04 Agosto de 2015 08:17

Hay un sólo clásico en la vida de Marcelo Longobardi: su viaje anual a Escocia junto a sus tres hijos mayores. El periodista se reconoce como un fanático del golf y participa en julio de un torneo en el exclusivo club Royal Dornoch, ubicado en el nórdico condado de Sutherland.
Las instalaciones del exclusivo club ubicado al Norte de la isla.
Todos los años, Ignacio, Gastón y Franco acompañan a su padre en una escapada que no incluye a las hijas mujeres del periodista, Clara, Delfina y Josefina. “Mis tres varones son muy buenos golfistas y jugamos juntos. Viajamos los cuatro solos todos los años a un torneo en Escocia. Es un viaje de hombres que hacemos desde hace mucho tiempo”, confesó tiempo atrás en una entrevista al diario Clarín. “Es el momento más feliz de mi vida, un viaje místico. Hay gente que va a La Meca, al Vaticano, al Muro de los Lamentos. Nosotros vamos a Escocia”, sumó.
El club cuenta con premiados chef que elaboran costosos platillos.
Las reglas del club son rigurosísimas. En principio, se prohibe el uso de camisetas de fútbol (o rugby) y gorras o sombreros. Además, las autoridades de la histórica entidad advierten desde su página Web que esperan que todos sus visitantes cumplan con un “educado comportamiento en cada una de las instalaciones”.
Las canchas tienen una vista privilegiada del Mar del Norte.
Durante su estadía, el conductor de Radio Mitre se hospeda en la ciudad de San Andrés. “Aquí se conocieron el Príncipe William y su mujer, Kate Middleton”, destacó, y agregó, “Es una ciudad hermosa, histórica. Acá está la cancha de golf más famosa del mundo que opera como una plaza céntrica. Es tal el respeto de la gente de acá, que no hay rejas, ni policías. Nunca hubo un acto de vandalismo”.