Por primera vez en 23 años, La venganza será terrible, el ciclo radial que encabeza Alejandro Dolina, fue levantado del aire por el propio conductor cuando faltaban unos veinte minutos para que terminara. ¿El motivo? El personal de seguridad del edificio de Radio del Plata impidió "que entrara un amigo de la casa", y “El Negro” consideró que la acción era "un mínimo gesto en defensa de la gente".
Dolina conduce La Venganza Será Terrible desde 1993
“Los invito a todos a sumarse a este abandono del programa en contra del atropello que sufrió una persona del público, un trabajador, un amigo de la casa, por parte del personal de seguridad de esta radio”, arengó Dolina a su público entre aplausos de apoyo cuando decidió dar por concluida la emisión del día antes de tiempo.
"Radio del Plata no es el teatro San Martín donde no se puede entrar después de comenzada la función, lo de maltratar a la gente pasa seguido, no tengo interés en botonear a quienes están laburando, pero si además de estar trabajando en un espacio de poco presupuesto, la gente de seguridad asume una actitud represora, no voy a soportar que maltraten a la gente, aunque lo hagan conmigo diariamente", manifestó indignado.
A lo largo de su historia, "La Venganza Será Terrible" siempre tuvo público presente
La venganza será terrible se emite de martes a sábado, de 0 a 2 desde los estudios de la emisora situada en Palermo, y desde que arrancó, en 1993, siempre fue un ciclo radial con público presente. Y la emisión del martes por lanoche (madrugada del miércoles) no fue la excepción: mientras estaba al aire que una persona se acercó al edificio para llevarle un disco a Dolina, pero el personal de seguridad le impidió la entrada porque "era tarde".
"No quiero contar el episodio, pero me fui del aire de un modo simbólico, faltaba poquito para el final porque no es la primera vez que sucede, pasa todo el tiempo, no dejan entrar a los oyentes y eran las dos menos diez de la madrugada, con un frío intenso y no hay ninguna directiva al respecto", expresó Dolina en diálogo con Télam: "si estás en una radio que presume de popular tenés que dar el ejemplo".
Y enseguida sostuvo que "esta violación tiene más que ver con la gente, es una violación que ocurre en gobiernos democráticos abiertos, pero uno sufre más estos atropellos si el clima general acompaña también: No es que uno sufre un sólo atropello, se sufre un atropello en cada esquina".