03 Octubre de 2017 10:43
Cuando se despidió de Edgardo Antoñana el último domingo, Dominique Metzger nunca imaginó que esa sería la última vez que vería a su compañero de todos los fin de semana en TN. Ambos se habían convertido en una pareja televisiva ideal, con ideas opuestas y atractivas para el público. Ella, con un tono visiblemente más sereno, le permitía a él desplegar toda su furia al aire.
Dominique y Edgardo en el estudio de TN.
A pesar de la imagen que pudiesen dar frente a cámara, los periodistas tenían una muy buena relación fuera de los estudios. "Es un momento de mierda. El domingo estuvimos charlando cuando terminamos el programa, me quedé esperándolo porque él viajaba a la costa, y viste como somos nosotros que tenemos una relación de amistad más allá del trabajo, de ida y vuelta, con mucho cariño. De su familia me avisó la mujer, y yo a partir de ahí avisé al canal porque no tenían conocimiento y no sabían", le dijo a La Nación.
La pareja mientras analizaba el rendimiento de la Selección.
Su cariño por Antoñana era tal que la conductora lo recordó con muchísimo cariño. "Un tipazo, muy íntegro, noble, con un conocimiento poca veces visto con respecto a otros compañeros con los que me haya tocado trabajar", aseguró. Y agregó: "Era un tipo gruñón pero solidario, buen amigo, mantenía un aprendizaje constante, no era que él dijera "me la sé y no me queda nada más", siempre había algo más para aprender, para escribir y para sacarle el jugo".