06 Agosto de 2015 03:33

El camino a la fama tiene sus costos. Conscientes de la necesidad de portar un nombre “vendedor” y “armónico”, muchos famosos decidieron abandonar la identidad elegida por sus padres y le dieron rienda suelta a la creatividad para adoptar nuevas identidades. Históricas peleas familiares, apellidos impronunciables, polémicos nombres y hasta errores de imprenta explican el fenómeno.
LAS DIVAS QUE CAMBIARON SU MARQUESINA
Mirtha Legrand fue una de las primeras en cambiar su nombre y adoptar uno más elegante. Por sugerencia del productor Ricardo Cerebello,dejó atrás el “Rosa María Martínez Suárez” y se quedó con el que hoy ya se convirtió en una marca registrada.
Moria Casán, en tanto, fue inscripta en 1946 como Ana María Casanova, mientras que Susana Giménez anuló su segundo apellido, Aubert, para acortar cartel. Su mejor amiga, Teté, prefirió acortar su nombre y dejar de lado el Stella Maris.
La Chiqui Nació en Villa Cañás y la inscribieron como Rosa María Martínez Suárez.
LOS NOMBRES MÁS INSÓLITOS
Nacha Guevara lidea el conteo de las “justificadas”. Y es que la cantante y actriz fue inscripta por sus padres como Clotilde Acosta. Similar es la situación de Heraclio Catalín Rodríguez Cereijo, más conocido como Horacio Guarany.
Clotilde, más conocida como “Nacha”.
Fernando Bravo, por su parte, debió cambiar su apellido y adoptó su segundo nombre como primero. ¿Qué dice su DNI? Alberto Fernando Puchulu. Lo mismo hizo Arnaldo André, quien en realidad responde a Arnaldo Andrés Pascua. Aunque no se cambió su nombre, Nito Artaza responde desde hace años a un apodo y pocos saben que en realidad se llama Eugenio Justiniano.
DE APELLIDOS Y ALGO MÁS
Suar podrá ser uno de los apellidos más fuertes del espectáculo pero la verdadera identidad del gerente de programación de El Trece es Adrián Schwartz Kirzner. Lo mismo sucedió con Cecilia Roth, quien acortó su apellido original: Rotenberg.
El verdadero nombre de Marcelo Araujo es Lázaro Zylberman.
¿Otros inventos? Pablo Rago (Ragonese), Pablo Alarcón (Rodolfo Francisco Marabotto), Matías Alé (Juan Matías Eslaiman Alé), Evangelina Paternó (Paternó), Marcelo Araujo (Lázaro Zylberman), Jorge Corona (Jorge Antonio Femenías), Leo Dan (Lepoldo Dante Tévez), Juan Darthés (Juan Rafael Pacífico), Sergio Denis (Héctor Omar Hoffmann) y Emilio Disi (Emilio Roberto Parada).
PELEAS, REGALOS Y ERRORES DE ESCRITURA
Hilda Isabel Gorrindo, más conocida como Isabel Sarli, anuló el apellido paterno y se quedó con el materno, después de que su papá las abandonara. “No iba a usar el apellido de un desgraciado que nos abandonó cuando yo tenía cuatro años”, reveló.
Graciela tenía prohibido usar su apellido familiar y Jorge Luis Borges le regaló el suyo.
Graciela Borges (Zabala), por su parte, también le debe su nombre artístico a una pelea con su padre. “Me había prohibido usar su apellido cuando le dije que iba a ser actriz. A Borges Lo conocí en la casa del escritor Augusto Mario Delfino. La angustia que tenía era tan grande que me puse a llorar en la mesa. Conté lo que me pasaba y Borges me dijo que me prestaba su apellido. Así fue. Luego, cada vez que nos encontrábamos, me preguntaba: '¿Le sigue haciendo honor?'”, contó.
“Cacho”, o Humberto Vicente.
El único del listado que no eligió cambiar su identidad fue Humberto Vicente Castagna, a quien un anónimo de una discográfica bautizó “Castaña” por un error tipográfico. “El tipo de la imprenta se equivocó, me puso el apellido como sonaba, y pasé a ser Castaña. Lo más loco es que jamás conocí a esa persona”, explicó el Matador.