23 Septiembre de 2016 09:31
Sin picos de rating pero con la fórmula para capturar seguidores lejos de la pantalla chica. Combate Evolución es un programa ejemplo de que el éxito no solo es el rating. Rompe el molde televisivo y demuestra las carencias que produce la medición de audiencia que excluye los diversos formatos para ver tevé lejos del televisor.
El fenómeno del programa se mide de otra manera: cada integrante tiene miles de seguidores en sus redes sociales y los videos de los programas tiene millones de reproducciones.
Es que la mayoría de los fans siguen el programa por Youtube y en diferentes plataformas que no se miden.
Al respecto, Marcos Gorban, productor general de Combate Evolución, asume que llegan a superar 4 puntos de rating pero que nada le resta su triunfo ante la conquista de seguidores.
“No se están midiendo otras plataformas o redes sociales. Tinelli hace 5 años marcaba 30 y hoy marca 20. ¿Hay alguien en la Argentina que pueda decir que Tinelli es menos visto? Es igualmente visto, pero con otros dispositivos”, dice en una entrevista reciente para Televisión.com.ar.
Los números de Combate son el resultado de distintas variables. En promedio cada participante supera los 50 mil seguidores en sus Instagram o en Twitter y el programa casi alcanza al millón. En Youtube cada capítulo suma más de 300 mil reproducciones y se pueden encontrar varias recopilaciones realizadas por los clubles de fans.
En diálogo con BigBang una de las estrellas del programa, Micaela Viciconte, cuenta que le sorprende "cómo creció el programa en poco tiempo”.
“Es increíble como crecimos y más cuando hay tanto para ver. Hace un año atrás no nos reconocían y ahora nos paran en la calle y nos saludan. Nos piden fotos, autógrafos, la gente nos quiere mucho. La cantidad de seguidores se nota. Me felicitan y ahí me doy cuenta del éxito”, cuenta.
"La cantidad de seguidores se nota
Micaela Viciconte agradece el amor del público.
El programa es conducido por Thiago Batistuta, Joaquín "Pollo" Álvarez y Laurita Fernández. Originariamente, en sus primeras cinco generaciones, el programa estuvo conducido por Batistuta y Guillermo "Fierita" Catalano y el programa se llamaba solo Combate.
La mística fue y es la misma: juegos de esfuerzo físico, desafíos y reality show. Todos funcionan como clave del éxito. “Creo que no hay ningún programa de este tipo. Más allá que es un reality, hay enojos, hay juegos extremos, cada equipo se pone a flor de piel, y el público se siente parte.
Es un River-Boca, se ponen en la piel del juego y cada jugador pone todo. Las estadísticas demuestran que los fans son más y más. Y es porque es un programa transparente”, afirma Viciconte, quien junto a a Florencia Vigna, son las capitanas de los equipos rojo y verde. Ambas coinciden en que es sacrificado el entrenamiento y que entregan toda su garra en cada desafío.
"Las estadísticas demuestran que los fans son más y más
Florencia Vigna es elogiada por la platea masculina.
“Desde la tercera temporada sentí que el público estaba con nosotros. Porque por horarios en el verano nos veían más.
Me sorprende ser reconocida por la gente y como artista tener es algo hermoso el amor de la gente”, suma
Vigna
, la otra capitana de equipo.
Vigna llegó al Bailando gracias al apoyo de los seguidores.
Por su parte, Viciconte cuenta que ser "un grupo jóvenes que se divierten" los favorece.
“Somos un programa de jóvenes, alegres y no hay competencia. En otra época había otros programas, como los que producía Cris Morena y ahora no. Eso genera que el público se una a cada equipo. El televidente se hace parte del equipo y la gente colabora con votos en las competencias, o en los duelos de baile o con los nominados”, detalla.
Para las jugadoras, otra clave para seducir al espectador es la empatía que cada uno genera con su historia de vida. “Todos los que hacemos combate somos distintos y únicos. Cada espectador se puede identificar con cada perfil”, dice Flor Vigna.
Las diosas del programa, con miles de seguidores en las redes.
Y agrega. “Yo soy bohemia que siempre quiso actuar y bailar y a la vez hay quienes son mamás o atletas o los que trabajan como modelos, pero todos competimos y somos parte de combate”.
Por su lado, Viciconte asume que “el público ve el esfuerzo y elige a su ídolo”.
“El año pasado, me apoyaron en cada nominación y eso me daba mucha alegría. Hoy, lo que más me gusta del programa es ser parte, ante todo. Ser capitana me da felicidad. Me esforcé y los dos años que me comí de pelea y de garra tuvieron su merecido, que es ser capitana. Lo disfruto mucho”, resume.
"Es sacrificado pero vale la pena y todos nos esmeramos para cuidarnos, no lesionarnos y llegar con energía para dar todo", concluye.
Micaela realiza campañas de moda luego de ganar popularidad con el programa.
La belleza de los jóvenes es una clave del programa. Incluso, fueron parte de un desfile hot.
EL JUEGO Y SUS CAMBIOS
Durante las primeras seis generaciones el formato fue el mismo. De lunes a jueves los equipos se enfrentan en una serie de desafíos y el equipo con menor cantidad de puntos será el perdedor.
Momento de tensión: la espera de los votos del público.
Entre los que sean derrotados se realizaba una nominación, siempre quedando exentos sus capitanes. Además uno participante recibía la inmunidad por parte del equipo ganador. El viernes se enfrentaban en distintos desafíos los nominados y mediante la votación del público uno de ellos deja el juego.
A partir de que mutó a Combate Evolución el formato sufrió algunos cambios. A lo largo de la generación se mantendrá el mismo número de participantes, siete en cada equipo. Ambos equipos se enfrentarán de manera mensual.
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El equipo con mayor puntaje al final del mes será el ganador del mismo, mientras que el perdedor deberá nominar a dos participantes. Mediante el voto del público se elige al que será eliminado y reemplazado por otro jugador, para mantener la paridad con el equipo contrario.
EQUIPOS Y FAMOSOS
La primera generación se formaron dos equipos de diez participantes y un capitán “famoso”. Leandro Penna y Eugenia Lemos lideraban cada grupo. Los entrenadores de cada equipo fueron Tito Speranza y la boxeadora Carolina Duer. Como coreógrafa participaba Laura Fernández.
Desde ese entonces, Micaela Viciconte ya era parte del programa y formó parte del equipo ganador, junto a Nicolás “Congo” Hitchings, Maximiliano Ottaviani y Dalila Marinelli. Como revancha, en la segunda generación participaron los mismo jugadores y en también ganó el equipo de “Congo”.
Para la tercera generación los capitanes cambiaron. Se sumó Lucas Velasco y Cinthia Fernández para el equipo verde. Como entrenador se sumó Cristian “U” (Urrizaga), uno de los ganadores de Gran Hermano, y Delfina Geréz Bosco.
Cinthia Fernández y Cristian U fueron parte del éxito.
Allí apareció Florencia Vigna, quién conquistó a los seguidores del programa y rápidamente le crearon un club de fans. También se sumaron como jugadores, hoy ya reconocidos, Sergio Celli y Franger Pardo.
En la cuarta temporada, con los mismos participantes, los capitanes pasan a ser Ezequiel Cwircaluk y Laura Fernández, y en la quinta Cwircaluk le deja el lugar a Federico Molinari. La competencia cada vez era más fuerte. Los juegos aumentaban de dificultad y los fanáticos enardecían desde sus casas. Además de sumarle puntos de rating insólitos para lo que registra el canal, las redes estallaban de comentarios y publicaciones.
Evangelina Carrozo se sumó una temporada al programa.
En la sexta generación Molinari armó su equipo para enfrentarse con Evangelina Carrozo. También se sumó Virginia Gallardo junto a Cristian “U”. Y para la temporada actual, los equipos juegan con 6 participantes.
