01 Julio de 2022 09:40
El 14 de agosto del 2015, tras dar a luz a Giovanna, se convirtió en el día más importante en la vida de María Fernanda Callejón (56). No es una exageración. Tenía 49 años y llevaba más de dos décadas intentando convertirse en madre.
En total, ya había perdido tres embarazos y el sueño parecía cada vez más lejano con el correr de los años. El primero, lo perdió a los 18. El segundo, en los años noventa, cuando Guillermo Coppola era su pareja. El tercero, más cercano en el tiempo, en el 2011 con su actual ex pareja: Ricky Diotto.
Sin embargo, la actriz nunca bajó los brazos y su última frustración se transformó en el motor para seguir adelante. “Mi última pérdida fue a los 46. Ahí congelé mis óvulos, agradezco haber tenido la posibilidad económica para llevarlo a cabo. Ya había perdido tres embarazos, pero recién me enteré lo que tenía”, describió.
Con el diagnóstico en mano, la pareja tomó cartas en el asunto y buscó alternativas médicas. “Desde el último embarazo que perdí me hice varios tratamientos naturales. Cuando congelé mis óvulos encontraron que tengo trombofilia adquirida, una enfermedad en la sangre que hace que no coagule bien y no permite que los embarazos continúen”, explicó. Luego siguió contando: “Hoy las esperanzas son muchas. Estoy haciendo el mejor trabajo de mi vida, que es esta lucha de ser padres”.
El tratamiento y la lucha
Sabiendo que cada pareja es un mundo y que cada mujer puede sentir diferente, la actriz nunca cayó en la generalización. Sin embargo, y sin quererlo, se transformó en una abanderada de la causa. “Tal vez algunas mujeres no están preparadas para enfrentar un pinchazo todos los días, hay miedo. La lucha por la maternidad no se pone en tela de juicio y cada uno busca la vía para cumplir el gran deseo como quiere, siempre y cuando exista la contención familiar y médica”.
Moda: Callejón también mostró su parto en las redes
Y si bien la experiencia fue dura, según relató en su momento para Infobae, todo ese dolor tuvo sustento y justificación. "Es el mensaje que le quiero transmitir a las mujeres. El primer pinchazo lo esperé, me lo dio Ricky porque me daba impresión, después aprendí a dármelo yo, lo hacía con mucha energía. Cada uno hace su camino y considero valientes a todas las mujeres que pudimos hacerlo y sobre todo a los ocho meses, con la panza llena de moretones", confesó.
Una vez que supo la noticia, que estaba embarazada de quién sería su primogénita, Giovanna, Callejón contó sobre el recorrido y la fuerza sobrenatural que la ayudó a llevarlo a cabo. “Fue un camino largo y mi mamá me iluminó. Ella siempre fue un gran referente. Cuando era chica yo decía que de grande quería 'ser mamá'. Fue el gran motor, hubo bisagras, piedras, obstáculos, estuve a punto de bajar los brazos, pero pensar en eso me hacía levantar”, dijo y concluyó con un mensaje esperanzador:
“Aliento a las mujeres: se puede. Soy la mujer más feliz del mundo y cumplí mi deseo, tengo mi milagro, nunca hay que bajar los brazos”.
De la paz a la discordia
Ya con la misión cumplida, María Fernanda Callejón y Ricky Diotto disfrutaron del esfuerzo. Se transformaron en padres, cambiaron su vida y hasta se tatuaron el nombre de su hija. "Soy feliz y estoy orgullosa de ser la mujer que soy. Sin ninguna duda esto me construyó como persona y como mamá", describió la vedette sobre la maternidad.
Hoy, Giovanna tiene 6 años (cumple 7 el 14 de agosto), y sus padres tomaron la decisión de separarse. Y aunque al principio parecía que todo sucedía en términos amigables, el rumor de una tercera en discordia embarró la cancha.
Así lo contó la periodista de espectáculos Karina Iavícoli, tras afirmar que Diotto tendría una relación paralela: “Él blanqueó la separación hace tres meses aunque María Fernanda lo había negado. Ricky mantendría una historia con una chica, cuyo nombre empieza con M”.
Con una carta desgarradora, Callejón habló de su separación: "El amor no es problema"
Y agregó: "Él tendría la relación con esta persona, que lo está esperando hace un montón, porque realmente puedo atreverme a decir que están enamorados".
¿Gajes del amor?