21 Diciembre de 2020 16:42
El sábado se vivió un momento histórico por la pantalla de canal Trece, no solo por el regreso de Mirtha Legrand en medio de la pandemia de coronavirus a su histórico programa, sino porque los televidentes pudieron presenciar las cuatro generaciones de mujeres en la familia de la diva de los almuerzos.
Y es que además de Mirtha y Juana Viale, su nieta y quien la reemplazó durante este tiempo en la conducción de su programa, también estuvieron presentes Marcela Tinayre, hija de La Chiqui y madre de Juana, y Ámbar De Benedictis, la hija de 18 años de la actriz.
Todo comenzó luego de que Juanita propusiera un brindis, tras el emotivo homenaje que le dedicó a su abuela. "Que aparezca la vacuna. La gente está muy asustada, muy temerosa. Se muere mucha gente. Y que nos unamos los argentinos, que seamos hermanos de verdad. ¡Que me quieran! Que no me abandonen. Y pido salud y la unión de nuestra familia y de las familias argentinas", pidió Mirtha.
Pero cuando Juanita tomó la posta y estaba ensayando su brindis, su madre la interrumpió y le pidió a su nieta que ingresara al estudio: "Quiero hacer un brindis extra por la cuarta generación" y con un gran énfasis, gritó: "¡Que entre la cuarta generación de mujeres de esta familia!". Tras su pedido, Ámbar (la hija mayor de Juanita) ingresó con un ramo de flores gigantesco para su mamá.
Sin poder hablar y muy conmovida, la actriz se emocionó hasta las lágrimas, razón por la cual Mirtha tomó la posta y se hizo cargo del cierre del programa, despidiéndose el público hasta el año que viene. Si bien la aparición de su hija la sorprendió, los allegados de Juanita sostienen que la aparición de la mayor de sus hijos no fue de su agrado debido al estricto y la baja exposición mediática que quiere para ellos.
A pesar de la gran exposición pública que tuvo siempre, Juana Viale es muy reservada con su vida privad y sobre todo trata que sus tres hijos: Ambar, Silvestre, de 12, y Alí, de 8, se mantengan alejados del plano mediático. De hecho, en mayo la actriz contó que los educa para que crezcan con una mentalidad abierta. "Cuando fui mamá por primera vez era muy joven, tenía 20 años, y mi hermano Rocco era muy chiquito", había ocntado.
Y siguió: "Obviamente heredé toda la ropa de él, que era en su mayoría celeste. Yo a mi hija la vestí de celeste desde el día uno, además nunca le puse aritos, y no le cortaba el pelo. Cuando salíamos me decían: '¡Ay! Que lindo nene', y yo les respondía que no era nene sino nena. 'Pero está vestida de celeste', me contestaban. A mis hijos no les corté el pelo como hasta los cinco años, porque me encantaban esas plumas que les crecen".
Por ejemplo, contó que a Alí llegó a preguntarle si quería que le hiciera un rodete. "'No. Soy nene, no nena', me contestaba. Tenía el pelo largo pero siempre fue súper varonil. Una vez estaba con mis hijos en un ascensor y había una pareja mayor. Cuando estábamos por bajar, Silvestre se adelantó y salió antes que ellos, por lo que me acerqué y le expliqué que cuando hay personas mayores tiene que dejarlas pasar primero", había revelado.
Ambar estuvo atenta en aquella oportunidad a los dichos de su mamá y cuando su hermanito le preguntó a Juana por qué tenía que cederle el paso a los mayores, ella le respondió: "'Porque es un acto de caballerosidad'. Ahí mi hija me miró y me cuestionó por qué agregué la palabra 'caballerosidad'. 'Bueno, es un gesto nada más', les dije", detalló sobre la crianza libre de estereotipos de género que aplicó con sus hijos.
Con respecto al día a día de los chicos, la actriz había explicado que su hogar funcionaba de acuerdo a una serie de estrictas normas: una rutina para cumplir horarios y una fuerte restricción de pantallas. "Para mí el gran tema es la tecnología. En mi casa no tengo cable, el televisor está solamente para mirar películas. No hay PlayStation ni nada de eso. Que te den puntos por matar a alguien me parece un horror. Olvidate, conmigo no", explicó.
La alimentación de los chicos también es especial. Meses atrás, después de contar que su hija mayor es vegana, expresó que no todos son vegetarianos en su hogar. “En mi casa no comemos carne dos, pero Alí, el más chiquito mío, puede no comerla. En cambio, Silvestre, mi otro hijo, me pide carne. Yo me volví vegetariana hace siete u ocho años. No tomo leche, como huevos libres de jaulas. Yogures, no”, detalló.
Y agrego: “Mis hijos no comen postrecitos. La crema, el yogur...Esa góndola de supermercado me parece muy abusiva". Al mismo tiempo, detalló que Ambar es la que más libertades tiene debido a que es la mayor de los tres hermanos. "Los más chiquitos a las 20.30 ya se van a dormir", sostuvo.
Ante las versiones que aseguran que a Juana le habría molestado la presencia de la adolescente, ya que cuida mucho la privacidad de sus hijos, Marcela Tinayre respondió: "A Juana no le gustan las sorpresas y esto fue muy emocionante. La sorpresa la desencajó".