por Alejo Paredes
27 Junio de 2021 08:00Emoción, alegría, tristeza, preocupación y optimismo. Por todos estos sentimientos pasó Julia Zenko en una conversación íntima que tuvo con BigBang. La cantante y actriz de 62 años, oriunda de la paternal, de reconocida gran trayectoria y dueña de distintos géneros musicales, se prepara para volver a los escenarios en medio de un año sumamente especial para ella, marcado por la pandemia del coronavirus.
La cita será el viernes 9 y el sábado 10 de julio, a las 13.30 horas, en la Terraza del Picadero. El show en el día de la Independencia tendrá la particularidad que será también transmitido vía streaming: Julia cantará varios éxitos de Vuelvo a ser luz, el disco que grabó en 2019, y también hará un recorrido de su amplio repertorio recordando sus canciones más conocidas que los más fanáticos desean volver a oír.
Durante este último año y medio, la artista no solo se vio afectada (como todos) por la aparición del coronavirus, sino que también tuvo que someterse a una operación -con todo lo que eso significa- durante la pandemia (N. de la R: En 2015, le detectaron cáncer de mama. Este año, volvió a repetirse el diagnóstico). En este contexto, aclara, solo recibió la primera dosis de la vacuna AstraZeneca.
A pesar de su condición de paciente de riesgo, la cantante solo pudo recibir una sola dosis de la vacuna contra el COVID-19, lo que le genera cierto temor en medio de la crecida de contagios. "Tengo la primera dosis de la AstraZeneca. Me vacuné con domicilio en la provincia de Buenos Aires, pero llamo y no me atienden. Si no me llaman, veré que hago", le explicó a este sitio.
Resulta que tener solo una dosis de la vacuna le genera cierto pavor. "Me quiero tranquilizar, porque esto me ponía loca. Expliqué mi situación y hay tiempo todavía para recibir la segunda dosis. Obvio que quiero vacunarme ya, porque mi hermano y su pareja están saliendo del COVID. Por suerte, ellos tienen las dos dosis", resaltó y aclaró que la primera dosis de la AstraZeneca le generó "fiebre" y "mucho dolor de cuerpo", situación que los médicos describen como normal.
Consultada sobre cómo estaba transitando la pandemia, la cantante se animó a revelar que no la está pasando bien: "Estuve con ataques de pánico. Por la pandemia, por los nervios y por la falta de laburo tuve ataques que ya había tenido a partir de la muerte de mi mamá. En aquella oportunidad no habían llegado a ser graves y los pude controlar con terapia. Pero con la pandemia, tuve dos ataques graves donde sentía que me moría".
Y agregó: "Ahora los estoy controlando, pero desde ayer que tengo un dolor fuerte en el pecho que no me deja respirar". Por estas horas, Julia se mantiene expectante, preocupada por lo que le haya podido pasar a su gran amigo Andrés Galfrascoli, a Fabián Nuñez y a la hija de ambos, la pequeña Sofía Galfrascoli de tan solo 8 años. Los tres se encontraban en el derrumbe del complejo Champlain Towers, en Miami.
La noticia mantiene en vilo a todo el país debido a que todavía continúa la búsqueda de nueve argentinos entre el casi centenar de desaparecidos, entre ellos el médico correntino, su hija y Núñez. "Ando medio mal, no sabemos nada en realidad de ellos. Todo esto es una tragedia, hablo de ellos y lloro. Hago un esfuerzo muy fuerte porque estuve con ataques de pánico hace poco", le contó a este portal.
Lejos de querer ahondar en el tema, la aristas reconoció que se mantiene en contacto con la hermana del médico de 44 años y que espera que ésta pesadilla concluya lo antes posible con un final feliz para todos. Actualmente Julia se muestra ansiosa de volver a los escenarios, luego de un año que la mantuvo principalmente recluida en su casa a causa del COVID-19. "Me generó y le sigo teniendo temor a este bicho", aclara.
De hecho, se animó a participar de un programa de televisión casi un año y medio después de la llevada de la pandemia. "Me re contra cuido. Fui por primera vez a un programa de televisión después de un año y medio. Necesito empezar a salir porque estoy encerrada y el miedo no me hace bien. Estoy mucho tiempo en mi casa. Tampoco la pasé ni la pasó bien laboralmente", contó.
Los compañeros de trabajo de Julia la definen como un ser de "luz". Y es que a pesar de tener dificultades económicas, ella no solo no dejó de depositarle el sueldo a sus empleados, sino que además ni siquiera se demoró un solo día en hacerlo. "No tengo tanto resto como otros artistas que laburan en la televisión. No tengo un sueldo fijo ni nadie que me mantenga. Todo pasa por mi. Fui buscando recursos como dar clases por Zoom desde casa", asegura.
Y suma: "Soy jubilada con la mínima y con eso me alcanzó para pagar algunas cosas. Estoy viviendo de los pocos ahorros que tengo. A los que les va bien siempre es a los conductores de televisión, conductores radiales y a los periodistas de la televisión. Pero los artistas fuimos los primeros en irse y somos los últimos en volver. Ahora estamos contentos de que se empezó a abrir un poco la historia, con un cupo limitado, pero algo es algo".
En este momento, la cantante sostiene que su única ambición es "tener salud y ser feliz". "Que mi familia y amigos estén bien y tener un plato de comida en la mesa. Nunca fui fanática de la cosa material y siempre pensé que mientras pueda seguir laburando con salud, lo iba a hacer. Con la pandemia tomé verdadera dimensión de lo que es tener laburo constante y una buena organización económica", resaltó.
¿"Vuelvo a ser Luz" habla de tu presente?
- Mira lo que es el destino y las cosas que surgen cuando deben surgir. El disco lo grabamos a mediados de 2019, cuando la pandemia no existía. Estábamos en plena época de elecciones y veía a la gente, incluida yo, preocupada por quienes iban a ser nuestros nuevos gobernantes, la famosa grieta y un ambiente gris o poco iluminado.
Entonces agarré a Lito (Vitale) y le dije que quería hablar de amor en el disco y que el título sea referente a un renacimiento o bienestar. La primer canción que me acercaron fue "Sos", la cual repite vuelvo a “Ser Luz”. Ahí fue cuando dije "ese es mi título". Quería reflejar ese mensaje, el de volver a estar iluminados, para este nuevo disco.
La libertad interpretativa es uno de tus sellos más característicos, ¿se te cuestionó por eso en algún tramo de tu carrera?
Que yo recuerde, no. La interpretación se fue mejorando a través de los años. Hubo un momento en mi carrera cuando dije "¡Basta, Julia!". Tenía buena afinación y decidí dedicarme a la parte interpretativa. Hay un momento en la canción que tiene que fluir con la emoción y la buena interpretación es eso. Quizás cuando saqué un disco de tango, hubo un periodista, que no recuerdo ahora, que dijo que tenía una voz excelente, pero que le faltaba "mugre" para cantar tango.
¿Ganar el premio Gardel y la Estrella de Mar fue un mimo después de todo lo que te tocó vivir?
Totalmente. Fue un reconocimiento inmenso y ¡en plena pandemia!. Ganamos un Gardel y recibir el premio en medio de estas circunstancias y la operación fue hermoso. Creo que estoy levantando los frutos de tantos años de laburo. Me siento feliz con el reconocimiento. Estamos chochos con el Gardel todos los que participamos del disco.
Y el Estrella Del Mar fue hermoso y un show del carajo. Fue la primera vez que me presentaba en plena pandemia y con un cupo limitado durante el verano. Hubo mucha emoción en aquel show. El del 9 de julio va a ser un show único, con canciones que grabé con Daniel (García) y no canto desde hace un montón de tiempo.
Va a estar nuestra hija Elis de invitada. Va a ser un show con mucha emoción y con canciones que el público, que me sigue desde hace mucho tiempo, me piden constantemente. Le propuse a Laura (su otra hija) cantar conmigo, pero esta vez me dijo que prefería verme desde la platea. La elección de la fecha no fue al azar, elegimos otras fechas patrias para hacer presentaciones pero ninguna prosperó por mis miedos y las restricciones.