24 Abril de 2018 15:11
Después de que Luciana Salazar y Martín Redrado anunciaran a través de las redes sociales su separación definitiva, la bella rubia habló de todo: cómo fue el frustrado último intento de reconciliación con el economista, su papel en la vida de su hija Matilda y hasta se animó a contar un caso de abuso que sufrió cuando tenía tan solo 22 años en camarines de una producción.
Luciana está dedicada exclusivamente a su hija Matilda.
Luli le brindó una entrevista a la revista Gente, donde sobre todo habló sobre su nueva vida como mamá. Sin embargo, no dudó en revelar un triste y duro episodio en sus inicios. “No fue un intento: ¡fue un abuso! Una situación horrible. Estábamos en camarines, y alguien me tomó de los brazos, me puso contra la pared y quiso obligarme a besarlo”, explicó.
Y agregó: “Fue desesperante, no sabía cómo sacármelo de encima. Me repetía: ¡Dale!, ¿no te gusto? De los nervios me salió gritarle: ´¡Estoy de novia, estoy de novia!´”. Según detalló, en aquel momento decidió contarle a los productores sobre esta triste situación y el actor, a quien no quiso mencionar, recibió tan solo un llamado de atención por parte de las autoridades.
La tapa de Gente.
“Yo tenía 22 años. Me sentí atrapada entre la repulsión y la necesidad de seguir trabajando. Busqué la ayuda de la productora del programa, con quien tenía más confianza, y solucionó la situación. Volví a trabajar con ese señor, ya sin problemas. Y me lo crucé muchas veces más a lo largo de los años”, reveló, aunque no detalló en que producción sufrió el abuso.
Muchos en las redes sociales se animaron a afirmar que el programa donde ocurrió esta difícil situación fue Poné a Francella. Sin embargo, la propia Luli salió a desmentirlo en su cuenta de Twitter. “Jamás dije que fue en Poné a Francella, porque no es cierto. Por favor no lo sigan difundiendo, porque no es verdad. Gracias”, escribió, algo molesta, la mamá de Matilda.
Por otra parte, Salazar le explicó a la revista cómo fue la última separación con Redrado. "Nos extrañábamos. Nunca imaginamos que había tanto que olvidar. Fue apresurado, un gran error. Los dos habíamos quedado muy dolidos. Y cuando se vuelve con dolor, el rencor se filtra todo el tiempo y por cualquier cuestión mínima y cotidiana”, señaló.
En ese marco, la modelo sostuvo que se dio cuenta de que la relación con el economista ya era insostenible. “No estaba satisfecha. Como mujer necesitaba cosas que no estaba sintiendo. El intento duró dos meses. Solo hablamos por Matilda. Cada tanto me pide verla o me pregunta cómo está. Pero nuestra relación está finalizada”, cerró.