El famoso plato frío en el cual se disfrutan las venganzas parece haber llegado a la mesa del periodista y conductor Diego Brancatelli, quien se cobró las chicanas que durante décadas le hizo su colega Jonatan Viale, luego de que este quedar expuesto en la entrevista pactada que le realizó al presidente Javier Milei, tras la mega estafa cripto que estalló el último viernes y que derivó en la mayor crisis política del oficialismo desde que asumió el 10 de diciembre de 2023.
Es que, el evento que lo expuso probablemente como uno de los operadores periodísticos más comprometidos del proyecto libertario, fue durísimo para la carrera de Viale. Al punto de que muchas de sus reivindicaciones para que no lo coloquen en el lado de los "operadores", sino en el mundo del pensamiento crítico y el periodismo sagaz, parecen haber quedado vacantes, de acuerdo a la experiencia que relató Juan Luis Gonzáles, quien pertenece a la Revista Noticias y quien escribió "El Loco", la primera biografía del actual mandatario.
El autor e investigador recordó en un tuit la discusión telefónica que que tuvo con el conductor de TN, tras la tapa de noviembre de 2024 de la histórica publicación de editorial Perfil. "El nuevo periodismo militante", decía el título que estaba graficado por fotos de Viale, Alejandro Fantino, Luis Majul, Esteban Trebucq y Pablo Rossi. Todo fue, lógicamente, a partir de la filtración del crudo que expuso cómo Santiago Caputo interrumpía la nota del lunes.
"Ustedes van a pensar que es joda, pero en serio no saben como se puso Jonatan Viale cuando le avise que se venía esta tapa", escribió González en su cuenta de X (ex Twitter). "Dos horas tuvimos debatiendo. El tipo, enojado, decía que no era 'periodista militante'. País generoso", cerró el autor. El evidente contraste entre quien reclama pertenecer al sector "objetivo" y lo que vino después, es lo más contundente, ya que es muy probable que ya no esté tan enojado de figurar en esa primera plana.
En diálogo con BigBang, Brancatelli amplió sus críticas hacia Viale. "Yo nunca fui marioneta del poder. Nunca me dijeron que tenía que decir", se desmarcó. "Lo que hizo ayer fue todo de lo que siempre renegó. Fue un operador berreta, funcional a la necesidad del Presidente", soltó después, justo antes de identificarlo como "militante", aunque reconoció que no le queda claro "bien de qué".
En su momento me decían 'nadie es K gratis' y nunca cobré un peso. No entendían que uno lo hacía porque así lo sentía. Te atacaban por no entenderlo. El colorado era uno de los principales. Fue un adelantado. Nadie defiende a Milei gratis. Pensar que siempre hablo desde un pedestal de la moral y el periodismo independiente. Se le cayó la careta", cuestionó el conductor de C5N.
La discusión sobre el periodismo militante atravesó los años kirchneristas con cruces entre colegas que juzgaban la mentalidad crítica de sus contrarios de acuerdo a la posición que tenían con el gobierno de aquel entonces. Lo cierto es que el término se instaló contra el sector peronista, aunque los años de gestiones de otros colores demostraron que es un mote que le cae a cualquiera que hace cosas como las que protagonizó Viale el último lunes. Un golpe que para muchos, podría significar el fin de una carrera.