponemos mejor a esta edad”, reconoció. ¿Su rutina de entrenamiento? “Combino crossfit con boxeo o gimnasia con elementos. No soy obsesiva y me llevo bien con mis defectos”.
En un rato se viene la anteúltima función de #CasiDiva en #CarlosPaz y Mañana Gran Despedida! Temporada feliz!!! pic.twitter.com/DlP4O1e7FQ
- Florencia Peña (@Flor_de_P)
"@Juani_FJ: Trabajar con @Flor_de_P es un placer giganteee!Hermosa por fuera y por dentro.Llena de energía! pic.twitter.com/snoeiJ1snd"/TQ juani
- Florencia Peña (@Flor_de_P)
Lorena Paola
Es una de las grandes abanderadas del cambio. Pasó de ser la “gordita simpática”, y una actriz referente a su corta edad, a una mujer sensual de curvas pronunciadas.
Lorena, de pequeña. Carismática, era una actriz estrella con menos de diez años.
Fanática del gimnasio, se dedicó en los últimos años a moldear su cuerpo con fuertes rutinas de aparatos y aeróbico. Incluso llegó a dar clases de ello.
Lorena Paola hoy: un cuerpo trabajado en la playa.
“Cambié en la adolescencia, en el desarrollo. No hubo ningún misterio raro. Tomo clases de baile, entreno y corro casi todos los días. Lo hago por una cuestión de salud. Yo tengo el vicio de entrenar, es como una filosofía de vida”, reveló.
Descansando, frente al mar, y mostrando cómo el gym puede ayudar.
Después de su transformación, la rubia pasó años manteniendo su escultural figura, pero sentía que algo le faltaba. “La operación es algo que venía postergando hace diez años. No lo hice antes porque soy medio hipocondríaca”, reconoció.
El mar de testigo. Lorena y su cuerpo, con la ayuda de la genética y el trabajo aeróbico.
Y, a diferencia de la mayoría de las famosas, el aumento fue discreto. “Cuando mi hijo (Luka, 16 años) me vio por primera vez, me dijo: "¡Te hubieras puesto más, mami!". Pero no quería algo grotesco porque soy chiquitita, es un detalle: me puse 300 centímetros cúbicos”.
9. Nancy Dupláa
La mujer de Pablo Echarri fue una de las pocas famosas que se animó a confesar su debilidad por la comida y sus problemas con el peso. A pesar de ello, se transformó en objeto de deseo desde su tierna adolescencia mientras grababa la mítica tira juvenil Montaña Rusa.
Con el tiempo, la morocha mantuvo su lugar en los medios y mostró más de una silueta. “La televisión te hace más gorda. Siempre te hace sentir que tenés entre cuatro y cinco kilos de más”, cuestionó.
Nancy confiesa sus problemas con la comida aunque su belleza esté fuera de debate.
A los 45 años y después de dar a luz a sus tres hijos, Nancy tomó el toro por las astas y se sometió a una polémica dieta española: el método PronoKal. “No había podido recuperar el cuerpo que tenía antes del embarazo de Julián (5). Por eso decidí hacer dieta. Además, en la tira tengo que conquistar a Pablo, y para eso me tiene que ver hecha una diosa”, justificó en alusión a La Leona, la tira de Telefe con la que regresará a la pantalla chica.
Feliz. Duplaa se concibe tal cual es, aunque reconoce sus problemas.
“Bajé diez kilos. Fue duro acostumbrarme, pero pude cumplirla. Ahora estoy en la etapa de mantenimiento, y trato de no tentarme. Lo sorprendente es que bajé todo en un mes, y ahora ya puedo mezclar los alimentos”, agregó Nancy.
“No sólo me estoy cuidando de las comidas: con Andrea (Pietra) vamos a crossfit, porque soy muy fiaca para hacer deportes sin compañía”, remató.