Mientras sus padres enfrentan la denuncia del inglés Mike Partridge -quien acusó a Mariana Nannis y a Claudio Paul Caniggia de deberle la suma de 500.000 euros, es decir, el alquiler de poco más de tres años- de la casa que tienen en Marbella, España-, Alexander y Charlotte Caniggia no dudan en compartir su vida llena de lujos y excentricidades.
Al mejor estilo Wanda Nara y con la extravagancia que los caracteriza, los hermanos abrieron las puertas de su exclusivo hogar, ubicado en Puerto Madero, en el reality que protagonizan, MTV Caniggia Libre. “Madero, sí. ¡El Barrio de los Millonarios!”, exclama Alex, antes de ingresar a la vivienda ubicada en el piso diez de uno de los barrios porteños más caros del país.
AL ingresar, hay que recorrer un inmenso pasillo rojo.
El living tiene un graffiti y una amplia mesa de cristal.
La casa está cubierta con cuadros de los hermanos.
Apenas ingresaron a su nuevo hogar, recorrieron un inmenso pasillo decorado con algunos cuadros y pintado de color rojo. En el mismo se encuentras las habitaciones de ambos. Por el lado de Charlotte, su pieza está decorada con cuadros y fotos de ella. Además, tiene un amplio -por no decir inmenso- vestidor cubierto de zapatos y distintas prendas.
Los cuadros de Charlotte decoran su habitación.
La habitación de la mediática.
El cuarto de Alexander.
“Me puedo relajar y olvidarme de todos los boludos, en paz y tranquilidad", aseguró la hija de Nannis. Por su parte, la habitación de Alexander es un poco más grande que la de su hermana, cuenta con un Smart TV de gran porte y distintas decoraciones que mucho no complacieron al mediático cantante. “Todo lo que está a mi alrededor es piju...”, expresó.
La cocina es amplia, moderna y cuenta con un enorme ventanal.
La pileta que tienen ambos en la terraza del edificio.
Charlotte luce contenta con su pileta.
Ostentando su vida llena de lujos, los mellizos también mostraron la cocina de gran tamaño, moderna y con grandes ventanales. Pero el lugar favorito de ambos, sin lugar a dudas, es la terraza que tiene una inmensa pileta y una parrilla. “Desde la terraza se ve todo Buenos Aires", aseguró Alexander, feliz con su nuevo y muy lujoso hogar.