¿Cómo es posible que Juanita Viale haya estado presente en la cena de gala que organizó el Gobierno para Barack Obama y su comitiva? La pregunta aún sigue flotando, durante esta semana, en los pasillos de la Casa Rosada y hasta entre asesores del presidente, Mauricio Macri.
Juanita, junto a Mirtha y la primera dama, Juliana Awada.
BigBang pudo reconstruir la historia de cómo el clan Legrand estuvo presente en una emblemática cena donde el presidente de EE.UU. bailó tango con Mora Godoy y cuya foto recorrió el planeta.
La lista de invitados era competencia exclusiva de la Secretaria General de la Presidencia. Desde allí se recibían los pedidos de distintos ministerios: desde Cancillería hasta el ministerio de Cultura. Todos querían estar.
El titular del Sistema de Medios Públicos, Hernán Lombardi, fue uno de los que más nombres de la farándula aportó, fiel a sus históricos vínculos como ministro de Cultura de la Ciudad. No todos fueron aprobados, claro está.
Juanita acompañó a la conductora a la cena de gala con Obama.
La lista comenzó a acotarse, a pesar de los pedidos. La idea, que emanó de varios funcionarios, era que los invitados sostengan cierta “diversidad” y que, por ello, se eligió a personajes de distintos ámbitos, la farándula incluida. Por caso, Marcelo Tinelli o el director, Juan José Campanella, quienes no pudieron acudir.
En la primera lista que organizó el Gobierno surgió la figura de Mirtha Legrand, una confesa seguidora del PRO en 2015 y quien pudo entrevistar a Macri en diversas oportunidades. El único requisito que puso la diva de los almuerzos: ser acompañada por alguien, en particular, por su nieto, Nacho Viale, quien tiene buena sintonía con los funcionarios del macrismo. A tal punto, que sonó para colaborar con un cargo gerencial en la Tv Pública.
En un primer momento, muchos de los funcionarios que vieron a Juanita Viale pensaron que había sido la propia abuela quien la llevó a la lista de invitados. Pero no. En rigor, según pudo saber este sitio, fue el ministro de Producción, Francisco “Pancho” Cabrera, quien solicitó que la joven sea incluida.
La foto que encendió la polémica acerca de una supuesta relación entre ambos.
El pedido de Cabrera tuvo eco pero se hizo visible cuando, el fin de semana siguiente, decidió volar a Punta del Este junto a Juanita, momento que fue captado por la revista Pronto. Un vuelo polémico: fue en un avión privado.
Aunque Viale decidió desmentir un romance (dijo que era “un amigo”), en el macrismo es vox populi el vínculo entre ellos. A tal punto que comenzaron las bromas en el entorno de Casa Rosada y entre los ministros sobre el perfil que tomaría Cabrera si seguía mostrándose con la nieta de Mirtha.
Mirtha, Macri, Juliana y Antonia, durante uno de los almuerzos televisados.
Lover boy, “Pancho” Cabrera es un hombre acostumbrado al ambiente “cool” de la farándula: en los veranos esteños solía ir a las presentaciones en bares y boliches de grandes marcas. Hoy, como ministro de Producción, tiene a su cargo la lucha contra la inflación con la poderosa Secretaría de Comercio, que maneja el economista, Miguel Braun.
Durante la cena, además de la divertida anécdota de Mirtha yendo a saludar a Obama, Juanita no pasó inadvertida por su osado vestido, aunque su mesa estaba bien lejos de las de los funcionarios, en particular, la de Cabrera.