A pesar del bajo rating y que los números de audiencia cada día caen más debido al comienzo de Gran Hermano, el Bailando 2023 sigue a paso firme en la pantalla de América TV sin importar todas las tormentas que se le avecinan: los participantes se dan de baja, se quejan del vestuario, de los presupuestos y como si fuera poco, Marcelo Tinelli busca reinventarse día tras día para captar la atención del público, aunque no lo consigue.
Lo último que llamó la atención fue el reciente ritmo que debieron bailar los participantes: el "reggaetón hot", el cual se desvirtuó en distintas ocasiones por las pretensiones que tenía tanto el jurado como la producción. Poca ropa, bailes sensuales y la exposición constante de las mujeres como objeto de consumo.
Fue por eso mismo que muchas de las parejas de baile quedaron sentenciadas para ser eliminadas de la competencia, porque, según el jurado, ninguno cumplió con el requisito de ser sensual y principalmente de mantener los cuerpos semi desnudos como lo pretendían de esta ronda.
Había sido una noche tensa, larga y tendida, en la cual nueve parejas habían quedado en la cuerda floja y corrían el riesgo de ser eliminadas del programa por decisión del público. Sin embargo, se optó por una nueva opción, que es que los cuatro jurados tienen el derecho de salvar duplas para que no terminen en la instancia del teléfono.
¿Quién salvó a quién? Por peor puntaje y por decisión de sus compañeros hundidos en una votación, Martín Salve y Nenu López fueron sentenciados pero salvados por Pampita, como así también lo fueron Juli Castro y Rodrigo Avellaneda. Por su parte, Moria Casán dejó que continúen en el certamen Brian Sarmiento y Soledad Bayona y de igual manera, les tendió una mano a Maxi De La Cruz y Camila Lonigro.
Mientras que Ángel De Brito optó por dejar en competencia a Charlotte Caniggia junto a Jesús Vincent y por su parte, Marcelo Polino les dio una oportunidad más a Milett Figueroa y Gabriel Rentería. Por consiguiente, quedaron en el teléfono las parejas de Kennys Palacios, Lola Latorre y Anabal Sánchez, por lo que el público a través de mensajes pagos ($300 el voto) debió elegir quién quería que se quede. Sólo uno de ellos pudo pasar a la siguiente ronda.
A pesar de que los tres protagonistas se encontraban en la búsqueda de recopilar votos desde donde sea para poder seguir formando parte del Big Show, hubo una pareja en particular que sentía que corría por detrás: Anabel Sánchez, ya que considera que al lado de los "famosos" que integran el ciclo tiene poca popularidad.
En esta edición se optó por poner parejas que nada tuvieran que ver con la farándula y así fue como quedaron la joven de 18 años y Nélida Camjalli, de 82, que fue la segunda eliminada del certamen.
No obstante, lo último que se pierde es la esperanza y Anabel no le tuvo miedo a la votación. Incluso, su familia y la de su bailarín, Ernesto Díaz, influyeron y buscaron por sus lados poder ayudarlos a través de la difusión y pedidos a sus seguidores. Fue en ese contexto que el hermano de Díaz posteó en su cuenta oficial de Instagram una imagen de Anabel con su bailarín, pidiéndole por favor a sus seguidores que los ayuden dándole un o unos votos para que se queden en el certamen, pero no le hizo la mejor propaganda al programa en sí. "El programa es una bosta pero les está cumpliendo el sueño, escribió". Además, aclaró que el voto tiene un costo de 300 pesos.
"El programa es una bosta pero les está cumpliendo su sueño a los dos, él es mi hermano más chico y necesita de tu voto, si entras a su perfil o al de su compañera Anabel Sánchez, entras a sus historias y hay un link, te cobran 300p, para ellos es un montón!!", posteó. De todas maneras, con 66,7% de los votos, Anabel Sánchez y Tito Díaz se metieron entre los 18 mejores del certamen y eliminaron a Lola Latorre y a Kenny Palacios.