El deseo es incontenible y más si se corre un riesgo que aumenta la adrenalina y no hay filtro ante la abstinencia. En la casa de Gran Hermano se planteó un juego: besar como en una telenovela y siguiendo la consiga no hay nada mejor que seguir la línea de conflicto de amores cruzados entre familiares. Marian Farjat no tardó en sumarse a la idea y besó a su ex cuñado, Eloy Lanzelotta, como si ya no fuera lo suficientemente polémica.
Todo surgió ante la escasez de alimentos que puso en jaque a los habitantes de la casa. La producción del juego planteó la idea de desafiarlos para ganar más presupuesto y comprar más alimentos. Como si no fuera demasiado, Matías debió ser el que convenciera a Marian para que Eloy la bese. Pero enseguida ambos desdramatizaron la situación.
Más allá de que Marian se caracteriza por sus excesos el beso duró diez segundos ante los ojos del resto de los participantes. Luego llegó el momento de arrepentimiento pero todo sea para tener la panza contenta.
Brian, mientras tanto, fuera de la casa lo tomó con humor. “Se nota que ambos no estaban cómodos”, sostuvo el ex jugador.