El susto que paralizó a La Nena de Argentina: María Becerra fue operada de urgencia por un cuadro de salud grave

Las luces del escenario se apagaron, los reflectores dejaron de apuntarla y por unas horas el silencio se hizo dueño de todo. María Becerra, la estrella indiscutida del pop urbano argentino, atravesó uno de los momentos más delicados de su vida. Internada de urgencia en una clínica de Belgrano, fue intervenida quirúrgicamente por un cuadro médico que puso en riesgo su vida. La información fue revelada por el periodista Gustavo Méndez en el canal de streaming LOVE/ST, quien confirmó que la cantante ingresó con un grave diagnóstico de "abdomen agudo con shock hipovolémico". "Fue derivada directamente al quirófano", detalló. 

El episodio comenzó en la madrugada del martes, cuando la artista de 25 años fue trasladada de urgencia por presentar fuertes dolores abdominales. Al llegar a la Clínica Zabala, fue derivada inmediatamente al shock room. Allí, los médicos lograron estabilizarla tras detectar una hemorragia interna que, de no haberse tratado a tiempo, podría haber tenido consecuencias devastadoras. El diagnóstico fue contundente. Shock hipovolémico: una condición crítica que ocurre cuando el cuerpo pierde una cantidad significativa de sangre o fluidos, comprometiendo seriamente el funcionamiento de los órganos vitales. 

Sin margen de espera, el equipo médico decidió intervenirla quirúrgicamente de manera inmediata. Horas después de la operación, Becerra fue trasladada a la Unidad de Terapia Intensiva, donde permaneció intubada y conectada a ventilación mecánica. Según relató el periodista Pepe Ochoa en el programa LAM, la cantante sufrió un cuadro de anemia severa por la pérdida de sangre, motivo por el cual necesitó oxigenación asistida para atravesar la noche. . "Le agarró anemia, a partir de ahí le tuvieron que hacer una intervención quirúrgica. Estuvo toda la noche con ventilador, porque perdió tanta sangre...", informó el panelista,

Y siguió:"...Y cuando haces la transfusión, al cuerpo tenés que darle el oxígeno que perdió, así que usaron la ventilación para que ella pueda pasar la noche". Afortunadamente, la evolución fue favorable. Para las 14 horas del miércoles, los médicos decidieron extubarla tras constatar su estabilización hemodinámica. Hoy, María se encuentra consciente, despierta y bajo un estricto control clínico, rodeada de análisis de sangre, ecografías y el amor incondicional de su pareja, el músico J Rei, quien -según Méndez-  "no soltó su mano ni un solo segundo". "No abandonó ni por un segundo la mano ni la habitación de su novia", destacó Méndez.

La noticia conmocionó al mundo del espectáculo. Nadie esperaba semejante sacudón. María Becerra, que viene de protagonizar un fuerte cruce mediático con Javier Milei y de anunciar la pérdida de un embarazo ectópico en septiembre pasado, enfrenta ahora otro capítulo complejo en su vida personal. Aquel embarazo, que anunció entre lágrimas y abrazos con J Rei, fue interrumpido por un cuadro también urgente. Entonces, María abrió su corazón en redes: "Ansiábamos ser padres... Nos sobra amor y toda una vida por delante". Esta nueva internación, inevitablemente, reabre una herida que no ha terminado de cicatrizar.

Por ahora, el círculo íntimo de la cantante optó por el silencio. Ningún comunicado oficial, ningún posteo, ninguna palabra. La prioridad está puesta en su salud y en su recuperación total. "Esperé a que estuviera fuera de peligro para contarlo", explicó Gustavo Méndez, que también se reservó parte de la información "por respeto" a la artista. En paralelo, las redes sociales estallaron de preocupación. Los hashtags #FuerzaMaría y #LaNenaDeArgentina se volvieron tendencia apenas trascendió la noticia. Sus fans, incondicionales, le dedican oraciones, mensajes de aliento y promesas de apoyo inquebrantable.

A veces, ni la fama ni los millones de reproducciones pueden protegernos del dolor. Hoy, María Becerra no está sobre un escenario ni firmando autógrafos. Hoy está luchando, en bata blanca y rodeada de médicos, con la fuerza que siempre mostró arriba de las tablas, pero esta vez para sí misma. Porque hasta las estrellas, incluso las más brillantes, necesitan parar y sanar.