¡No se termina más! Después de que Wanda Nara blanqueó su romance con L-Gante -con escapadita romántica a Río de Janeiro incluida-, Mauro Icardi hizo las valijas y partió en un vuelo privado a Buenos Aires para encontrarse con sus hijas: Francesca (9) e Isabella (8).
El delantero enfrenta una dura lesión que lo mantendrá alejado al menos por seis meses de las canchas y la gran preocupación de la conductora es que decida seguir adelante el tratamiento en la Argentina, en su afán por volver a conquistarla y hacer lo imposible por romper su relación con el trapero.
Hasta ahora, Wanda dividía sus días entre uno de los lujosos pisos que adquirió en el Chateau Libertador y la mansión de Santa Bárbara (valuada en más de dos millones de dólares), propiedad de la empresaria luego del juicio por alimentos a Maxi López, padre de sus tres hijos mayores: Valentino (15), Constantino (13) y Benedicto (12).
La parejita esquivó a fuerza del destino el primer momento incómodo. Y es que Icardi llegó a Buenos Aires el mismo día en el que Wanda y L-Gante debían regresar junto a Jamaica (3) de Brasil. La demora del vuelo logró que la empresaria evitara el reencuentro con su todavía marido y partió directo rumbo a Santa Bárbara.
"No estamos en contacto con Mauro", sostuvo la cantante antes de partir rumbo a Río. "¿Ni siquiera por las chicas?", indagó el cronista que la abordó en su camioneta. "No estamos en contacto", retrucó, dando a entender que ni siquiera dialogan para coordinar los temas de sus hijas.
Sin embargo, desde Río de Janeiro Wanda comenzó a recibir el hate de los hinchas turcos de Icardi, quienes la acusaron de abandonarlo en el peor momento de su carrera. En un intento por dejar las cosas en claro, la empresaria compartió la última comunicación que mantuvo con su todavía marido, en la que él le vuelve a declarar su amor y ella se ofrece a ayudarlo en lo que necesite con su lesión.
Si bien el viaje de Icardi a la Argentina estaba pautado previo a su lesión y al blanqueo de Wanda -dado que debía visitar a sus hijas-, desde el entorno del futbolista advierten que quien filtró la información de las posibles negociaciones secretas con River para regresar a la Argentina fue la propia Nara, quien lo único que quiere es tenerlo lo más lejos posible.
Pero eso no es todo. Icardi ya se despidió de su club turco y le espera ahora una larga recuperación que podría llevar adelante en la Argentina. ¿Qué le recomendó Wanda? Que siguiera el tratamiento en Roma, ciudad en la que, según ella, se encuentran los mejores médicos para ayudarlo con su rodilla. Cuanto más lejos, mejor para la empresaria.
Pero el entorno del futbolista también se encargó de instalar que, en realidad, su viaje al país tenía que ver con la posibilidad de que Nara estuviera esperando un hijo del trapero. "Es el único motivo por el cual podría blanquear así la relación", señalan. Sin embargo, fue la propia empresaria quien años atrás reconoció que ya no podría gestar más, debido a las complicaciones que sufrió en su último embarazo, producto de las cinco cesáreas que le practicaron.