14 Enero de 2019 12:15
En cuestión de minutos u horas, Black Mirror: Bandersnatch se convirtió en la gran sensación del momento. Y es que la película de Netflix es la primera en ser interactiva, cambiando el concepto de cine tal y como los conocemos.
Desde su creación, tanto la televisión como la pantalla grande presentaron un entretenimiento unilateral, sin ningún tipo de participación de parte del espectador.
Black Mirror: Bandersnatch, la primera película interactiva.
Sin embargo, el estreno de Black Mirror rompió con esa suerte de sistema de retroalimentación, sin ningún tipo de retorno, más que el placer de haber disfrutado de una satisfactoria historia.
Pero este nuevo film agregó, o más bien, introdujo la expansión del uso de la narrativa con historias interactivas, donde el espectador es el dueño de la historia - en este caso casi siempre trágica- que se cuenta.
El espectador es el dueño de la historia.
En simples palabras, a medida que avanza la película de Netflix, el espectador deberá elegir distintas opciones que afectarán el argumento, la trama y el desenlace de la misma. Es decir, deberá convertirse en el personaje, interpretarlo y tomar decisiones por él.
Esto, que fue implementado por cientos de juegos desde hace varios años -como por ejemplo la serie de juegos desarrollados por Telltale Games, como el Batman-, impresionó a los usuarios, los cuales no dudaron en elogiar el film y convertirlo en todo un fenómeno viral.
Los libros “Elige tu propia aventura".
Pero lo cierto es que cuando el éxito es muy grande, existen ciertas personas o empresas -con razón o no- que buscan conseguir su propia porción del pastel. En este caso, la editorial de los libros “Elige tu propia aventura" denunció a Netflix por un presunto delito de “infracción de una marca registrada” por su película interactiva, Black Mirror: Bandersnatch.
El film de Netflix tiene muchos finales, en su mayoría trágicos.
Según informó el medio Variety, la demanda, presentada en un juzgado de Vermont (Estados Unidos), asegura que la compañía de streaming se aprovechó y se "benefició" al asociar esta película a los famosos libros infantiles de esta editorial.
En los mismos, el lector puede escoger qué rumbo toma en la historia. "Está causando confusión y manchando, denigrando y debilitando la distintiva calidad de la marca Elige tu propia aventura", señalaron desde la editorial Chooseco, responsable de esa colección de libros.
La editorial le reclama a Netflix 25 millones de dólares.
La denuncia sostiene que uno de los protagonistas de la cinta se refiere explícitamente a una novela que está leyendo como un libro de Elige tu propia aventura, sin que exista ningún tipo de acuerdo entre la editorial y Netflix. Además, remarcaron que los "temas oscuros y violentos" de Bandersnatch no tienen nada que ver con los de sus libros, y que esto los perjudica.
Desde Chooseco, que reclama 25 millones de dólares como compensación, aseguran que en 2016 Netflix comenzó a negociar con ellos para conseguir la licencia de los libros, pero -siempre según la editorial Chooseco, las negociaciones no llegaron a buen puerto.
Black Mirror: Bandersnatch tiene varios finales, todos con diferentes resultados para el protagonista. Y ninguno es particularmente agradable o feliz para el personaje principal.
De todos modos, la posibilidad de elegir como seguir la historia de un relato no es nueva. Ya en 1963 Julio Cortázar propuso en su hermosa novela Rayuela, seguir la trama de diversas formas. Ya sea en la forma tradicional, de principio a fin, o con otros órdenes diversos propuestos por el autor.