Hace 13 años, Gastón Pauls se miró al espejo y descubrió que su vida no tenía futuro sino comenzaba a combatir con la adicción a las drogas que lo tenía a mal traer. Si bien suele mantener un perfil bajo, el actor y ahora flamante conductor de "Seres libres", que se emite todos los domingos a las 22 por Crónica TV, sostiene que hablar de este tema lo "tranquiliza" y forma parte de su recuperación.
Desde hace ya 13 años, Pauls comenzó con la batalla más difícil, y por qué no más prolongada, de su vida: decirle "no" a las adicciones. "Comencé con mi recuperación hace ya 13 años, después de varias noches sin dormir. Fue cuando me di cuenta que lo único que seguía era la muerte. No hay vida en el consumo. Tampoco no hay aplausos, amigos o amor en el consumo", reflexiona en dialogo con BigBang.
Según contó, fue en aquella "soledad" que le generó su adicción que se dio cuenta que no quería seguir así: "Ahí me di cuenta que hasta ahí había llegado esa muerte. Quería empezar a disfrutar la vida". Hace más de una década, Pauls inició la recuperación de su adicción a la cocaína y en ese camino retomó la actuación en filmes como "20.000 besos", la serie "Todos contra Juan" y películas como "Luis Palau, la película", "El Rezador" y "El príncipe".
Pero a su extraordinaria carrera actoral, filmó más de 70 películas en todos estos años, le sumó su faceta de conductor y entrevistador. A pesar de que tuvo varias algunas trabas para concretar su idea de programa, su ciclo, ideado y conducido por él, finalmente pudo concretarse por la pantalla de Crónica. "Yo quería mostrar un poco de luz. Apareció Crónica y me dio la posibilidad de hacer este programa", contó.
Se ciclo se llama Seres libres y allí, los entrevistados pueden abrirse y compartir el proceso de sanación del que son parte después de haber batallado durante años contra sus adicciones. "El programa es el resultado de un montón de años. Primero de consumo, sufrimiento y muerte. Pero cuando empiezo mi recuperación, que fue hace más de 13 años, empecé a dar charlas en el país para compartir mi experiencia", explicó.
Y continuó: "Comencé a escuchar las historias de la gente. Por ejemplo, en 2009 di 40 charlas en un año y ahí me di cuenta que me paré ante 100 mil personas. Pensé que estaría bueno tener un programa, donde poder contar experiencias e intentar ayudar desde mi lugar. Como la situación es realmente angustiante, desesperante, sentí que era un buen momento para ver si a algún canal le interesaba este trabajo".
El actor sostiene que el nivel de consumo está absolutamente "desmadrado y fuera de control", razón por la cual no tenía tiempo que perder. Sin embargo, le explicó a este portal que le costó hallar un canal que confiara en su visión: "A distintos canales les parecía que era meterse en la oscuridad y yo quería hablar de todo lo contrario. Yo quería mostrar un poco de luz. Y ahí apareció Crónica".
El programa habla en primera persona sobre las adicciones; tiene dos bloques con entrevistas a personas conocidas del medio artístico o político también hablando de sus experiencias con el consumo y la recuperación. Luego tiene entrevistas en la calle con personas desde su lugar, desde su experiencia en el consumo y la recuperación. Esto es tanto en Ciudad Oculta y la Villa 31 como en Recoleta y Barrio Norte.
Con este ciclo, Pauls busca eliminar aquella primicia que afirma que el adicto debe tener vergüenza al qué dirán si cuenta por lo que está pasando. "Es uno de los grande a problemas que tienen los adictos. El qué van a decir o cómo me van a señalar si confieso. El ´me van a juzgar´ provoca que la persona se encierre cada vez más. De alguna manera el programa lo que intenta hacer es tratar de dejar de señalar a todos", sostiene.
Pero con "adicción", Pauls no solo se refiere a las drogas o al alcohol: "Todos tenemos algún consumo. Algunos consumen pastillas para dormir, otros comida, tecnología u operaciones estéticas. El consumo, ya sea televisivo o capitalista, también puede llegar a ser una adicción. La adicción puede ser representada en alcohol, drogas, pastillas, sexo, juego, consumo de pornografía de Internet y también de comida".
El ciclo ya contó con la participación de Fabiana Cantilo, Andrea Rincón y Rodrigo Tapari, entre otros artistas. Sin embargo, Pauls destaco la confianza y buena voluntad de todos ellos para referirse a este delicado tema. "Hasta acá no solo accedieron, sino que confiaron. Es un tema difícil de hablar y ese es el regalo, que todos confiaron en mi. En el programa no hay golpes bajos, eso ya pasó y todos los que yo hablo están en recuperación", confió.
Y sumó: "En ningún momento me negaron la charla. De hecho, muchos de ellos, sin dar nombres, me llamaron para participar del programa. Cada uno de los entrevistados abrió su corazón. Me impactaron todos, desde el que es conocido al que no lo es. Cuando le preguntamos que era la droga, todos ellos coincidieron en calificarla como ´el infierno´. Lo siento como una charla que comparten sus experiencias".
En su lucha que ya lleva 13 años, el actor explicó que de la adicción no se sale, sino que se "evita" entrar a diario. "Es como estar encerrado en una cárcel, cuando salís hay algo que no hay que hacer: volver. Es los grupos anónimos, de los cuales participo y participe, dicen que lo más importante es decir que ´no´ a la primera. Porque si arrancas es complicado parar. El adicto no tiene límite, no puede frenar", explicó.
Por último, el actor se tomó unos segundos para hablar de la pandemia que nos afectó a todos a nivel mundial y la comparó con "una montaña rusa", nombre de su primer proyecto hace 27 años. "Está pandemia es una montaña rusa. Hubo momentos para pensar en nuestras vidas, porque hubo semanas sin poder salir. Pero ese tiempo se alargó y se alarga en el mundo", resaltó.
Y agregó: "El mundo como lo conocíamos está quedando atrás, que por algunas cosas no es malo porque el mundo que teníamos era un desastre. El mundo no estaba impecable, estaba complicado desde hace años. Esta pandemia la veo con incertidumbre y dolor, porque hay gente que vivía del día a día, que generaba durante el día la plata para comer a la noche, que ya no lo puede hacer más. Y no se cómo hace esta gente".
Por está razón y si bien entiende el reclamo de los actores de volver al ruedo, Pauls aclara que la misma situación se vive en otros gremios y no solo en el actoral. "Estamos en una situación compleja, yo fui tirando dando charlas y clases", dijo. Y finalmente, el actor habló de sus adicciones: "Comencé a los 15 años tomando alcohol, que para mí es una droga legal, de venta libre y con un enorme poder económico detrás".
Y concluyó: "Después pasé a la marihuana. A la cocaína la probé por primera vez a los 17 y la última vez que la consumí fue a los 36 (hoy tiene 49) . Y no es fácil. Para mí es ahora, cada paso, momento a momento. Yo trato de alejarme de lo malo, pero no lo borro. La creatividad y el aprendizaje son las mejores herramientas contra la desigualdad y la exclusión. Es una enfermedad sin cura, hay que convivir con ello".