El magnate Harvey Weinstein, condenado a 23 años de prisión por abuso sexual, solicitó a la corte federal de Nueva York que ponga pausa a una demanda civil en su contra.
La demanda fue iniciada por Alexandra Canosa, una ex empleada de su compañía de producción cinematográfica, quien declaró que el empresario la violó y acosó, además de someterla a amenazas constantes de arruinar su carrera.
El jueves, el abogado de Weinstein, Imran Ansari, declaró a la Corte que es prácticamente imposible que el productor pueda comparecer a causa de su mal estado de salud y que el procedimiento debería ser pausado.
Según el letrado, la salud del acusado "ha declinado dramáticamente esta semana, tal como ha reflejado la prensa", hecho que "impide su derecho fundamental a participar en su propia defensa".
De acuerdo a Ansari, estos problemas de salud incluyen diabetes, enfermedad coronaria, presión arterial alta, apnea, dolores crónicos en las piernas, artritis, anemia, estenosis espinal y varios más. El abogado además advirtió que esto lo pone en riesgo de contraer coronavirus.
El abogado además subrayó que Weinstein "niega vehementemente" las acusaciones de Canosa y señaló que "la evidencia apunta a que existió una relación sexual totalmente consensuada".
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"A pesar de estar acusado de violación y de residir en un establecimiento penitenciario, Weinstein continúa intentando impedir el acceso a la justicia a las sobrevivientes de sus actos malvados. Esto no es ninguna sorpresa, ya que nunca quiso ser interrogado sobre sus abusos repetidos", contraatacó Thomas Giuffra, abogado de Canosa.
Además de esta demanda, el magnate enfrenta 11 cargos penales en la ciudad de Los Angeles incluyendo agresión sexual y violación. De todas formas, su extradición a California ha sido postergada a causa de la pandemia.